Griselda Blanco fue hallada sin vida este sábado en su residencia. A partir de este suceso, las hipótesis de asesinato fueron fuertemente vinculadas a su vocación, ya que como comunicadora denunció distintos hechos de corrupción. Sin embargo, se descartan hechos premeditados.
La investigación del homicidio a la periodista Griselda Blanco, sucedido en Curuzú Cuaitá, Corrientes, tomó una fuerte inclinación en las definiciones criminológicas durante la jornada de este martes, ya que las pruebas obtenidas en las últimas horas indicarían un supuesto asesinato que no pudo estar premeditado debido a las acciones ocurridas.
Griselda Blanco fue hallada sin vida este sábado en su residencia. A partir de este suceso, las hipótesis de asesinato fueron fuertemente vinculadas a su vocación, ya que como comunicadora, Blanco llevaba adelante una coyuntura de denuncias al poder local, al mismo tiempo que compartía desde sus redes sociales información sobre casos de abuso sexual y de impunidad policial y judicial. En ese sentido, la abogada Silvia Casarrubia, quien compartía el vínculo de amistad con la comunicadora, explicó que Blanco recibía amenazas a diario: “En marzo Griselda expuso el caso de un policía denunciado por abuso sexual y luego recibió una carta documento de ese oficial”, aseguró, y redobló: “También difundió irregularidades que sucedieron en Curuzú Cuatiá, donde vivía, como la muerte de su amiga aparentemente por mala praxis”.
El primer vinculado como principal sospechoso al hecho homicida fue su pareja, Armando Jara, quien fue registrado por una cámara de seguridad ubicada en la vía pública al ingresar a la escena del crimen 20 minutos luego del acto. No obstante, si de por si esta prueba no es suficiente, desde el entorno de la comunicadora se descree en esta posibilidad, tanto por parte de sus hijos, que apuntan a “otro vínculo”, como por parte de Casarrubia, que remarcó la necesidad de investigarlo, pero que a su vez descartó que alguna vez su amiga mencionara alguna situación de violencia vinculada al masculino en cuestión. Además, la abogada insistió en que el foco debe ser puesto en sus vínculos laborales: “Hace unos días me dijo ‘me van a mandar a matar’, me lo dijo riéndose, yo creo que se reía de los nervios, y le pedí que se cuide porque vivía en un pueblo chiquito, donde más de alguno cree que es dueño de la vida y la libertad de las personas”.
Lo cierto es que, producto del resultado de los allanamientos al domicilio de la víctima y en relación a lo encontrado, los peritos encargados del caso conducen su hipótesis a un “asesinato por una pelea improvisada con alguien conocido”, ya que “ella misma abrió la puerta”, lo que descarta una preparación previa, sumado a la utilización de un cuchillo tramontina y un soga con la que se hizo el estrangulamiento. Además, en la escena se hallaron cabellos que no pertenecían a Blanco y que se suponen que pertenecen al homicida en cuestión, lo cual no solo devela una pelea previa al asesinato, sino que también asegura una prueba eficiente en materia de ADN.
La investigación está a cargo de la fiscal María José Carrero Sahagún, y cuenta con el apoyo de la División de Homicidios de la Policía Federal. En este caso, se descarta como carátula una venganza u homicidio premeditado ya que, normalmente el asesino en cuestión acudiría al acto con un arma de fuego o blanca, para asegurar el resultado. Sin embargo, tanto el cuchillo Tramontina como la soga fueron elementos encontrados “al paso”, por lo cual se trasluce que las decisiones coyunturales fueron tomadas en el momento.
Más allá de que el resultado al que se encaminen las hipótesis descarten una co-actuación, dadas las circunstancias no se pueden descartar los vínculos laborales y políticos que las denuncias de Blanco compartían con intereses de terceros. Incluso Casarrubia mencionó que el hijo de la víctima se comunicó de inmediato con ella, y le hizo saber que la propia Blanco le suministró el número para comunicarse con la abogada en caso de que algo sucediese. Casarrubia también recordó otras situaciones de la misma índole sucedidas en Corrientes no esclarecidas “como sucedió con el periodista González Moreno en 2009, quien denunció por corrupción al candidato del radicalismo correntino, Ricardo Colombi”. Restan para esta jornada de martes nuevos allanamientos además de los resultados de ADN, cosa que, según los entendidos en la materia, resolverá el caso en “cuestión de 24 o 48 horas” .
La instancia se convocó para abordar tanto expedientes relacionados al debate del traslado de la denominada “zona roja” en el Barrio El Mondongo, como el proyecto para la creación de una mesa de enlace para el abordaje de la problemática.
A fines de la semana pasada sesionó sin quórum de integrantes de Juntos por el Cambio (JxC) la comisión de Equidad y Género, presidida por la concejala del bloque del Frente de Todes (FdT) y referenta de la Corriente Nuestra Patria (CNP), Cintia Mansilla. La instancia se convocó con el objetivo de abordar expedientes relacionados al debate del traslado de la denominada “zona roja”. La definición de avanzar con la reubicación se desprendió del Código de Convivencia Ciudadano que se aprobó pese a grandes resistencias en noviembre del 2021 con la mayoría oficialista y el voto en contra de todo el bloque del FdT.
Asimismo, en el listado de los temas que se trataron estuvo el pedido de informe respecto a las políticas desarrolladas por la Secretaría de Asistencia a la Víctima y Políticas de Género, y un proyecto para la creación de una mesa de enlace para el abordaje de la problemática de la reubicación de la Zona Roja. Luego hubo un pedido de informe dirigido al Ejecutivo municipal que busca saber cómo se lleva adelante la implementación del Cupo Laboral Travesti-Trans, ley nacional a la que el Concejo Deliberante se adhirió por unanimidad.
Pese a la ausencia del bloque de JxC, el encuentro se sostuvo con la presencia de Claudia Vasquez Haro y Diego Prieto, que representaron distintas organizaciones de la diversidad; el director del Programa de Monitoreo Territorial de la Violencia Policial, Rodrigo Pomares, y el director del Programa de Control de Corrupción, Federico Schmeigel, dependientes de la Comisión Provincial por la Memoria; y la Directora provincial de Situaciones de Alto Riesgo y Casos Críticos del Ministerio de Mujeres de la Provincia, Silvina Perugino.
Mansilla resaltó la importancia de construir un dialogo intersectorial y al respecto destacó: “Esta situación se da sin consentimiento de quienes lo ejercen (al trabajo sexual), imponiendo la zona y propiciando las condiciones para la imposición de multas a quienes circulan por fuera de ese espacio”.
En este sentido, la presidenta de la comisión de Equidad y Género agregó: “De implementarse, pasaría por encima de los derechos humanos del colectivo Travesti-Trans principalmente. Nos preocupa aún más este punto ya que no hay respuesta alguna de parte del Municipio”.
La concejala por el FdT, Yanina Lamberti, declaró vía Instagram: “Lamentablemente, esta reunión no contó con la participación del bloque de JxC. La ausencia de Juntos demuestra un claro desinterés en abordar temáticas fundamentales para la igualdad de género”.
Por su parte, la presidenta de OTRANS, Claudia Vázquez Haro, expuso que “las organizaciones hemos sido muy claras frente a esta decisión política del intendente Julio Garro a través de Iliana Cid. Nos convocaron a tres o cuatro reuniones el año pasado, en las que nos sentimos profundamente violentadas por un lado, porque no tuvimos nunca una respuesta”.
Al respecto, la Comisión Provincial por la Memoria señaló que desde el Municipio de La Plata se informó la reubicación mediante un operativo conjunto con el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires. De esta manera, se genera una especial preocupación, ya que existen indicios fundados de que se pueda usar la fuerza pública para llevar adelante la medida, lo que decantaría en un potencial escenario de violencia que colocaría en una situación de especial vulnerabilidad al colectivo Travesti-Trans.
Finalmente, entre los temas que se trataron también se manifestó la preocupación por la suspensión por tiempo indeterminado de la Consejería y acompañamiento para la IVE/ILE del Programa Salud Sexual Integral de la Dirección de Políticas de Salud Estudiantil, dependiente de la Prosecretaria de Bienestar Estudiantil de la UNLP. Además, se declaró de Interés Municipal la realización de “El circuito de la Memoria” en “Una noche en los museos” un recorrido que se realizó el sábado 20 de mayo por diferentes puntos de La Plata vinculados a la memoria.
Poema deEdu,participante de la convocatoria de poemas “Daniel Omar Favero”.
El 28 de abril de 2021 inició el paro nacional en Colombia. El saldo total de asesinados fue de 80 personas casi todos jóvenes. Las protestas se extendieron por varias ciudades durante año y medio. En ese tiempo, escribí decenas de poemas para dejar memoria de lo ocurrido. Aquí les presento una selección de algunos de ellos, reunidos en un poemario inédito titulado: DISTURBIOS. Que está dedicado a todas las víctimas, a sus familias y a su memoria.
Espero que la paz llegue algún día a mi país y no tenga que estar escribiendo más sobre esto, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tienen una segunda oportunidad sobre la tierra.
Kike Ferrari nació en Buenos Aires en 1972. Formó parte del fanzine literario Juguetes Rabiosos y de la revista La Granada. Colabora con diversas revistas y portales, entre ellos Acoplando, la revista cultural del sindicato de trabajadores del subterráneo de la ciudad de Buenos Aires, donde trabaja.
Habló con Radio Trinchera en el marco del programa Plástico Cruel, sobre su libro Territorios Sin Cartografiar, que es parte de la colección Arqueologías del Futuro, sobre la nueva ficción extraña latinoamericana, de Indómita Luz, dirigida por Juan Mattio, Flor Canosa y Marcelo Acevedo.
¿Cómo es tu ruta lectora? Sabemos que sos fanático de Salgari, ¿Cómo fue el paso de la literatura de aventura a otro tipo de lecturas?
Hubo una pequeña transición en el medio, un momento en el cuál leí menos literatura. Coincide cuando termino la escuela primaria y empiezo la secundaria, y tiene que ver directamente con el descubrimiento del marxismo. Entro a la vida política al comenzar la secundaria, y durante un año, año y medio, prácticamente no leo más literatura, leo únicamente historia y teoría política.
Cuando vuelvo a la ficción, ya había crecido. Entonces, casi naturalmente, se da la transición que va de la novela de aventuras del siglo XIX, los piratas, las espadas, los venenos tropicales, a los géneros populares, las novelas policiales, y los rusos que me agarraron muy fuerte, como Dostoyevski.
En esa madurez literaria y en tu orientación marxista, ¿Encontraste algo en el policial que te interesaba más desde el lado social?
Eso estaba un poco presente en la vieja novela de aventuras también. Tengo la sensación de que los géneros populares tienen cierta tendencia general a la crítica social más o menos velada, depende el caso. Me gusta pensar que todas las cosas que yo después iba a pensar políticamente estaban más o menos prefiguradas en Salgari.
Por supuesto que el género policial negro tiene cierto componente social, en muchos de los casos menos explícitos, porque los autores eran ideologicamente de izquierda, en la cuál hay una fuerte crítica al capitalismo. no en su faceta legalmente criminal, como si el relato del crimen nos permitiera contar el sistema todo.
Igual, honestamente, cuando entro al género negro, entro porque me parecian muy entretenidas las novelas. El resto es un armazón que se construye con el paso del tiempo.
En todo esto, ¿Cuando aparece Borges?
Lo empecé a leer cuando tenía 13, 14 años, sin ningún éxito. Yo todavía estaba muy pegado al malditismo, a los autores borrachos, que vomitaban en el piso, que querían romper cosas y morían más o menos jóvenes de enfermedades venéreas. Borges era un señor muy mayor que además, cuando yo era chico, salía en la tele, era como el Grandes Valores del Tango pero de la literatura. Entonces llego a él con muchísimo perjuicio, y por supuesto no lo puedo leer.
En una lectura posterior, más ligada a mi descubrimiento de Onetti, que no habla bien de Borges pero lo hace con mucho respeto, lo cuál es muy raro, lo fuí a buscar con otras lecturas, más cargado del bagaje del conocimiento técnico, esto que trae Onetti, malditismo en el contenido pero mucha habilidad en la forma. Borges lo tiene mejor que nadie, y después hace un camino que es inagotable. Borges no termina nunca.
Sarlo decía que el día que se termine la era Borges, iba a arrancar la era Saer.
Yo no lo veo próximo. Puede ser que suceda. No lo veo cerca. Tengo la sensación que el universo Borges también agota a Saer. Saer es un escritor de la órbita. Es lo que dice Piglia en Las tres vanguardias, tratan de irse a un lugar que Borges no haya tocado. Walsh se va a la no-ficción, Saer se va a esas novelas tormentosas, sobrecargadas, Puig se va al imaginario de lo kish y lo popular. Pero todos orbitan alrededor de Borges, aunque sea para alejarse. Creo que cuando se acabe Borges lo que vamos a ver es liquidada la literatura del siglo XX, y no creo que eso sea pronto.
Metiéndonos en tus libros, ¿Cómo es lidiar con un clásico, con un libro de culto, que es Que de lejos parecen moscas?
Trato de escribir en contra de las cosas, así que escribí en contra de las moscas. Es un libro que yo quiero mucho, que me dió cierto nombre, un lugar en la literatura. Viéndola con distancia es una novela que me parece que está muy bien, no tengo aprensiones. Pero ya la escribí, así que trato de ir a buscar otras cosas. A veces esas otras cosas eran alejarme, y a veces, como hice con El significado del fuego, retomar la historia pero ir para otro lado.
En cualquier caso, el trabajo luego de Las moscas, parece ser un foco gravitacional de mi literatura posterior. Parezco estar escribiendo, en mayor medida, para acercarme o alejarme de esta novela. Estoy pensando en voz alta, no tenía masticado esto. Pero me da la sensación de que un libro que está tan fuertemente ligado a tu nombre, como si el escritor y el libro fueran la misma cosa, tiende a generar eso, un polo de atracción en la cuál uno se aleja o se acerca de eso que por alguna razón le salió bien una vez.
Lo mismo que orbitar a través de Borges.
Sí, es eso. A diferencia de otros libros míos anteriores, que no me gustan, me parecen trabajos mal realizados, un poco apurado. Siempre fuí partidario de publicar igual, escribo el mejor libro que puedo en el momento y después no importa si no me gusta, porque después soy otro, no tiene importancia. Pero Las moscas es un libro que todavía a mi me parece que está bien trabajado, bien logrado, que encontró ciertos puntos de síntesis en lo que yo suelo querer trabajar. Entonces sí, es eso que vos decís, orbito tratando de alejarme, en la medida de lo posible, usando lo mejor que le encuentro, y dejando el resto. Como hacen Walsh y Saer con Borges.
En Territorios sin cartografiar te alejas del policial negro más crudo, ¿Cómo empezas a meterte en otros géneros? ¿Cómo aparece la historia y la manera de narrarla?
Considero varias cosas para mi alejamiento del género, bastante paulatino. La primera es que ya lo había escrito. Una novela negra, con todas las reglas del caso, es Las moscas, y un libro de cuentos bastante pegados al género. Entonces, para que la caja de herramientas como escritor se amplíe, tenía que visitar otros lugares. Ya Todos nosotros es un pasito de alejamiento, se arrima más a la ciencia ficción.
Territorios se fue armando, coincidieron varias cosas. La primera es que leí a China Mieville, que me modificó la forma de leer como hacía muchos años no pasaba. Creo que Paco Taibo II fue la última vez que un autor me había movido tanto la estantería como escritor. Entonces decidí tomar la serie de desafíos que la literatura de Mieville traía, y la serie de novedades (para mí por lo menos, que no era un lector muy asiduo de fantástico) y tratar de aplicarlas a mi trabajo.
Lo otro que pasó, fue que la realidad se fue enrareciendo. Yo que venía hace muchos años pegado al realismo, empezó a no alcanzar para lo que tenía que contar. La semana pasada, con la entrevista que le hicieron a Juan Mattio, apareció una nota de que en China hay una plataforma que está permitiendo a la gente dialogar con los avatares de las personas que murieron, con la información que les quedó. Es … de Materiales de Juan. La realidad se enrarece y la literatura nuestra también se va enrareciendo, pero finalmente la realidad nos alcanza.
Me parece que Territorios es el libro mío en el cuál la forma y el contenido están más cerca. De hecho, yo no sabría decir de qué trata el libro. Eso está incluido en la forma en que es contado, desde muchos lados. Muchas veces trabajo las novelas desde colecciones de relatos, y en este caso lo que hice fue el camino opuesto. Articulé un montón de cuentos para que den una forma que podría ser una novela, pero que no llega a serlo. Es una inestabilidad buscada. Mi literatura y el momento en el que estaba viviendo no permitía estabilidad de ninguna especie.
No hay la primacía de un personaje, por lo menos en la distinción tradicional entre principal y secundario. El personaje principal es el mundo roto que se crea ahí, es la piedra angular. Lo que une los cuentos es el mundo creado, no los personajes, ni las historias propias.
Es exactamente eso lo que quería contar. Digamos, la versión que yo podía contar de la ciudad y la ciudad, donde el protagonista es ese mundo disociado. Que el eje del relato sean los mundos superpuestos.
Leí en Acoplando que el último de los cuentos ya estaba escrito, un relato de la pandemia. ¿Cómo pensaste la construcción entera en base a este mundo?
Si. De hecho hubo cosas que entraron después, por ejemplo, el cuento de una versión de mi mismo que mata a Ricardo Iorio lo había escrito hace varios años para una antología, La mano maldita.
El cuento que cierra fue en primera instancia una nota que me pidió Clarín que era sobre cómo iba a ser el día después de la pandemia, según mi buen imaginar. Esto era al principio cuando la pandemia apenas tenía un mes y medio o dos. Reescribí ese mismo texto para Acoplando y después lo reescribí para cerrar el libro. el cuento de Batman también ya estaba escrito.
Es raro cómo se arma, porque el que yo creo que es el texto que aglutina el libro, el que le da sentido al relato, es el texto de la inundación de Buenos Aires, y lo escribí al final. El libro pareciera que no tuviera sentido sin ese relato, pero apareció último. Por eso te digo: es muy inestable, es un material muy inestable Territorios, como lo que quiere contar.
Conocemos cuentos tuyos, en este libro y por fuera de él también. Pensamos en El Cazador de Ratas, en Territorios sucede con Batman. ¿Cómo es el ejercicio de la reescritura?
Es un ejercicio que me gusta un montón, me parece que es un ejercicio que me lo traje de la música, en la literatura no se usa mucho. En la música es muy habitual; las bandas que hacíamos metal en argentina teníamos un cover. dos o tres preparados para cuando el show se caía. Un poco es eso, son relatos que uno conoce mucho y entonces le podes dar alguna vuelta de tuerca, encontrar de qué manera va a sonar como vos sonás una cancioncita que es de otro. Es un ejercicio que yo empecé a articular muy al principio. Lo hago hace mucho tiempo y viene de un libro que se llama Vacío Perfecto que es de Stanislaw Lem, un libro que son críticas de novelas que no existieron. En ese libro hay una crítica a una novela de un autor italiano que es una reescritura de El Idiota de Dostoiesvki, contada desde la óptica de la prostituta. Me pareció una gran idea. Esto que dice Piglia, correr el foco del relato.
Esto que decías de reescribir esos clásicos que conocemos hace tanto y correr el foco es un poco lo que hace Gabriela Cabezón Cámara en La China Iron.
No me canso de decir que Gabi es la mejor de todos nosotros. Desde su primer libro (La virgen cabeza) había una cosa, lo que yo llamo una promesa incumplida. Cuando apareció ya se intuía, estaba potencialmente ahí la mejor autora argentina. No estaba pagado ahí pero ese libro era mucho mejor que la primer novela de todos. Con Le viste la cara a Dios se fue acercando más. Yo creo que La China Iron viene a cumplir todas las promesas que Gabi nos había hecho.
Nombraste a Paco Ignacio Taibo. Vos tenes gran cercanía con él. ¿Cómo es el antologador de un homenaje?
Hermoso fue. Todo lo que pasa conmigo alrededor de Paco es el gran momento mágico de mi relación con la literatura. Lo admiro muchísimo.
Lo estaban atacando muy duro porque había entrado a dirigir el Fondo de Cultura Económica, y es una persona bastante barrabrava para declarar, entonces toda la reacción mexicana le estaba pegando muy fuerte. Como digo en el prólogo estoy harto de los tributos post mortem. El momento de festejar a la gente es cuando está acá para poder festejar con ellos, abrazarlos y decirle lo importante que fueron para nosotros. Y si hay un momento para abrazar a los compañeros es cuando los malos lo están atacando. Entonces, en el más estricto de los secretos, porque a Paco no le gustan mucho los homenajes, contacte como a cincuenta autores, de los que quedaron treinta y pico, por los tiempos de publicación, que eran medios ajustados, y la gente tiene que laburar. Es una lastima. Si hubiéramos tenido un año más de tiempo hubiera sido un libro mucho más complejo en relación a la mucha gente que lo quiere.
Finalmente lo pudimos presentar en México, con él, que no sabía. Le dijimos que íbamos a hacer otra cosa. Fue muy lindo, muy emocionante, muy lindas las respuestas. A uno de los primeros autores que yo les pedí un texto fue a Andreu Martín, escritor catalan, bastante mayor. Me dijo que estaba retirado, que lo disculpara pero que no escribía más, y fue el primero que me envió un relato, diez días después. Eso es lo que todos le deben a Paco.
¿La literatura se completa con el lector?
La literatura es ese momento, no es antes. Antes lo que hay es escritura. Es una noticia que nos trajo Borges en 1949, cuando escribió Pierre Menard, autor del Quijote. La literatura sucede únicamente cuando hay alguien leyendo, ahí se completa el relato.
Nació en Mar del Plata, en 1997. Actualmente reside en La Plata. Estudia la licenciatura y el profesorado en Música Popular en la UNLP. Conductor del programa de radio Plástico Cruel.
Nació en Carhué, provincia de Buenos aires, en 1992. Actualmente reside en La Plata. Escritor, también se desempeña como conductor de radio. Dicta talleres y encuentros literarios. Publicó el libro de cuentos, microrelatos y poesías, No hay que jugar en la casa vieja y otros relatos (2020) Pájaros Punk (Malisia 2022)
Kike Ferrari compartió con Trinchera el primer capítulo de “Si estás leyendo esto”. Esta novela aun inédita en la que decide rondar a Borges, pero que también, decide intervenir la literatura, nuestra literatura, por medio de un recorrido por algunos de los autores más importantes la literatura argentina.
“Estoy escribiendo una novela que se va a llamar “Si estás leyendo esto”, que orbita un mito sobre Borges. Es una novela, pero también es un ensayo, mi aporte a la crítica literaria va a ser en forma de ficción, de novela. Si logro hacer lo que quiero hacer, voy a dar cuenta en la novela, más o menos, de toda la historia de la literatura argentina, en torno a un objeto que tuvo Borges.”
Kike Ferrari
Los papeles / 13 de mayo de 2022
Afuera puede ser julio o enero. Puede ser diciembre. Abril. Ser media mañana o tarde en la noche. Afuera. Puede diluviar, arreciar el sol. La luna puede brillar en cuarto menguante. O no. Pero afuera. Acá, como siempre, el quinto subsuelo de la Biblioteca Nacional, es –la luz blanca y un poco enfermiza de los tubos fluorescentes, los interminables anaqueles de metal en que se amontonan los libros, las ráfagas de aire fresco que mantienen la temperatura necesaria para conservarlos sanos, el piso de cemento gris, el enrarecido aroma del encierro– un inframundo de papel y tinta.
Adrián mordisquea un lápiz negro. Una vuelta más, piensa. No quiere resignarse a terminar la jornada. Puede ser hoy. Siempre está esa idea. Y si justo ahí, en ese estante o en el de arriba, hay un manuscrito escondido, una anotación perdida en los márgenes de cualquier libro –ese, aquel– que, por no quedarme un poco más, por irme ahora –¿a qué?, ¿a la cena recalentada y uno o dos whiskys y el ronroneo Emma y un capitulo de una serie policial en Netflix?–, dejo de encontrar.
Consulta el celular. Puede ser cualquier día de cualquier mes a cualquier hora y con cualquier clima. Pero son las ocho y cuarto de la noche del viernes negro de este mayo desangelado y afuera, según San Google, la temperatura ronda los quince grados. Cielo despejado toda la noche, anuncia el Servicio Meteorológico Nacional.
Le molesta el pelo sobre los ojos, a Adrián. Se hace un rodete y lo sostiene con el lápiz negro. Encara uno de los pasillos que conoce de memoria con la repetida sensación –hay algo que no vi– y los dedos rozando los lomos de los libros.
Hay días en que el desasosiego puede más. Mal que le pesara al Viejo, las bibliotecas no son infinitas y la tarea que Adrián se propuso ahí tiende a agotarse. Cada mínima anotación que encuentra –como las últimas pepitas de oro en una mina en la que ya nadie excava– lo acercan un paso más al final de su búsqueda. De su búsqueda ahí. La que empezó hace tantos años y tantas maravillas le trajo. Porque, como canta su amado Nick Cave, las estrellas tienen su momento y luego mueren.
Se consuela pensando que el cielo está lleno de estrellas.
Siempre habrá praderas vírgenes, piensa, estantes en los que nadie haya mirado. Pero para llegar a ellas necesitamos otro milagro. Pasa al plural el pensamiento de Adrián, aunque está solo ahí abajo, en el quinto subsuelo de la Biblioteca Nacional, porque en esto, y sólo en esto, el no es una individualidad sino la mitad de ese equipo que completa Paula; es una de la cabezas de un monstruo bicéfalo donde no hay uno sin el otro.
Un milagro, piensa.
Que María –le decimos por el nombre de pila, se sorprende como si fuera algo nuevo– nos dé acceso a la Babel guardada en la Fundación. O conseguir los mecenas que pongan el dinero para comprar algunas de las pocas colecciones que no se llevó alguna universidad gringa.
Un milagro, se repite.
Pero ellos no creen en milagros.
Creen en el empecinamiento del trabajo, el agua que horada la piedra.
Así que, pese a todo, esta noche, como casi siempre, gana la idea de que más importante que encontrar es buscar. Que es ahí, en el laburo, donde reside el sentido. Un juego de repetición. Recorrer una estantería, que pasen las horas, dos, cuatro, seis, y ante el cansancio o la desazón repetir, como una letanía: una vuelta más.
Una búsqueda frenética vestida con las ropas de la paciencia.
Se detiene frente a un estante y saca uno de los ejemplares a los que siempre regresa.
Pertinax Libris, los llama.
Este, por ejemplo, tiene algunas las características –primera edición, en alemán, tipografía gótica– de los libros en los que el Viejo anotaba. Pero no hay nada. Lo revisa de nuevo, como ya lo hizo cientos de veces, convencido de que algo se le tiene que haber pasado por alto las anteriores oportunidades y, al mismo tiempo, seguro de que no. Y es por esa certeza contradictoria que vuelve a éste –y a otra docena de libros– cada unos pocos días, como si se tratara de un ritual, a pasar las hojas buscando el subrayado, la anotación, la marca que lo desmienta y le dé sentido a la búsqueda.
Unos pasos más allá hay otro. “Adventures of Tom Sayer”, de 1886, edición en rustica de American Publishing Company. Hay apenas cuatro marcas en todo el libro. Cuatro líneas verticales a un lado de cuatro párrafos sin más anotación que un signo de admiración junto a la tercera de ellas. Pueden ser del Viejo o de cualquiera. Adrián cree que son de él. No sabe –en verdad no sabe– si reconoce el trazo en esas líneas verticales y el signo o sólo imagina reconocerlo.
Vuelve a los párrafos marcados, como cada vez que toma el libro.
WhenTom awoke in the morning, he wondered where he was. He sat up and rubbed his eyes and looked around. Then he comprehended. It was the cool gray dawn, and there was a delicious sense of repose and peace in the deep pervading calm and silence of the woods. Not a leaf stirred; not a sound obtruded upon great Nature’s meditation. Beaded dewdrops stood upon the leaves and grasses. A white layer of ashes covered the fire, and a thin blue breath of smoke rose straight into the air.
Gradually the cool dim gray of the morning whitened, and as gradually sounds multiplied and life manifested itself. The marvel of Nature shaking off sleep and going to work unfolded itself to the musing boy. A little green worm came crawling over a dewy leaf, lifting two-thirds of his body into the air from time to time.
They gradually wandered apart, dropped into the dumps, and fell to gazing longingly across the wide river to where the village lay drowsing in the sun.
They had paddled over to the Missouri shore on a log, at dusk on Saturday, landing five or six miles below the village; they had slept in the woods at the edge of the town till nearly daylight, and had then crept through back lanes and alleys and finished their sleep in the gallery of the church among a chaos of invalided benches.
Puede no querer decir nada. Alguien más puede haberlas marcado. No es claro que señalan exactamente. Pero Adrián no puede dejar de relacionar los cuatro párrafos con la semblanza de Twain de “Introducción a la literatura norteamericana”, en la que el Viejo escribió: “este gran libro abunda en admirables evocaciones de la mañana y de los atardeceres”.
Deja a Tom Sawyer en su estante y avanza un poco más, hasta otro de sus Pertinax Libris. Una primera edición, de 1934, en inglés, de tapa blanda y en bastante mal estado, de “A Question of Revenge” de Felix Lane, seudónimo del poeta Frank Cairnes. En la primera página todavía se lee el sello azul que dice Cirene Book Store, una librería del barrio sur de la que el Viejo era habitué en aquella época. La tapa, de una azul lavado muestra una mano escribiendo título y el nombre del autor, más abajo se ven siete redondelitos decrecientes, uno dentro del otro. La novela trata de la búsqueda de venganza de un hombre al que le mataron al hijo.
Adrián pasa las páginas, una a una, como tantas otras veces. Pero, a diferencia de todas esas otras, esta vez al llegar a la página 34, se detiene. Algo. Vuelve a la anterior y lee: 31. Nunca había reparado en esa página pegada. Palpa el grosor y la intuición hace el resto: abre el libro un poco más, separando las páginas pegadas del resto, y mira a trasluz.
Adrián reconoce la sensación. ¿Qué es ese rectángulo opaco entre las páginas?, piensa. La misma sensación que tuvo cuando, seis años atrás, halló el ejemplar de tapas anaranjadas del número 122 de la revista Sur con el cuento corregido. ¿Algo que me estaba esperando? Una corriente eléctrica ataca su cuerpo pequeño. ¿Y, desde cuándo me espera? ¿Cuántas veces tuve este mismo ejemplar en mis manos?
Su corazón es un caballo desbocado mientras las manos se le transforman en las de un cirujano. Con la pequeña navaja que lleva en el bolsillo del saco de pana negro separa las hojas. Precisión y cuidado. Hay un papel, doblado a la mitad, que continúa pegado a la página 33. Repite la operación, el cirujano Adrián. Cuando libera el papel, éste se trae adheridas el reverso de parte las letras de molde de la página. Tiene también algunas manchas de tinta, otras de humedad, un tachón. Y cuatro palabras manuscritas.
Cuatro palabras.
Cuatro palabras en una letra que Adrián conoce muy bien.
Las lee una y otra vez. No quiere llegar a ninguna conclusión todavía, pero le cae una lágrima que seca rápido con la manga del saco.
El dato se desprende del informe recientemente aprobado por el colegio de auditores de la AGN, donde se enumeraron múltiples irregularidades en la toma de una deuda que se paga día a día mediante el proceso inflacionario actual.
El colegio de auditores de la Auditoría General de la Nación (AGN) aprobó este miércoles el estudio realizado sobre la toma de deuda externa con el Fondo Monetario Internacional (FMI) durante la gestión de Mauricio Macri en 2018, firmado por casi 57 mil millones de dólares, que luego se tradujeron a un número cercano a los 45 mil millones.
El encuentro fue realizado en el salón Eva Perón de la sede de la AGN, y contó con la participación del presidente de la Comisión General de Deuda Pública, Francisco Fernández, como auditor general; Jesús Rodriguez, como titular del salón; y Miguel Angel Pichetto, Javier Fernandez, María Graciela de la Rosa, Juan Ignacio Forlón, Gabriel Estrada y Alejandro Nieva como auditores generales. El titular del Salón, junto a Pichetto y Nieva fueron los únicos votos negativos.
El informe develó que se cumplieron irregularidades en la firma del préstamo internacional y que ello derivó en un impacto negativo en “la estructura de la deuda y sus riesgos”. Por otro lado, más allá de las tecnicidades en materia de endeudamiento, este informe no hace más que reafirmar que se necesitó una maquinaria ilegal para aprobar un préstamo que hoy somete a la Argentina a la ruleta de los condicionamientos extraordinarios. Si una deuda no permite crecer, y por el contrario vacía las reservas y la ciudad de dólares (en una economía bimonetaria) el proceso de pago es estrictamente inflacionario.
En cuanto a las irregularidades, el informe develó que hubo una falta de autorización del endeudamiento y una omisión en la aplicación de los procesos específicos para préstamos multilaterales, además de la inexistencia del dictamen del BCRA sobre el impacto de la operación en la balanza de pagos. El acuerdo lo firmaron funcionarios sin facultades legales para hacerlo y faltó un asesoramiento jurídico oportuno y efectivo. No existieron intervenciones técnicas adecuadas para evaluar los costos y riesgos de la operación ni opiniones de la Unidad de Auditoría Interna. Sobre todo esto se destacó la omisión de la actuación del Ministerio de Finanzas que tenía a su cargo específicamente la gestión de la deuda pública.
“El 12 de junio (de 2018) se firmó el primer acuerdo con el FMI y los firmantes fueron el presidente del Banco Central (Federico Sturzenegger) y el ministro de Hacienda (Nicolás Dujovne), es decir, el ministro que no tenía facultades respecto de deuda pública”, destacó la AGN en su informe.
“Los procesos y procedimientos relacionados al préstamo no aseguraron la eficiencia y la efectividad en la gestión de la deuda, provocando incumplimientos legales, afectando la prudencia en la administración del endeudamiento, y vulnerando la adecuada supervisión del financiamiento”, concluyó el informe de la AGN. El documento confirmó algo que ya había sido reconocido públicamente por la entidad prestamista: la ferocidad de un préstamo que destruye naciones y, en este caso, se trata de su jaque mate más grande la historia, tanto de Argentina como de la misma entidad.
Bajo el lema “Licencias para paternar”, la medida ya comenzó a debatirse en el Congreso y el objetivo principal es ampliar hasta 90 días las licencias para las personas no gestantes.
Al principio de la semana se realizó la reunión Conjunta de las Comisiones de Legislación del Trabajo y de Mujeres y Diversidad de la Honorable Cámara de Diputados. Allí se comenzó a debatir el proyecto que tiene como punto principal debatir una mayor igualdad en las tareas de cuidado de les recién nacides.
En este sentido, la Campaña Ciudadana PATERNAR promueve la ampliación y extensión de los regímenes de licencias parentales en el país con el objetivo de promover paternidades con mayores niveles de co-responsabilidad y que contemple las múltiples y diversas configuraciones familiares actuales. A mitad de semana, el proyecto avanzó y se debatió en el Congreso.
Cabe recordar que en Argentina la licencia para los padres no gestantes es de 2 días y para las personas gestantes es de 90 días. Con este proyecto se busca que la licencia para los varones y personas no gestantes pase a ser de 15 días, con el objetivo de que en dos años se conviertan en 45 días y en ocho años en 90 días.
Al respecto, la campaña ciudadana Paternar en su plataforma de Changer.org recalcó que “Argentina es uno de los países más retrasados en la región y el mundo en materia de licencias parentales”. Además menciona que “se traduce en desigualdades de géneros muy acentuadas en el terreno de los cuidados, laboral y de la seguridad social”. En la actualidad el sitio cuenta con más de 10 mil firmas.
Por otro lado, aquellas personas que adoptan no cuentan con la posibilidad de tener una licencia por paternidad, tampoco las personas gestantes que no tienen empleos formales, trabajan de manera autónoma o son monotributistas. De esta manera, el proyecto presenta y busca cubrir esa falencia: abarcaría a todos los tipos de hogares y familias.
En este sentido, Paternar plantea el caso de Santiago Merlo, un papá trans que es gestor cultural: “Soy papá de dos hijes, Lola que tiene 10 años que llegó a nuestra familia por el sistema de adopción y de Vicente, que tiene 28 días, y qué llegó a la familia a través de un tratamiento de fertilización”. “Más del 90% de las personas trans no tenemos empleo” comentó Merlo.
La medida Paternar recalca que la ampliación y extensión de las licencias parentales es una de las herramientas que se necesitan para avanzar en la corresponsabilidad desde los primeros días y que el trabajo doméstico y de cuidados debe ser visibilizado, reconocido y contemplado.
Radio Trinchera diálogo con el psicólogo e integrante de Paternar, Matías Criado: “La idea es unificar todos los proyectos y que sea una pauta unificada para presentar a la cámara y la verdad que los proyectos son buenos. También para que tengas una idea es extender la licencia por maternidad a 126”.
“Con respecto a los monotributistas y los trabajadores informales o populares también buscamos que los ampare la seguridad social en este punto, osea ANSES, y eso va a ser algo muy positivo porque reconocemos que la mitad de Argentina está en este tipo de condiciones laborales”, agregó Criado.
“No se trata de solo ampliar en relación al derecho de cuidado, sino pensar un lugar equitativo, ya que hoy en día cuando una mujer va a pedir un puesto laboral o un aumento, si ven que hay un varón que compite en dicho lugar van a elegir al varón por el simple hecho de tener menos días de licencia. En la actualidad, el cuidado de las mujeres en este aspecto las restringe al momento de ser trabajadoras”, concluyó el abogado.
Por su parte, el integrante de la campaña Paternar y miembro del Conicet, Daniel Jones, celebró el inicio del debate de los proyectos en las comisiones de Legislación del Trabajo y de Mujeres y Diversidad de la Cámara de Diputados y expresó: “La campaña comenzó hace más de dos años, impulsadas por distintas organizaciones que queremos una modificación a la ley de Contratos de Trabajo de 1974 que establece 48hs de corridos para las personas no gestantes”.
“Una legislación que fue pensada bajo otro paradigma, donde se pensaba que el varón era exclusivamente proveedor económico y las tareas de cuidado recaían en la mujer madre”, explicó Jones. Además indicó que “hoy casi todos los hogares tienen doble ingreso con trabajo asalariado, pero esta situación de desigualdad supone una recarga muy grande en las madres y una imposibilidad para aquellos varones que queremos estar más presente en aquellos días”.
En tanto, detalló que “hay 35 proyectos presentados de distintos espacios políticos”, por lo que valoró: “Hay una voluntad legislativa de avanzar en este cambio”, al tiempo que destacó que “el proyecto más integral es que él presentó el Ejecutivo en mayo del año pasado (Cuidar en Igualdad)”.
Por último, Jones advirtió que “en la región, Argentina es el país con menor cantidad de días de licencia por paternidad”, lo que constituye “una deuda de la democracia en reconocimiento de derechos”.
En este sentido, Argentina viene con una ley de hace 50 años muy atrasada en el puesto 16 de 18 y requiere una revisión urgente. Hay que darle una importancia no solo económica, sino también social y cultural. Incluso en Europa se avanzó mucho en esta materia, ya que cuentan en algunos países con licencias de cuatro a seis meses. En Nuestra América, Uruguay cuenta con 15 días, Brasil con 20 días y los demás ya ampliaron la brecha. Otro país que se encuentra en la misma posición de Argentina es Colombia que busca estirar la brecha a tres meses.
A 75 años de la creación del Estado de Israel, que usurpó gran parte de las tierras palestinas mediante la masacre de su pueblo, distintas organizaciones sociales marcharon a la embajada Israelí para visibilizar la lucha.
En conjunto con el Comité de Solidaridad con el Pueblo Palestino, organizaciones sociales marcharon frente a la embajada del Estado de Israel en repudio y conmemoración del 75 aniversario del comienzo del “Naqba”: inicio del ataque incesante del Estado de Israel a Palestina para bloquear sus intentos de recuperación de su tierra robada ante la creación del Estado Israelí. El conflicto Israel-Palestina no es más que un hijo nacido del racismo prevaleciente históricamente en el continente europeo, donde las potencias que se han disputado las tierras a merced, desplazaron a la comunidad judía hacia la tierra palestina.
El “sionismo” es un término que explica la voluntad de la comunidad judía de crear un Estado soberano que deje atrás los altos niveles de racismo recibidos en Europa, donde transcurría una ola anti semita emergente a finales del siglo 19. En este momento, el austro-húngaro Theodor-Herzl promovió esta ideología bajo el nombre de sionismo en referencia al monte Sion, ubicado cerca de Jerusalén. Por su parte, Palestina fue colonia del imperio Otomano hasta su caída en la primera guerra mundial y fue dominada en 1922 por Inglaterra, que resolvió comenzar en 1933 una estrategia para enviar a la comunidad judía a Palestina. A medida que el éxodo crecía, el pueblo palestino reventó su molestia ya cargada por la dominación británica y se sublevó ante el poder pirata, al mismo tiempo que cargó contra el envío exorbitante de judíos hacia su tierra. Esto daría inicio a la creación de una futura base de las potencias occidentales en esta tierra, ya que Gran Bretaña emitió una contraofensiva que años más tarde derivaría en la creación del Estado de Israel, mediante el mecanismo de ONU e impulsado por los Estados Unidos en 1948.
Ante la negativa de Palestina de seguir en condiciones de dependencia, las potencias occidentales defendieron su predominio y decisiones, y asentaron su posición con la creación del Estado de Israel. Resolvieron auto entregarse el 52% de las tierras, cuando estas pertenecían en un 93% a nativos palestinos, debido a que solo el porcentaje restante se auto percibía como población judía, y de ellos solo la mitad contemplaban el sionismo.
Desde aquella fecha hasta la actualidad, la usurpación de tierras a Palestina ha sido la clave de la lucha que este pueblo decidió emprender, a costa de las millones de vidas perdidas, producto de la aniquilación llevada adelante por Israel y sus grupos económicos que la sostienen.
Por lo mismo, a 75 años de este hecho, se realizó una marcha frente a la embajada de Israel, donde participaron Nora Cortiñas de Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora, Tilda Rabi de la Federación de Entidades Argentino – Palestina, y organizaciones políticas como la Corriente Nuestra Patria, el Partido Obrero, la Izquierda Socialista, la CTA Autónoma, el MST, y la OLP-Resistir y Luchar.
En comunicación con el matutino de la mañana “526 al fondo” de Radio Trinchera, la presidenta de la Federación de Entidades Argentino-Palestina, Tilda Rabi, explicó que durante la marcha un grupo de policías los interceptaron porque “tenían denuncias de que grupos terroristas palestinos atentaban contra locales israelíes”, y aclaró que el único objetivo de la marcha era “visibilizar la situación en Palestina” y que tenían permiso para realizar dicha acción. “Ya están instalando ese tipo de relatos de que existen grupos terroristas palestinos en Argentina”, agregó Rabi.
Un jurado popular consideró responsables a cuatro efectivos policiales por provocar lo que se denominó la Masacre de Monte, en la que fueron asesinados cuatro jóvenes que chocaron con un auto en el momento que eran perseguidos a los tiros en mayo del 2019 en San Miguel del Monte.
Por unanimidad de los 12 jurados populares y tras más de ocho horas de deliberación, los policías Rubén García y Leonardo Ecilapé fueron considerados coautores del delito de “homicidio agravado por el abuso de la función policial y por ser cometido mediante el empleo de arma de fuego” en perjuicio de Camila López (13), Danilo Sansone (13), Gonzalo Domínguez (14) y Aníbal Suárez (22), por lo que recibirán como pena la prisión perpetua.
Asimismo, por mayoría de 10 de los miembros del jurado, los uniformados Manuel Monreal y Mariano Ibáñez fueron declarados culpables del delito de “tentativa de homicidio agravado por el abuso de la función policial y por ser cometido mediante el empleo de arma de fuego” de las víctimas ya mencionadas, que prevé una pena de entre 15 y 20 años de prisión.
En ese marco, los cuatro policías de la provincia de Buenos Aires (PBA) fueron considerados culpables de la “tentativa de homicidio agravado por su condición de miembros de una fuerza de seguridad” de Rocío Quagliarello, la única sobreviviente de la masacre que al momento del hecho tenía 13 años.
En el cierre de la jornada, la jueza y titular del Tribunal Oral en lo Criminal 4 (TOC) de La Plata, Carolina Crispiani, señaló que la audiencia de cesura, en la que se comunicarán las penas de los cuatro efectivos policiales, se ejecutará el próximo 2 de junio. Sin embargo, los fundamentos de la sentencia se conocerán una semana después.
La denominada “Masacre de San Miguel del Monte” ocurrió la madrugada del 20 de mayo de 2019, en el momento que efectivos de la comisaría local persiguieron a lo largo de la colectora de la ruta 3 a un Fiat 147 en el que viajaban cuatro adolescentes, tres de 13 años y uno de 14, junto a un joven de 22.
Los cinco chicos escuchaban música cuando los oficiales comenzaron a perseguirlos sin motivos y a dispararles, de acuerdo con los registros de las cámaras de seguridad del municipio, lo que provocó que el auto en el que iban chocara contra el acoplado de un camión que estaba detenido en la ruta y cuatro de los cinco ocupantes murieran en el acto.
La lectura del veredicto comenzó pasadas las 21.45 en la Sala A de los tribunales platenses con las palabras de apertura de la jueza Crispiani. En este sentido, la sala de audiencias estuvo repleta por decenas de familiares de las víctimas y por la sobreviviente Rocío, allí escucharon y celebraron, entre abrazos y gritos, los veredictos condenatorios.
Al respecto, el fiscal del juicio, Mariano Sibuet recalcó: “Las víctimas necesitaban este acto de reparación”. Además, el representante del Ministerio Público aseveró: “En lo personal, fue mucho tiempo de preparación de este debate. Tuve mucha interacción con la familia, he viajado a Monte en varias ocasiones”.
Por su parte, Susana Ríos, madre de Gonzalo Domínguez, sostuvo: “Siento mucho orgullo por el jurado. Tenía mucha fe, creía en la Justicia y así fue”. En paralelo, y a los gritos en medio de la sala de audiencias, el tío de Aníbal Suárez, Hugo Suárez, aseveró que su sobrino “no era ningún asesino, la Policía lo asesinó”.
En la puerta de los Tribunales ubicados en la calle 8 entre calle 56 y 57 de La Plata, permanecían más de un centenar de personas con bombos y carteles y señalaban: “San Miguel del Monte pide justicia” y “A los pibes los mató la policía”. Luego, al conocer la sentencia se abrazaron y gritaron con fervor el fallo.
Cabe señalar que a lo largo de la jornada de ayer se realizaron los alegatos de clausura de las partes, en los cuales el fiscal Sibuet pidió al jurado popular que considere “culpables” a Ecilapé, Monreal, Ibáñez y García, ya que señaló que “mostraron desprecio a las vidas de las víctimas” y que “cada uno de ellos hizo un aporte esencial” para provocar el desenlace fatal.
En este sentido, los abogados querellantes que representan a las familias de las víctimas coincidieron en que lo sucedido la noche del 20 mayo del 2019 fue un “homicidio brutal” y una “matanza injustificada”. Sin embargo, los defensores de los uniformados sostuvieron la inocencia de ellos, ya que endilgaron la responsabilidad de los hechos a Aníbal, conductor del vehículo en el que viajaban las víctimas. También consideraron que los agentes actuaron “en cumplimiento de su deber” al intentar identificar a los jóvenes antes de la persecución.
Tras los alegatos, los policías tuvieron la oportunidad de decir sus palabras finales, en las que se disculparon con los familiares de Danilo, Camila, Aníbal y Gonzalo, les dieron su “más sentido pésame”, sin embargo sostuvieron que no son asesinos.
Más rápido y fácil
1
Contacto Trinchera
Hola Para contactarnos: Dale al botón, dejanos tu mensaje y te responderemos a la brevedad.
Para suscribirte al Newsletter: Hacé click en el link de acá abajo y comenzá a recibir las mejores publicaciones, promociones y sorteos especiales de cada mes.