Dolores Etchevehere: “Del otro lado hay maniobras de una trama de poder muy fuerte”

Dolores Etchevehere: “Del otro lado hay maniobras de una trama de poder muy fuerte”

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Dolores Etchevehere en el predio Casa Nueva sobre el que ayer la Justicia reconoció su propiedad  (Foto: Telam)

Dolores Etchevehere, hermana del exministro de Agroindustria del macrismo, Luis Miguel Etchevehere, valoró como un “primer logro” el fallo que frenó el desalojo del predio que litiga con su familia, pero advirtió que “del otro lado hay maniobras de una trama de poder muy fuerte” de protección judicial, política y mediática que, según denunció, no acata la medida y persiste en “actos intimidatorios”.

Además denunció que su hermano no acató la decisión del juez Raúl Flores que resolvió no hacer lugar al pedido de desalojo del predio en disputa en el marco de un juicio sucesorio en la localidad de Santa Elena, provincia de Entre Ríos.

 “Puso un candado en la tranquera que da a la ruta en una actitud amenazante; es otro signo de su violencia”, advirtió.

Por último reconstruyó también el proceso que la impulsó a reclamar judicialmente y comprometerse con el Proyecto Artigas -una iniciativa agroecológica de trabajo comunitario desarrollada en las tierras en disputa-, y reconoció que viene de una familia “patriarcal, con un verticalismo muy duro, entre los que mandan y los de abajo, y en el último escalón la mujer”.

“Hay maniobras de un poder muy fuerte, un poder constituido por parte de la Justicia, parte del sector político, parte del sector privado, de gente poderosa.”

DOLORES ETCHEVEHERE-

¿Cómo entendió la resolución de la Justicia que frenó el desalojo?

Lo entendemos como un primer logro, pero debemos ser muy prudentes… Del otro lado hay maniobras de un poder muy fuerte, un poder constituido por parte de la Justicia, parte del sector político, parte del sector privado, de gente poderosa. Hay una trama compleja del otro lado. Ahora insistimos en que no están acatando lo que resolvió el juez: los demandados siguen en un acto intimidatorio. Luego de la resolución del juez, Luis Miguel Etchevehere puso un candado en la tranquera que da a la ruta, en una actitud amenazante; es otro signo de su violencia.

“Vengo de una familia patriarcal, donde la mujer está en el último escalón” (Foto: Telam)

¿Qué siente cuando escucha “queremos ser ciudadanos, no queremos ser Venezuela” como parte de los argumentos de su hermano Luis Miguel?

¡Por favor, parecen loros, loros repetidores (risas)! Todo un discurso con un mismo hilo. Yo insisto: por qué no presentan pruebas en el expediente judicial que avalen sus dichos. El jueves fui objeto de un documento que plantaron los demandados que decía que yo había cedido y vendido todo. La persecución por parte de los medios fue dura, tremendo. Este mismo documento se lo llevaron al juez que lo leyó y, en su resolución, dijo que era nulo.

¿Por qué tomó la decisión de judicializar y, al mismo tiempo, articular con Juan Grabois, referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP)?

No fue una decisión de un día para el otro. Si tengo que tomar un punto de referencia o un disparador, fue cuando leí la encíclica “Laudato Si” del Papa Francisco. Allí hay un concepto sobre la cultura del descarte y me sentí muy identificada; no solamente sobre el descarte hacia las mujeres, sino además en lo que hace a la cultura del descarte a los que trabajan la tierra.

¿Ese fue el punto de inflexión?

No, yo hice un quiebre hace 11 años. Después siguieron años en un proceso muy largo. La encíclica fue mi inspiración para cambiar, y empecé a escuchar de manera más atenta a Juan Grabois, y a investigar sobre lo que hizo y hace. Es un abogado brillante y es cristiano. Yo soy profundamente cristiana y eso también me hace acercarme a él. Lo llamé, nos reunimos, le presenté todo mi caso. Son un grupo de abogados muy profesionales; trabajaron profundamente en las pruebas del caso familiar y sobre el hilo completo de la investigación. Leyeron, investigaron, comprobaron. Y después de todo ese camino Juan me dijo “bueno yo acepto representarte”. Al mismo tiempo le pedí que pensemos en un proceso productivo virtuoso para ayudar a los demás, con función social, es decir en total sintonía con el trabajo militante de Juan. Le reitero: la principal afinidad que tengo con Juan (Grabois) es que es cristiano.

¿Cuáles son las acusaciones que pesan sobre sus hermanos?

Estafa, lavado de dinero, fraude al fisco, vaciamiento de empresas. Lo nuevo son las denuncias por violencia económica y extorsión que están radicadas en Buenos Aires, en el juzgado de (Daniel) Rafecas y el fiscal (Federico) Delgado. 

“Mis hermanos tomaron de facto la administración de la sucesión, a través de una firma mía falsificada” (Foto: Telam)

Los episodios de Santa Elena coincidieron con la aparición de un libro que revela conflictos de similares características en la familia Macri…

Es pura y total coincidencia. No tengo nada que ver con ese libro, no tengo ni idea. Yo no soy una estratega rusa.

¿Cómo funcionó la dinámica familiar que terminó en este conflicto?

Lo típico de una familia patriarcal. Un verticalismo muy duro, muy marcado, los que mandan siempre y los de abajo. Y en el último escalón, la mujer; nunca considerada como para participar de las actividades que ellos, los hombres, realizaban, que estaban relacionadas con la administración y el poder.

¿Cree que existe un componente de la cultura machista en el conflicto judicial?

Eso es algo obvio. Sin dudas. Todo lo que se refiera a una mujer es el descarte para ellos. Dijeron “murió papá, somos cuatro hermanos, tres varones y una mujer, listo a esta la corremos”. Yo he sido una mercancía para ellos, la posibilidad de acceder a más y más dinero: tomaron de facto la administración de la sucesión, a través de una firma mía falsificada. Ese fue el primer paso de ellos, falsificación de documentos. Yo seguí adelante, soy periodista y muy rigurosa: cada denuncia con sus respectivas pruebas. Investigué a fondo, me presenté ante la Justicia a través de muchos años y cuando empezaba el momento del trabajo de los jueces todo siempre se planchaba en el tiempo, se dilataba o detenía. Mis hermanos nunca pisaron los Tribunales de Justicia, nunca. Si bien fueron llamados a indagatoria, siempre las respuestas eran “que estoy en China, que estoy en Japón, que estoy con (Mauricio) Macri, que estoy a más 500 kilómetros”. Fueron citados muchas veces y nunca se presentaron.

¿Hay protección judicial y mediática en Entre Ríos?

Sí, en Entre Ríos y también a nivel nacional a través de los medios hegemónicos de comunicación. Yo veía que medios como Clarín, La Nación, Canal 13, difundían sus crónicas y silenciaban todo. Pero soy una mujer muy positiva y digo “si un camino se cierra, tomo el de al lado y transito igual”: comencé a relacionarme y a transmitir por radios comunitarias, pequeños medios de comunicación.

¿Cómo evalúa la reacción de un grupo de productores agropecuarios frente a la tranquera de su casa en las horas previas a la resolución judicial?

Atacan a una mujer; apuntan con tractores, jinetes y camionetas a una mujer para echarla, para sacarla y quitarle sus derechos. Para tratar de vulnerabilizar sus derechos. Y no conformes con los tractores, los jinetes y las camionetas, vienen al frente de mi casa y me dicen ‘tiene un salvoconducto señora para salir de la provincia’ como diciéndome ´te damos la seguridad de que no te molemos a palos… que no te pase algo´. Es algo inédito.

“Justicia, verdad y reparación”, los tres pilares del Proyecto Artigas, según Dolores Etchevehere

Dolores Etchevehere, la hermana del exministro de Agroindustria del macrismo, Luis Miguel Etchevehere, defendió los objetivos del Proyecto Artigas, la iniciativa agroecológica que atraviesa la disputa por la herencia de su familia y el uso del predio en litigio en la localidad de Santa Elena, provincia de Entre Ríos.

“El Proyecto Artigas tiene tres pilares fundamentales que son justicia, verdad y reparación. Arranca con el caso Etchevehere, pero buscamos extenderlo con una convocatoria a los sectores despojados y humildes, a las mujeres que son oprimidas o silenciadas y a todos aquellos y aquellas que consideren que sus derechos fueron vulnerados”, señaló Dolores en una entrevista con Télam.

Integrado por campesinos sin tierra, militantes, técnicos y organizaciones ambientalistas, el Proyecto Artigas se propone “trabajar la tierra respetando la naturaleza, sin envenenarla”, puntualizó Etchevehere.

¿Cuáles son las metas y objetivos del Proyecto Artigas?

Nuestros objetivos son producir alimentos sanos y transitar este camino que va a ser muy arduo para lograr el objetivo de la soberanía alimentaria. Yo insisto: no puede ser que en un país como Argentina, en un mismo pueblo, en una misma ciudad, en ese mismo país, haya un chico que no coma y otro chiquito que sí. Que un niño no tenga un techo y otro sí. Eso está mal, muy mal y no puede ocurrir. Por eso nosotros tenemos como objetivo producir alimentos a precios justos, en el que también haya ganancia con las ventas. Hay que abrir el plano, abrir las oportunidades; tenemos un país maravilloso, con espacio para todos.

Artículo publicado originalmente en Agencia Telam

Marcelo Cena
Marcelo Cena

Trabajador de Prensa en diversos medios. Militante de la vida Peronista. No soy neutral.

Deporte: uno de los sectores más afectados por el rebrote  de Covid-19 en Europa

Deporte: uno de los sectores más afectados por el rebrote de Covid-19 en Europa

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La segunda oleada de coronavirus en Europa empieza a hacer efecto en el deporte, y deja al descubierto las falencias de los protocolos sanitarios en cada disciplina, al mismo tiempo que pone en jaque a las instituciones deportivas a la hora de encarar las competiciones.

Sin dudas aquel continente, que supo ser ejemplar en su vuelta a la actividad deportiva, hoy es el más afectado por el rebrote del Covid-19: desde que se anunció que los casos habían crecido exponencialmente, el deporte no paro de tener bajas.

En España, se dio a conocer la baja del árbitro para el partido de fútbol entre Athletic-Levante, Valentín Pizarro , quien finalmente fue sustituido por Alberola Rojas. 

Por otro lado, en Italia, el piloto de motociclismo Valentino Rossi confirmó su positivo en el testeo PCR tras presentar algunas líneas de fiebre, y se el reconocido Gran Premio de Aragón en el circuito de Motorland, puntuable para el campeonato mundial.

En el Giro de Italia -competencia de ciclismo- la situación es aún peor: la burbuja estalló, varios equipos abandonaron la prueba, y se teme un contagio masivo. El Pro Cyclin y Thomas Gendt han pedido que se pare la carrer porque se sienten inseguros. Pese a esto, la competencia a seguido como si nada hubiese pasado.

El básquet también pone en cuestión la competición: en la Euroliga se dieron a conocer 31 positivos, repartidos en 5 equipos. A su vez, la liga de España informó la cancelación del partido entre Bilbao Basket y Real Madrid por el caso positivo de Fabien Caseur.

Si bien el Golf es uno de los deportes con menor impacto en cuanto al contagio de coronavirus, Dustin Jhonson dio positivo y se perdió el último torneo en Europa, que permitió que el español Jon Ram se transforme en el número uno del mundo.

Fútbol: el deporte elegido por el covid-19. 

Sin dudas el balompié ha sido el deporte que más a sufrido el Covid-19. Al ser Europa la máxima vitrina del fútbol a nivel mundial, ha tenido la urgencia de salir adelante pese al rebrote y a no encontrar antídotos.

En Holanda se comunicó que pese a las restricciones por la nueva ola de Covid-10, tanto la Primera como la Segunda División del fútbol masculino seguirán desarrollándose sin problemas. En ese sentido, llamó la atención que el fútbol femenino y sus campeonatos se suspendieran momentáneamente.

Jan Dirk van der Zee, director del fútbol amateur de la KNVB, denunció que “la necesidad de medidas más estrictas en toda la sociedad es evidente; estamos contentos de todas las precauciones estrictas tomadas por el fútbol profesional y con el hecho de que la continuidad de la Eredivisie y Eerste Divisie (Primera y Segunda división) no esté en peligro, sin embargo, nos resulta decepcionante que la Eredivisie femenina no se haya incluido en la decisión”. 

A su vez, añadió: “Holanda tiene 160.000 mujeres futbolistas y la Eredivisie Femenina es un campeonato con el que también nos mostramos a nivel internacional; nuestra liga tiene a 11 jugadoaras de las 24 seleccionadas para representar a nuestro país en los próximos compromisos -23 y 27 de octubre-, pero que no pueden jugar con sus clubes. Seguiremos luchando para que se reconozca el fútbol femenino como Liga de máxima categoría y discutiendo con el Ministerio en las próximas semanas”.

A su vez Merel Van Dongen, futbolista neerlandesa que este año juega en el Atlético de Madrid cuestionó: “¿Cómo se explica que la competición masculina continúe y la femenina no? Muestre a las niñas y al resto del mundo que las mujeres también son futbolistas profesionales de pleno derecho y vuelva a tomar esta decisión. No se puede tratar a la campeona europea y la subcampeona mundial como un equipo aficionado”.

Los repudios se viralizaron en las redes sociales y desde la delegación solo tardaron 24 horas en torcer la negativa y confirmar el fútbol fermenino continuaría con la competencia, pero con medidas aún más estrictas.

Por otro lado en Francia, pese al decreto del presidente Emmanuel Macron de toque de queda en las mayores áreas metropolitanas del país, el fútbol no se ha frenado y ya se ha registrado el primer gran brote en un equipo: el Montpellier ha reportado 12 casos de Covid-19 tras las últimas pruebas PCR realizadas al plantel.

Entre los contagiados del club de primera división, ocho son jugadores del primer equipo y cuatro forman parte del cuerpo técnico. El club galo ha anunciado que los afectados, cuyos nombres se desconocen, ya han sido aislados en sus domicilios para cumplir con la cuarentena obligatoria.

Pese a esto, el partido contra el Mónaco se jugó de igual manera. De acuerdo con el protocolo de la Liga de Fútbol Profesional francesa (LFP) para los partidos de la Ligue 1 y la Ligue 2, el encuentro no se anula siempre y cuando el club afectado cuente con 20 jugadores disponibles y al menos un arquero.

En Rusia también pasó algo parecido, pero al punto de romper el fair play y la lógica de la buena competición: Rostov, un equipo que necesitaba entrar a la Champions, jugó contra PFC Sochi, que ya estaba en puesto de clasificación. Días antes, Rostov dio a conocer que tenía 6 casos positivos y la dirigencia quiso postergar el partido, pero la Liga rusa decidió que se juegue y el Rostov puso en la cancha a un equipo de jóvenes – solo uno superaba los 19 años- y el partido lo terminó ganando Sochi por 10 a 1.

A su vez, esta semana se dio comienzo a la Champions League y la UEFA permitió el acceso de público local en los estadios que se compitan hasta el 30% de su capacidad, algo que llamó muchísimo la atención dada la situación sanitaria. Desde la UEFA, aseguraron que el ingreso al público dependerá de cada país y que cada club se deberá hacerse cargo de los protocolos correspondientes y una vez finalizado el encuentro deberá sanitizar los lugares utilizados.

Es necesario saber hasta qué punto llega la exprimidora del fútbol: al final del dia los que terminan perdiendo son los clubes y les deportistas, mientras que las únicos que ganan son las empresas que aprietan para que siga el show.

Esto deriva a lo que sucedió en Italia. El Napoli se ausentó del Allianz Stadium luego de que se comunicara una oleada de Covid-19 en el Genoa. El Napoli había jugado con el ‘Grifone’ el día anterior al inicio del diagnóstico masivo en el plantel rossoblu, y las autoridades gubernamentales instaron al club a no viajar. El equipo de San Paolo solicitó a la Serie A la postergación del encuentro, pero la respuesta fue negativa.

Pese al pedido del equipo napolitano, la Juventus emitió un comunicado anunciando su presentación en el campo a la hora pautada. Del mismo modo, La Lega Serie A -ente privado que se encarga de manejar y llevar adelante el torneo italiano- ratificó la fecha y hora del encuentro, ya que no encontraron motivo por el cual el equipo del sur no pudiera jugar.

Luego de analizar el caso, el Juez Deportivo de la Seria A le otorgó la victoria 3-0 a la Juventus por la ausencia del rival; también se determinó que el equipo del sur sufriría una reducción de un punto en la tabla de posiciones por el incumplimiento del calendario. Las autoridades del campeonato reafirmaron que estaban dadas las condiciones para que se jugara el partido sin mayores inconvenientes, pero jamás aclararon que la decisión había sido externa al club napolitano.

A su vez, el club disintió y aseguró que la Hacienda Sanitaria Local (ASL) fue la que ordenó al primer equipo del club sureño permanecer en aislamiento, luego de la exposición directa al virus, para evitar la propagación del mismo. “Napoli siempre ha respetado las reglas y la ley; esperamos con confianza el resultado de la apelación, creyendo firmemente en la justicia”, expresó el club napolitano que apelará al TAS -tribunal arbitral del deporte- para torcer la decisión.

Presionados por las empresas que soponsorean los torneos, los entes que se encargan de organizar las competencias ponen por delante la continuidad de la competencia y hacen vista gorda, en primer lugar, a la compleja situación santiaria del país, que también afecta a les deportistas, y, en segunda instancia, a las decisiones exteriores que perjudican de manera directa o indirecta a los clubes.

Teniendo en cuenta que el próximo fin de semana arranca la Copa de la Liga Profesional de fútbol masculino de nuestro país y que a mitad de noviembre vuelve el torneo profesional femenino, las acciones tomadas por los países europeos son un ejemplo de lo que no hay que hacer.


Eduard Paz
Eduard Paz

Proveniente del sur, me instalé en la ciudad de las diagonales. Fiel pensante que la política y el deporte van de la mano. Siempre me vas a tener al servicio de la comunicación del pueblo y su deporte.

Los pueblos queremos paz, pero con justicia social

Los pueblos queremos paz, pero con justicia social

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Hace algunas semanas el ex agente de inteligencia ruso devenido en comunicador/divulgador, Daniel Estulin, señaló que ante el colapso del sistema financiero global -que según afirma está destruido-, la única solución posible para dar nuevo cauce a la economía global, es una guerra. Plantea dos posibilidades: una guerra termonuclear entre las potencias mundiales o una guerra civil en EEUU.

Más allá de si se está de acuerdo o no con esta tesitura, lo cierto es que hay sobrados elementos que se pueden encastrar tanto en uno y como en otro sentido.

En cuanto a una posible guerra civil interna en los EEUU se pueden observar los recientes levantamientos de las comunidades afro -producto de la violencia racial de las fuerzas de seguridad-, reflejo de una situación de hartazgo de un sector de la población muy castigado. A ello se puede sumar el desastroso manejo de la pandemia del COVID-19 que hizo la administración Trump que ya cuenta con más de 8 millones de contagiades y casi 220 mil muertes.

A estos dos elementos hay que sumar no solo la retórica agresiva de Trump, sino la virulencia mediática (fomentada fundamentalmente por los Demócratas) contra el mandatario. Cabe señalar que incluso varios sectores del partido Republicano soltaron la mano al magnate e incluso están operando abiertamente para que pierda. Esto, obviamente, aumenta los niveles de polarización.

¿Imperio o Nación?

Para entender esto último es interesante retomar la diferenciación que introduce el analista Thierry Meyssan respecto de los proyectos de país que están en disputa en EEUU. Por un lado quienes profesan que EEUU debe dominar el mundo “conteniendo” a sus potenciales rivales (estrategia acuñada en plena Guerra Fría por George Kennan en 1946 y aplicada por todos los presidentes hasta 2016) y quienes, por el contrario, rechazan esta idea imperial y plantean el enriquecimiento de los estadounidenses (estrategia acuñada por el ex presidente ‎Andrew Jackson -1829-).

Según Meyssan, Trump pertenece a quienes son denominados “jacksonianos”, que “denuncian la corrupción, la ‎perversidad y en definitiva la hipocresía de los anteriores y exhortan los estadounidenses a ‎luchar, pero no por el imperio sino por su nación[1]. El famoso slogan de campaña “Make America great again”, da cuenta de esa particularidad. Obviamente esto no implica que el Estado norteamericano deje de funcionar bajo la lógica imperial, sino que representa un gran foco de tensiones internas.

De hecho, hace no mucho algunos analistas empezaron a especular con que había sectores de las FFAA y de los organismos de inteligencia estadounidenses que -de ganar Trump- podrían intentar un golpe de estado. También hay quienes analizan que tanto si gana Biden, como si lo hace Trump será difícil que se reconozca la victoria. El hecho, que haya grupos armados -que apoyan a Trump- en las calles y que demuestren su virulencia cotidianamente, complejiza aun mucho más el panorama.

Piezas de ajedrez

El otro escenario descripto por Estulin habla de una conflagración entre potencias mundiales en las que obviamente los EEUU son un actor principal. Si bien no lo explicita, está claro que sería en oposición a las otras dos grandes potencias: Rusia y China. Y los últimos meses ha habido una escalada de agresiones de parte de occidente a estas dos potencias.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin (izda.), recibe a su homólogo chino, Xi Jinping, en Kremlin, Moscú. (Foto: Hispan Tv)

En cuanto a Rusia, lo que ha venido sucediendo (además de las sanciones impuestas por EEUU y la Unión Europea) es un incremento sustancial de vuelos de aviones de fuerzas occidentales en las fronteras rusas. Ellas han sido denunciadas por el Kremlin una tras otra y ha obligado a la Fuerza Aérea de ese país a enviar aviones militares a impedir que ingresen en territorio sin permiso.

De igual manera han aumentado los ejercicios militares en Europa Oriental entre miembros de la OTAN y los EEUU  (en las fronteras de la Federación Rusa); incluso en momentos de pandemia. Los más recientes, fueron los realizados por EEUU y países de la alianza europea tanto en Ucrania como en Lituania en septiembre de este año, y más recientemente el simulacro de Guerra Nuclear entre Alemania y algunos miembros de la OTAN.

Obviamente a este escenario hay que sumar la venta de sistemas armas de EEUU a países europeos fronterizos con Rusia como Polonia, Rumania o Finlandia. Esto en consonancia con la escalada discursiva tanto europea como estadounidense. Todo lleva a pensar que hay una especie de encerrona militar, discursiva y económica que lleva a cabo desde occidente.

Guerra comercial y tecnológica

En cuanto a la situación con la República Popular China, es por demás conocido el enfrentamiento y la despiadada guerra comercial lanzada por EEUU contra el gigante asiático. No es Tik Tok, no es Huawei, es el dominio del mercado tecnológico, elemento de extrema sensibilidad para la industria militar y de comunicaciones, dos áreas estratégicas para ambas potencias.

A esta conocida batalla hay que sumarle las reiteradas denuncias de parte del país asiático de intromisión en asuntos interno de parte de los norteamericanos, ya sea en Taiwan, el Tibet, Hong Kong o el Mar de China.

Inversión mediática del agresor

Como suele sucede, la prensa hegemónica occidental, invierte la carga de la prueba. Los enfoques “periodísticos” (habría que llamarlos propagandísticos) de las “grandes” agencias de noticias no hacen más que justificar el accionar de EEUU y occidente y de responsabilizar a Rusia y China o sus aliados.

Esto no es nada nuevo, de hecho lo vemos a diario en los medios tanto de Argentina como de todo el continente. El engranaje mediático se vuelve clave para construir narrativamente que el responsable de todos los males es el adversario o el enemigo político.

Esta dinámica mediática, es complementa con el entramado de sectores del poder judicial, con organismos internacionales (que hacen silencio omiso), con ONG’s y sectores empresariales de diverso tipo. Los conglomerados de poder de occidente (cada vez más concentrados), han armado una compleja red de complicidades muy difíciles de desentramar. Pero como todo bajo el capitalismo, si se rastrea el origen del dinero, casi siempre se llega a los autores intelectuales, o sea, el poder real.

Nuestra América como esperanza

Se ha señalado en varias oportunidades que las experiencias de las últimas décadas en nuestro continente, han sido un faro para pensar que otro mundo es posible. Pero pese a los errores cometidos, a la guerra mediática y judicial, los pueblos nuestroamericanos han dado cuenta de ello.

A los procesos de resistencia de Venezuela, de Cuba o de otros países de la región, en los últimos años se sumaron el México de Andrés Manuel López Obrador y la Argentina de les Fernández. Gobiernos que pese a las condiciones calamitosas en las que encontraron sus respectivos países, pese a la aparición de la pandemia (que tomó por sorpresa a todo el mundo), comienzan a poner de pié los extremos norte y sur del continente.

A este escenario se suma la victoria electoral del MAS-IPSP en Bolivia. El proceso gestado por Evo Morales Ayma, derrocado por la derecha boliviana, con la complicidad de las FFAA y las Fuerzas de Seguridad, con el apoyo de la embajada de EEUU y la OEA, y bajo un silencio de ultratumba de la gran mayoría de los países del mundo, vuelve a demostrar que no ha sido derrotado.

El triunfo electoral de Lucho Arce y David Choquehuanca aún no ha sido reconocida por el golpista Luis Fernando Camacho y según afirmó, cuando tengan los resultados definitivos determinarán qué hará la fuerza política que dirige (Creemos). “Aún tenemos que terminar lo que empezamos”, deslizó muy ligeramente el golpista santacruceño.

Suenan los clarines de guerra

Estas declaraciones de la derecha boliviana radicalizada se suman a las permanentes arremetidas contra la Venezuela chavista por EEUU, el Grupo de Lima, la OEA y afines, o a las recientes represiones en Chile, el asesinato sistemático en Colombia, al igual que muchas otras situaciones que podrían describirse en toda la región. La derecha por gringa no descansa.

En Argentina y en México se ven claramente no solo mediante las operaciones de prensa, sino con las “convocatorias anti”. La derecha no tiene una propuesta concreta porque el neoliberalismo está agotado. No solo en la región, sino en el mundo entero. Por ello la única forma que tienen de convocar adeptos es en “oponiéndose a”. No hay proposición, construcción o alternativa, sólo hay destrucción. Una alarmante maquinaria de impedir y mentir.

La debilidad de EEUU y su situación interna tienen mucho que ver con esta forma de operatoria de las derechas continentales. La utilización de la violencia y la caotización parecen ser los últimos cartuchos de un imperio que pierde su hegemonía. Lo hemos visto en el Medio Oriente y en la Europa del Este. Ahora ¿esto quiere decir que EEUU está terminado y que su influencia terminará? En lo absoluto, muy por el contrario esto se vuelve muy peligroso para la región y para el mundo.

Lo decíamos hace algún tiempo y lo volvemos a afirmar: EEUU desde hace mucho tiempo lanzó una guerra a perpetuidad contra los pueblos del mundo, aunque ahora -quizás- sus señales se vean con mayor claridad.

Los pueblos no se dejarán pisotear

Pese a las intentonas golpistas, pese a tener prácticamente a toda la prensa hegemónica en contra, los procesos populares de la región siguen dando muestras de su voluntad de avanzar hacia una sociedad más justa. El ejemplo más gráfico fueron las diversas movilizaciones del 17 de octubre en conmemoración del día de la Lealtad peronista.

Ese día se destruyó el mítico relato que pretendía construir la derecha (y sus medios de propaganda) de que habían ganado la calle. Está claro que los pueblos saldrán a defender a sus intereses y a defender a los gobiernos que representan ese camino.

Los desafíos de los pueblos de Nuestra América son infinitos, pero sin dudas el de mayor relevancia será demostrarle al mundo que hay otro camino, que se puede construir un sistema más justo, libre y soberano, donde se respeten las diversidades, donde haya mayor tolerancia y solidaridad. Pero ese camino no significa renunciar a la lucha popular.

Los pueblos queremos paz, pero con justicia social.


[1] https://www.voltairenet.org/article210761.html

Nicolás Sampedro
Nicolás Sampedro

Prefiero escuchar antes que hablar. Ser esquemático y metódico en el trabajo me ha dado algún resultado. Intento encontrar y compartir ideas y conceptos que hagan pensar. Me irritan las injusticias, perder el tiempo y fallarle en algo a les demás.

Justicia: el héroe y la tragedia (Parte I)

Justicia: el héroe y la tragedia (Parte I)

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La Orestiada, justicia divina

En la trilogía de La Orestea, de Esquilo, Orestes asesina a su madre (Clitemnestra) en venganza por el asesinato de su padre (Agamenón) -quien regresaba de la guerra de Troya-, cuyo motivo fue el sacrificio de la Ifigenia, hija de ambos, para que éste pudiera continuar el viaje hacia Troya a cumplir su palabra empeñada en la empresa bélica. Se cumplía así una cadena de venganzas de sangre profetizada por el oráculo de Delfos.

El crimen es el móvil que le permite al autor criticar el sistema de justica de la época (450 a C); hasta ese momento la justicia era dictada por las leyes de los dioses, de la divinidad, y los crímenes de sangre familiar castigados por las Erinias (Furias). La profecía juega un papel fundamental, es una garantía del cumplimiento del Destino del héroe, destino que es superior a toda fuerza humana y contra el que es imposible ir en contra. Dicho de otro modo, el hombre no puede no cumplir lo que ha sido predicho.

Por tanto, el héroe cree que su acción es por demás justa ya que el modelo de justica de su momento no le da garantías de que el hecho que desencadena su venganza-perdición (el asesinato de su padre, en este caso) pueda tener un castigo. El resultado final de esta obra (Orestea) es la creación de un sistema de justicia (Areópago) integrado por hombres que juzgan los crímenes de los hombres, alejándose de las viejas y para ciertos móviles insuficientes leyes de los dioses, y cerrando así un ciclo de violencia. La sentencia la dictará un tribunal y no arcaicas deidades ansiosas de sangre.

Con el cierre de esta tragedia se inaugura un mundo más humano, para lo cual hay que tener presente la calidad de suplicante de Orestes. No es un héroe vencido sino un hombre que dio cumplimiento a fuerzas -profecías, por tanto fueron los dictámenes de los propios dioses los que guiaron sus pasos y por cuales debe afrontar un castigo.

Sin embargo, se puede evidenciar que “La Orestea es antibélica y muestra las consecuencias del exceso de poder. Y pide, de un lado, humanidad y compasión; de otro, respeto a las antiguas leyes. Todo ello, como siempre en la tragedia bajo la imagen del mito.”[1] Por tanto, el abordaje de lo mítico en este texto es un paso para acercarse a una posible interpretación de la configuración de la justicia en la actualidad, concluyendo que “el pensamiento mítico, por origen y principio, es pensamiento tradicional, porque el mito no tiene otro modo de comprender, explicar e interpretar la forma actual de la vida humana más que conduciéndola a un pasado remoto. Lo que arraiga es este pasado mítico, lo que ha sido desde siempre, lo que ha existido desde los tiempos inmemoriales, es firme e indudable.”[2]

Héroe Trágico

Antes de proseguir con el análisis que corresponde a la obra de Hamlet de Shakespeare, conviene establecer algunas ideas básicas sobre el héroe trágico. En la antigüedad mítica los héroes pertenecían a una “casta” de mortales en los que en sus líneas de sangre había presencia de sangre divina: pertenecían a lo que se podría denominar “aristocracia” (Orestes, hijo de Agamenón rey de Micenas; Hamlet hijo del rey Hamlet de Dinamarca; Batman, huérfano heredero de una gran fortuna).

En su constitución psicológica son personas que no son demasiado buenas ni demasiado malas, más bien deben tener una cuota de ambas características, son solitarios y tienden a la reflexión interna de sus pensamientos.  El héroe trágico de la mitología no es modelo de imitación como puede ser para el cristiano la figura de Jesús: un modelo de virtud a seguir.

El héroe trágico en un principio despierta la desaprobación a causa de su desmesura (hybris) como intento de transgredir los límites que los dioses han impuesto a los hombres, y por tanto debe ser castigado en lección a su audacia, y su destino -aprendizaje ineludible- cumplido, pero al que el héroe se enfrenta sin retroceder. Sabe que su fin será la perdición y sin embargo lucha contra la imposibilidad, aprende de sus errores, comprende su destino y se sabe responsable de sus propias desgracias.

La tragedia presenta a los hombres enfrentados a situaciones extremas: Agamenón decidiendo si sacrifica a su hija Ifigenia para continuar su viaje a Troya; Aquiles sabe que si va a la guerra encontrará la muerte pero igual se decide por la gloria eterna del guerrero en lugar de una vejez placentera y tranquila; Hagen es advertido por las musas que en su viaje al reino de rey Etzel encontrará la muerte en manos de la vengadora Krimilda, tras una resistencia de varios días y una apoteosis de sangre; Hamlet sabe que su desenlace significara su perdición, pues la empresa vengativa va en contra de sus convicciones religiosas: la muerte-asesinato de su tío significa su condena.

Incluso estas situaciones extremas son un móvil presente en la religión cristiana. Abraham sacrificando a Isaac o Jesús conociendo su destino pide a su padre: “Si quieres, aparta de mí ese cáliz. Pero que no se haga mi voluntad, sino la tuya”, y aún así se apega al cumplimiento de su destino ineludible, pues “los padecimientos y muerte del héroe trágico son asumidos como parte de un orden divino inescrutable (…) una gran ceremonia cuyo sentido último era la aceptación jubilosa de la mortalidad del hombre y la superación del miedo a la muerte.”[3]

Hamlet, la justicia de los reyes

Volviendo al análisis que se ha emprendido llegamos a Hamlet. Es una obra de William Shakespeare de 1605, que también lleva un mensaje de crítica a su sistema social  y de justicia: su padre fue asesinado por su tío, quien además se casó con su madre y asumió el trono en Dinamarca. Hamlet, instado a vengar a su padre por el fantasma del mismo, se ve en un camino solitario y con una misión que él sabe, por ser cristiano y cometer un asesinato, será su perdición.

Aquí se ve el mismo móvil que en la Orestea: la justicia no es justa. ¿Quién juzgará el crimen de su padre si quien es el culpable ocupa el trono y además es el encargado de brindar justicia? Parece ser que sólo la justicia por mano propia, ante la falta de una justicia legal que pueda juzgar tanto a los poderosos como al pueblo, puede ser una salida; así signifique la perdición del héroe.

Si “La Orestea, descansa en una vigorosa afirmación de la justicia divina (de Zeús) y sus protagonistas alcanzan al final una conciliación con el orden divino, una aquiescencia y un consuelo que da sentido y justificación a los sufrimientos padecidos[4]”, en Hamlet vemos que el problema de la justicia se centra en el poder, en cómo llevar la misma a los poderosos: la justicia no es justa.

Vemos que “el desquite por una muerte real, sin embargo, nunca es asunto de risa. Es inherentemente trágico, no sólo porque la sangre engendra sangre, sino por las repercusiones que suele tener en la vida y personalidad del vengador virtuoso -Hamlet era un hombre virtuoso-: un hombre cruelmente aislado de la sociedad por el carácter de la misión que ha asumido. La circunstancia del vengador, forzosamente secreta, solitaria y extrema, conduce a la introspección. Propicia la meditación sobre las anomalías de la justicia, tanto humana como divina, sobre el tiempo pasado y sobre el valor de la vida y las relaciones humanas. Muchos vengadores se convierten en mordaces críticos de la sociedad de la que se han apartado. Algunos caen en la locura, no solo porque el dramaturgo necesite alargar la historia y retrasar el acto de venganza, sino porque la tensión que padecen en el período de solitaria preparación y espera acaba siendo psicológicamente insoportable[5].

Esto lo lleva al desenlace final: la venganza cumplida y su muerte. Se ha hecho justicia por mano propia en un baño de sangre, la sangre engendra sangre y la muerte de todos cierra el ciclo.  En esta obra nos encontramos que entre lo moderno y lo arcaico hay una relación “y no tanto porque las formas arcaicas parezcan ejercitar sobre el presente una fascinación particular, cuanto porque la clave de lo moderno está escondida en lo inmemorial y en lo prehistórico. Así el mundo antiguo a su fin dirige, para reencontrarse, hacia lo primordial; la vanguardia, que se ha perdido en el tiempo, sigue a lo primitivo y lo arcaico”[6].

Entonces cabe preguntarse si la justicia es justa con todos o si solo sobre una capa de la sociedad recae el valor punitivo de las leyes. Sin embargo en Hamlet hay algo más -mucho más- y es que parece que él no tiene opción: en el “ser o no ser, esa es la cuestión”, parece que no hay elección posible para enfrentar su destino-venganza trágica.

Creo que, en ese caso, la interpretación iría en el sentido del “del ser o parecer, esa es la cuestión” y ahí, el destino del héroe sigue siendo el mismo, la venganza como desenlace de su empresa. Pero en esa lectura hay una elección: sucumbir a la locura o parecer loco. Sucumbir a ella significaría un desenlace de muerte, mientras que parecerlo le deja una rendija por la que podría conservar su vida con un costo moral alto: llevar para siempre la marca de Caín, la culpa por el asesinato de su tío.


[1] Esquilo. Tragedias. Editorial Gredos. Introducción, Franciscos Rodríguez Adrados, Página XX.
[2] Cassirer, Ernst. Antropología Filosófica, capítulo II “Una clave en la naturaleza del hombre: el símbolo” . México, Fondo de Cultura Económica, 1992 (Edición original en alemán, 1944).
[3] Sófocles. Tragedias. Editorial Gredos. Introducción, Jorge Bergua Cavero, Página XIX.
[4] Sófocles. Tragedias. Editorial Gredos. Introducción, Jorge Bergua Cavero, Página XIX.
[5] Shakespeare, William. Hamlet. Editorial Aguilar. Introducción, Anne Barton.
[6] Agamben, Giorgio. ¿Qué es lo moderno?

Duver Arboleda
Duver Arboleda

Vengo de la tierra del café y de la ciudad de las montañas. Soy un proyecto de contador de historias y de periodista cultural, para lo que uso la fotografía, el vídeo y, sobretodo, la palabra. Escribo y «foteo» porque le apuesto a una sociedad justa. Mi lema: para todos todo.

Lorenzo Pepe: “En la pelea por la justicia social, la trinchera más segura es la del peronismo”

Lorenzo Pepe: “En la pelea por la justicia social, la trinchera más segura es la del peronismo”

TIEMPO DE LECTURA: 4 min.

“Ya pasaron 75 años y sigo escuchando al pueblo en aquella maravillosa Plaza de Mayo del 17 de Octubre de 1945”.

El histórico dirigente sindical ferroviario y exdiputado, Lorenzo Pepe, consideró que la movilización popular del 17 de octubre de 1945 en reclamo de la liberación de Juan Perón fue la “más magna, patriótica e importante de la historia de latinoamérica”, y recomendó a quienes “pelean por la igualdad y la justicia social” en Argentina que “la trinchera más segura es la del peronismo”.

“Ya pasaron 75 años y sigo escuchando al pueblo en aquella maravillosa Plaza de Mayo del 17 de Octubre de 1945, con los incansables gritos a garganta abierta que no paraban nunca: “Perón, Perón, queremos a Perón; eso quedó grabado a fuego en mi memoria”, recordó Pepe, de 89 años, en una extensa entrevista por un nuevo aniversario del Día de la Lealtad.

Con una frondosa carrera sindical y política, Pepe, quien hoy dirige el Instituto Nacional Juan Domingo Perón de Estudios e Investigaciones Históricas, Sociales y Políticas, recordó aquellas vivencias de adolescente que lo llevaron junto a su padre hasta las escalinatas de la Catedral Metropolitana, frente a la Plaza de Mayo.

Foto: Archivo General de la Nación

“Ese día temprano estábamos en nuestra casa en (el partido bonaerense de) Tres de Febrero. Mi papá se tomó unos mates y me dijo ‘dame la mano’ y no paramos hasta llegar a Capital. No me preguntó si quería ir, me dijo dame la mano y me llevó. Yo tenía 14 años. Mi viejo fue un militante socialista, trasversal, que apoyó el proceso revolucionario que encabezaba Juan Domingo Perón”, comenzó Pepe.

Supo entonces que “algo fuerte estaba pasando” porque su padre -contó- no le soltó la mano en todo el trayecto en el “viejo ferrocarril Buenos Aires al Pacífico”, actual línea San Martín, y recién cuando ambos desembarcaron en Retiro vio a su papá caminar “rápido y serio, muy decidido”, como “un militante entero”.

“La primera gran impresión que recuerdo fue en la calle Reconquista, donde había una columna de mil o 1.500 mujeres, vestidas con cofias y guardapolvos blancos manchados con sangre”, relató Pepe, que luego supo por su padre que eran las trabajadoras de los frigoríficos de Avellaneda: “La Negra, la Swift y la Anglo que eran británicas, que después Perón nacionalizó”.

Como cualquier adolescente que hacía sólo un mes que se “había puesto los pantalones largos”, después de 12 horas en la Plaza de Mayo le pidió a su papá volver a casa.

“No me cabe ninguna duda que el 17 de Octubre fue el acontecimiento político más importante en los más de 200 años de historia argentina, ninguna duda. Mire: la Revolución de Mayo fue un hecho protagonizado por muy poca gente, no fue un levantamiento multitudinario. Pero nosotros hicimos el 17 de Octubre con más de un millón de personas y eso me lo dijo el propio Perón”, enfatizó.

Reconfortado por el hecho de haber vivido “grandes alegrías”, Pepe señaló como uno de esos momentos al “honor de haber compartido cafés con Perón en el exilio”.

Evocando aquel histórico día

Recordó que en uno de esos encuentros el expresidente analizó el número de personas que se movilizaron el 17 de octubre de 1945 y dijo: “Si (el Diario) La Nación habla de 950.000 mil personas, seguramente fuimos más de un millón y medio de compañeros”.

“A diferencia de lo que ocurre hoy en esas concentraciones en el Obelisco, llenas de odio y violencia, nosotros estuvimos en esa histórica plaza con alegría, contentos, porque fuimos a rescatar a nuestro líder y sabiendo que el triunfo era nuestro”, resaltó.

Insistió con que se trató de la “más magna, patriótica e importante movilización de masas de toda la historia, no solamente de Argentina, sino de toda América Latina; fue un hito en el avance del pueblo argentino que deseaba alcanzar la justicia social como bandera suprema para ser enarbolada para siempre”.

“Nosotros hemos prestado, de las tres banderas, la libertad y la independencia, esas la podemos usar todos, pero la bandera de la justicia social no se la damos a nadie. Es nuestra trabajamos por ella y luchamos por ella y seguiremos peleando por ella hasta el último hálito de nuestras vidas”, afirmó con orgullo peronista el dirigente.

Foto: Archivo General de la Nación

Pepe, a sus 89 años, dijo estar “muy tranquilo” después de haber “peleado mucho” en su vida por las banderas del peronismo y de “haber pagado duro con persecución, mucha cana, simulación de fusilamientos, allanamientos y cárcel de los milicos”.

“A 75 años del 17 de Octubre le diría a la juventud que siga el ejemplo de aquellos que pelearon por los derechos de los trabajadores, que sigan el ejemplo de sus abuelos que pelearon y dieron la vida por la igualdad y la justicia social en la Argentina. Hay muchos que dicen que pelean por esos objetivos, pero la trinchera más segura es la del peronismo, no cabe ninguna duda”, remató.

Marcelo Cena
Marcelo Cena

Trabajador de Prensa en diversos medios. Militante de la vida Peronista. No soy neutral.

El MAS y un triunfo arrollador

El MAS y un triunfo arrollador

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

A pesar de la intervención desvergonzada de la OEA, del Departamento de Estado norteamericano, de una ultraderecha sometida a las órdenes de fuerzas externas, el MAS y su binomio, conformado por Luis Arce Cataroa como presidente y David Choquehuanca a la vicepresidencia, lograron una victoria furibunda e indiscutible en las elecciones a la que fueron convocados 7.3 millones de bolivianos.

El 53% de los votos y la diferencia de 20 puntos porcentuales sobre Carlos Mesa Gisbert (31,2%) y de 40 sobre Luis Fernando Camacho (14,1%), son cifras extraordinarias, que representan aire fresco para la lucha de los pueblos. Con esto se confirma, tal como se sostuvo en alguna otra oportunidad, que en la elección de 2019nhubo una operación destinada a impedir el triunfo del MAS. Esto, por supuesto, avalado por los gobiernos derechistas latinoamericanos, y el silencio cómplice de los organismos internacionales.

El triunfo de este 18 de octubre le permite al pueblo boliviano volver a Palacio Quemado y además controlar las dos cámaras del Parlamento. Una victoria que traerá consigo un tremendo impacto regional e internacional, que da nuevos aires al progresismo en América Latina y que recupera la democracia para Bolivia y su pueblo, que sabiamente vuelve a confiar en aquellos que lo dignificaron, que le dijeron no al racismo, al saqueo, al sometimiento a Washington y a la corrupción.

Mientras más postergaba la derecha golpista la convocatoria a elecciones, con una estrategia política errada del gobierno de facto presidido por Jeanine Añez, más se debilitaban sus opciones. Esto, ante la política supremacista, racista, de corte fascista, de insulto al pueblo indígena a sus símbolos y a su cultura. En ese contexto, la sociedad boliviana tuvo más tiempo para comparar la dictadura con lo que había sido un proceso revolucionario, que durante 14 años le cambio la cara y el organismo entero a Bolivia; una revolución que nacionalizó los recursos naturales, que llevó a los indígenas a ocupar Palacio Quemado y decirle al mundo que Bolivia existía, que tenía una dignidad que necesitaba aflorar tras cientos de años de sometimiento y abusos.

El ministro de Gobierno de la dictadura, el empresario Arturo Murillo, estuvo durante la noche del domingo largas horas presionando a los medios de comunicación, al Tribunal Supremo Electoral y a las encuestadoras para que no dieran a conocer lo que ya se sabía hace algunas horas, pero que demoró en visibilizarse: el triunfo del MAS era inobjetable y por una mayoría abrumadora. Una dura derrota para el imperio y los gobiernos derechistas latinoamericanos coordinados por Almagro.

El resultado del recuento fue claro y planeadamente postergado. El propio ex presidente Evo Morales, en una conferencia de prensa dada en Argentina, sostuvo: “Las empresas encuestadoras se niegan a publicar el resultado en boca de urna. Se sospecha que algo están ocultando”. Por su parte, Sebastián Michel, vocero del MAS, señaló que existía una estrategia del gobierno de facto para lograr que no se entregara información y así generar un clima de violencia con el objetivo final de anular las elecciones. La enorme amplitud de cifras entre Arce y Mesa ha hecho imposible llevar a cabo lo que el departamento de estado norteamericano, junto a la OEA, habían planeado junto al ultraderechista ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

La parte más difícil viene ahora para recuperar una vida trastornada por una dictadura que ha violado los derechos humanos en todos los ámbitos en que pueden ser violados: sanitarios, integridad física, acceso al trabajo, a la educación, derechos cívicos y políticos. Ahora viene justicia por los muertos, por los humillados, y sanar las heridas propiciadas por un gobierno de facto que cometió atropello a los derechos de millones de bolivianos y bolivianas.

En un interesante análisis de Mario Rodríguez, periodista y educador popular boliviano con especialidad en interculturalidad, los resultados de estas elecciones el 18 de octubre “han sido una victoria en el territorio del enemigo, en un campo conservador donde se aglutinó lo más fascista que puede tener la política, articulado en los sectores más retrógrados que puede tener un país”. Se trata de un triunfo sobre el dinero, el poder mediático, los poderes hegemónicos. Dicho marco permite evidenciar que se trata de una victoria del pueblo boliviano, que supera la conformación partidaria y sumerge a la sociedad en la búsqueda de su futuro.

En segundo lugar, para el análisis interno de lo que ha sido una fortaleza en el masismo, se conformó el sujeto de lo plurinacional, con un abanico amplio de posibilidades, que hay que fortalecer. Un triunfo que se da contra viento y marea, que permite pensar en transformaciones profundas. Un tercer elemento es que se necesita una profunda reflexión y una crítica respecto a lo que fueron los gobiernos del MAS para recomponer elementos que fueron erosionados y que necesitan ser reconstituidos en la capacidad de participación popular. Y en cuarto lugar este triunfo es un tremendo impulso para las luchas populares en Latinoamérica..

Claramente este es un laurel obtenido por el MAS, una conquista enorme, que representa la justeza de tres lustros de un gobierno transformador en Bolivia, que caló hondo, que a la hora de la comparación le ganó por cientos de miles de votos a esa derecha recalcitrante. Una derrota del fascismo que le va a doler a la derecha, al Grupo de Lima, y al converso Luis Almagro, que deberá responder de esta derrota ante sus amos estadounidenses, que gastó cientos de millones de dólares para tratar de consolidar un gobierno de facto y darle posibilidades a la derecha boliviana. Almagro ha fracasando estrepitosamente en esta misión que los visibiliza como lo que son: oportunistas, racistas, soberbios y escasos de visión para calar en plenitud el pensamiento y los anhelos de un pueblo que aprendió a defender su dignidad.

Para el triunfador de estas elecciones, Luis Arce Catacora, el desafío es claro: “Hemos recuperado la democracia y la esperanza, como también estamos recuperando la certidumbre para beneficiar a la pequeña, mediana, gran empresa, al sector público y a las familias bolivianas. Gobernaré para todos los bolivianos y trabajaré para reencaminar, sobre todo, la estabilidad económica del país”. Luis Arce agradeció la confianza del pueblo boliviano, de los militantes del MAS, de la comunidad internacional y de los observadores que llegaron para supervigilar las elecciones.

El MAS logró una victoria inapelable, a pesar del Covid 19, las amenazas del gobierno y los intentos de impedir que se votara. El MAS arrasó en las grandes ciudades y en el mundo rural. No hubo lugar en Bolivia, donde el mundo masista no haya logrado hacer morder el polvo de la derrota a Carlos Mesa, Luis Fernando Camacho y los suyos. El MAS triunfó a pesar de la labor de desestabilización de la OEA, definida como el Ministerio de Colonias de Estados Unidos. El MAS triunfó a pesar de fuerzas poderosas en su contra, porque la marcha justa no tiene freno posible.

El MAS triunfó porque el pueblo sabio de Bolivia entendió, que a pesar de todas las críticas se le podían hacer, hizo un trabajo que tenía como centro a los más postergados de Bolivia, por la defensa de sus derechos y la construcción de aquellos negados; a los que por cientos de años fueron humillados, denigrados y que con el MAS comenzaron a andar con su marcha de gigantes. No hay freno posible cuando un pueblo defiende lo suyo.

Artículo publicado originalmente en http://www.segundopaso.es

Pablo Jofré Leal
Pablo Jofré Leal

Periodista y escritor chileno. Analista internacional, Máster en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid. especialista en temas de Latinoamérica, Oriente Medio y el Magreb. Es colaborador de varias cadenas de noticias internacionales. Creador de revista digital www.politicaycultura.cl

Uruguay cierra filas con la estrategia de Estados Unidos

Uruguay cierra filas con la estrategia de Estados Unidos

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

Uruguay, bajo el gobierno neoliberal de la Coalición Multicolor, se va alineando a las directrices de la Casa Blanca. El canciller, Francisco Bustillo, se reunió con el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo para acercar a ambos países económicamente, pero también sabemos que esas reuniones implican determinados condicionamientos que nunca se revelan a la prensa.

Canciller de Uruguay dialoga con su par de EEUU sobre profundizar lazos  comerciales - Sputnik Mundo

El nuevo gobierno uruguayo ha votado en contra de que Cuba ingrese al consejo de Derechos Humanos en la ONU. La ministra de Economía, Azucena Arbeleche, manifestó que quiere mejorar la imagen del país con el Fondo Monetario Internacional.

“Los pobres se están haciendo más pobres y se espera que cerca de 90 millones de personas caigan en situación de extrema pobreza este año”, dijo Gita Gopinath, jefa económica del Fondo Monetario Interncional (FMI). América Latina y el Caribe será la región más afectada por la crisis sanitaria, dado que en muchos países se proyectan  profundas recesiones. Para 2021, el organismo modificó ligeramente sus previsiones, el crecimiento en la región será de un  3,6%. En el caso de Uruguay, el FMI prevé una caída mayor del PIB este año. Se estima que alcance el 4,5%. El gobierno, sin embargo, prevé una caída menor, 3.5%.

Esto no son solo las cifras, son familias enteras sin empleo, jóvenes que abandonan sus estudios, jubilados viviendo los últimos años de su vida en condiciones precarias, otra generación más, relegada. El descontento social toma distintas expresiones a lo largo y ancho del globo y Uruguay no es la excepción.

En quince años de gobierno del centroizquierdista  Frente Amplio, las políticas redistributivas no llegaron a toda la población y las periferias de las ciudades se separaban por muros invisibles de los centros urbanos.

La derecha y la ultraderecha supieron captar ese descontento ante políticas de una izquierda muy enfocada en la ficción de la clase media. Las reacciones son varias y allí surgen los indignados del sistema, tanto por izquierda como por derecha. Cansados de ser los postergados de siempre a lo largo de la historia.

El eje regional se ha corrido hacia la derecha y Uruguay se puso a tono. Y, detrás de la incorrección política los gobernantes plantean ataques sistemáticos a minorías calificadas como enemigos internos, culpables de todos los males de la nación.

El relato

“En el Frente Amplio, la mitad claramente no es demócrata.” declaró a Montevideo Portal el dos veces presidente (del Partido Colorado), Julio María Sanguinetti. Esta frase no es aislada ni ingenua. Forma parte de la construcción del relato que cierta parte de la izquierda está fuera de los márgenes democráticos. Que por culpa de la guerrilla aquí hubo dictadura, pero nada dicen del Plan Cóndor. Los ánimos revisionistas están a la orden del día.

La impronta oficialista va por dos carriles. El puramente económico con su plan de ajuste, donde incluso hay medidas sumamente impopulares y mezquinas como la conformación de una comisión de revisión del boleto estudiantil.

Y el otro carril es el que pretende afianzar la subjetividad neoliberal en la que todos fuimos criados y correrla hacia márgenes más individualistas, más conservadores y más autoritarios de lo habitual. Potenciando así la polarización política de la que la derecha denuncia como un mal a la convivencia entre conciudadanos, pero que la riega todos los días.

En esta semana se encontraron tres carteles fuera de instituciones de secundaria de una organización de ultraderecha que se disolvió en el año 1974, la Juventud Uruguaya de a Pie (JUP). La misma se caracterizó por sus prácticas violentas, donde golpeaba liceales que identificaban de izquierdas, donde incluso llegaron a asesinar a un estudiante. Los carteles estaban escritos con una prédica anticomunista, con lenguaje post segunda guerra mundial. 

En esta comarca llamada Uruguay, que no gravita a nivel económico ni poblacional, entre dos potencias como son Argentina y Brasil, igual suceden cosas. Las corrientes históricas conservadoras, ruralistas y militares de ultraderecha hoy convergen en el gobierno y marchan al compás del ritmo continental.

El Frente Amplio impávido y enfrascado en su reorganización interna con cambio de conducción el año siguiente, insiste con una retórica de “diálogo”, ”respeto”, ”tender puentes”, mientras el oficialismo le devuelve su pacifismo institucional con expropiaciones (que el Frente Amplio no se animó a hacer mientras era gobierno), con represión, ajuste y haciendo lo que se conoce como “la del tero”, un ave que canta en un lado. pero tiene los huevos en otro.

La deuda pública galopa a ritmos vertiginosos. La auditoría nunca estuvo en los programas del Frente Amplio y ahora la derecha se monta sobre el acumulado que dejó la socialdemocracia. Récord histórico de presos, 12.921. Otra deuda no saldada. El punitivismo aprieta con las dos manos.

El gobierno derechista ha sido muy hábil en marcar la agenda, poner el foco en problemas mínimos y por detrás contrabandear su proyecto de expoliación a la clase trabajadora y ocultar los problemas estructurales. Como dice el refrán, para esconder un elefante la mejor manera es desatar una estampida de elefantes.

Artículo publicado originalmente en estrategia.la

Nicolás Centurión
Nicolás Centurión

Como dice un rapero: «por amor y por vicio… se convirtió en mi oficio.» La palabra se milita. Junto café con palabras para subsistir en este paréntesis, desde la periferia.

Leyes en venta

Leyes en venta

TIEMPO DE LECTURA: 7 min.

El negocio inmobiliario comienza a ser discutido. Tanto en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como a nivel nacional, surgieron dos posturas enfrentadas que abordan dos temas diferentes pero que, si se las analiza juntas, dejan al descubierto quienes tiran para cada lado.

Les invito a hacer un repaso por los temas que ocuparon las agendas de estas últimas semanas, para entender a la especulación inmobiliaria como tema transversal a muchas de las problemáticas que sufre la mayoría de la población, para que la minoría se enriquezca.

¿Cómo funciona el negocio inmobiliario?

A partir de la crisis del 2001, el negocio inmobiliario se fortaleció por el rol que ocupó como reserva de valor y canalización del ahorro: el famoso “ahorrar en ladrillos”. Allí también apareció el desarrollador, que puede ser una gran empresa, estudios de arquitectos e ingenieros o pequeñas y medianas agencias. Estas se encargan de adquirir terrenos en los límites o alrededores de las ciudades, con el objetivo de crear emprendimientos que respondan a sus lógicas de funcionamiento:

Primero que nada, se apunta a acceder a la tierra al menor precio posible para conseguir mayor ganancia con el fraccionamiento y venta al público. Estas tierras suelen ser espacios de antiguos usos rurales o bien, zonas incendiadas. Por otro lado, con el objetivo de atraer clientes urbanos, los emprendimientos suelen ubicarse a las afueras de las ciudades y en lugares de fácil y rápido acceso. Además, el turismo juega un rol importante ya que estos lugares se promocionan desde la proyección de encontrar una mejor calidad de vida, en contacto con la naturaleza y con el factor de la exclusividad.

El negocio no avanzó solo en los espacios verdes, sino que también en las grandes ciudades donde el hacinamiento es un problema estructural. La especulación inmobiliaria trae bastantes consecuencias cuando encuentra la forma de evitar cláusulas y límites legales. Lo podemos ver reflejado en las discusiones de los últimos días con respecto a dos proyectos de ley.

Modificación de la Ley de Manejo de Fuego

El 2 de octubre, diputados oficialistas con Máximo Kirchner a la cabeza, presentaron un proyecto de modificación de la Ley 26.815 de Manejo de Fuego para la protección de ecosistemas que puedan ser víctimas de incendios. Se propone modificar el artículo 22 bis de la ley mencionada, para ampliar las restricciones en el uso de las tierras afectadas durante un tiempo apropiado para la recuperación de los territorios.

Para las zonas de bosques nativos o implantados, áreas naturales protegidas y humedales se prohibirían por 60 años: las modificaciones en el uso y destino de las superficies, los emprendimientos inmobiliarios de tierras fiscales o particulares y cualquier actividad agrícola que sea distinta al uso y destino que la superficie tenía al momento del incendio.

Para las zonas agrícolas, praderas, pastizales o matorrales se prohibirían por 30 años: los emprendimientos inmobiliarios, cualquier actividad agrícola que sea distinta al uso y destino que la superficie tenía al momento del incendio y la modificación del uso de la superficie para desarrollar agricultura intensiva (mientras la práctica no anteceda al incendio).

El proyecto también entiende que algunos territorios, por sus particularidades, pueden llegar a necesitar de una mayor cantidad de años para su recuperación. Por lo que se da la libertad a que las leyes de Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos de las distintas provincias determinen otro período de tiempo para las prohibiciones, siempre respetando como tiempos mínimos los que estipula la ley.

Su principal objetivo es desalentar los incendios intencionales y la especulación financiera e inmobiliaria. La aprobación de una ley de este tenor significaría un gran avance en materia de justicia ambiental y social.

Costa Salguero en disputa

Nos alejamos de las sierras cordobesas para entrar en la discusión en la costa del Río de la Plata, donde el negocio inmobiliario sí encontró su camino para instalarse.

El 8 de octubre, en la Legislatura porteña se avanzó con el proyecto que habilitaría la construcción de un parque lineal de 13 hectáreas y, un desarrollo inmobiliario de lujo en Costa Salguero y Punta Carrasco. Se aprobó la rezonificación del proyecto en una primera lectura con 37 votos a favor y 22 en contra. Se espera que avance en una segunda lectura y que se den las audiencias públicas correspondientes.

En 2021 terminan las concesiones de Costa Salguero y Punta Carrasco, que llevan más de 30 años y que fueron transferidas a la Ciudad por el Congreso en 2011. A partir de allí, la Secretaría de Desarrollo Urbano del gobierno porteño, impulsó en la zona una intensa explotación privada con la instalación de locales gastronómicos, centros de convenciones, discotecas y estacionamientos.

A comparación de la modificación de la Ley de Manejo de Fuego, la privatización de gran parte de la costa del Río de La Plata, no hace más que generar un retraso en derechos socio-ambientales. Los intereses por detrás son claros, se vio en los votos y en su iniciativa impulsada por el Ejecutivo local, Horacio Rodríguez Larreta. Con el aval del bloque que responde a Martín Lousteau se pudo avanzar con el megaproyecto.

Varios problemas se presentan cuando pensamos en su posible aprobación y puesta en funcionamiento.

Uno de ellos es que con la privatización de la zona se incumpliría el artículo 8 de la Constitución local, que establece que “los espacios que forman parte del contorno ribereño de la Ciudad son públicos y de libre acceso y circulación”.

Por otro lado, encontramos la problemática que constituye la poca cantidad de espacios verdes con los que cuenta la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La existencia de estos es esencial ya que contribuyen a la mitigación de contaminantes climáticos, reducen el efecto de isla térmica, moderan los extremos de temperatura y mejoran la calidad del clima urbano. Además, crean lugares de esparcimiento que benefician a la salud, educación y bienestar de la población.

Para comprender el conflicto constante que se vive en CABA con respecto al negocio inmobiliario, resulta esencial retomar el informe del legislador del Frente de Todos, Matías Barroetaveña sobre las ventas de tierras de la Ciudad y de la Nación.

Entre 2009 y 2019, el Gobierno porteño -en la gestión del PRO- vendió aproximadamente 150 hectáreas de tierra de la Ciudad a través de 26 leyes que la Legislatura sancionó. Por otro lado, entre 2015 y 2019, con Mauricio Macri a la cabeza del país, la Agencia de Bienes del Estado posibilitó la subasta de otras 78 hectáreas de tierras nacionales dentro del distrito, a través de transferencias de suelo y acuerdos urbanísticos entre ambas jurisdicciones.

Para sorpresa de unes poques, el informe también aclara que la mayoría de los terrenos fueron utilizados para desarrollos inmobiliarios de lujo. Teniendo en cuenta que el tamaño promedio de los hogares es de 2,4 integrantes -según indica el Censo-, en la superficie vendida se podrían haber construido viviendas para 86.275 personas. O si tomamos el tamaño promedio de los hogares en villas, que fue en 2019 de 4,5 integrantes, se podrían haber construido viviendas para 161.766 personas. También, se podría haber aumentado un 40% el espacio verde, lo que nos acercaría a que se cumplan los 15 metros de espacio verde por habitante que recomienda la Organización Mundial de la Salud, actualmente solo se cuenta con cuatro metros cuadrados de espacio verde por persona.

La Ciudad tiene hace 70 años la misma población, pero el déficit habitacional se duplicó por la construcción de la especulación inmobiliaria, y por el otro lado, por el crecimiento de 10 puntos de la cantidad de personas que alquila en las villas.

Legislatura Porteña

El dejar de ser funcional a los grandes imperios inmobiliarios es un gran paso, y que la agenda política comience a entablar conversaciones con la ambiental, es lo que piden diferentes sectores de la sociedad que entienden al ambiente como parte fundamental de nuestro desarrollo como sociedad.

Tomar estas situaciones y analizarlas en conjunto es la mejor forma de denotar qué sucede por detrás y qué intereses entran en juego. Por más que el humo confunda y oculte nombres que la Justicia no llega a divisar, los hechos están y las políticas también. Ahora queda en manos de las distintas cámaras de senadores, diputados y legisladores levantar a la justicia ambiental como bandera o seguir llevándose la vida por delante por un par de billetes verdes.


Fuentes:
https://www.letrap.com.ar/nota/2020-10-8-13-17-0-pacto-larreta-lousteau-para-hacer-el-puerto-madero-pro
https://www.pagina12.com.ar/297786-costa-salguero-otro-predio-de-la-ciudad-que-pasa-a-manos-pri


Agustina Flores
Agustina Flores

Soy hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

El subsuelo de la patria sublevado: la lealtad y el amor

El subsuelo de la patria sublevado: la lealtad y el amor

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“El sol caía a plomo sobre la Plaza de Mayo cuando inesperadamente, enormes columnas de obreros comenzaron a llegar. Venían con sus trajes de fajina porque acudían directamente desde sus fábricas y talleres.  […] Frente a mis ojos desfilaban rostros atezados, brazos membrudos, torsos fornidos, con las greñas al aire y las vestiduras escasas cubiertas de pringues, de restos de brea, de grasas y de aceites. Llegaban cantando y vociferando unidos en una sola fe. […] Era el subsuelo de la patria sublevado”. 

Raúl Scalabrini Ortiz

Tres días antes de la histórica jornada del 17 de octubre de 1945, el coronel Juan Domingo Perón le escribía a Evita, su “adorable tesoro”, una carta desde la cárcel de la isla Martín García, en un tono escéptico y resignado. Entre palabras de amor, le prometía un futuro alejado del conflictivo mundo de la política.

Perón no lo sabía, pero sin siquiera ser presidente ya se había ganado el respeto del pueblo trabajador y el odio de la oligarquía y las clases conservadoras. 

El 16 de octubre de 1945, en la sesión del Comité Central Confederal de la CGT, un dirigente del sindicato de carne rosarino aseguró que si el cuerpo no resolvía la huelga general, ésta se efectuaría igual por el estado emotivo de los trabajadores. En otras palabras, si los dirigentes cegetistas avalaban el corrimiento de Perón, quedarían desacreditados frente al pueblo trabajador, que en masa iría a huelga general de cualquier manera.

La CGT mantuvo la movilización para el 18 de octubre, como se había establecido previamente. Sin embargo, en los hechos, la huelga se realizó un día antes. En la mañana del 17, la agitación comenzó en los ambientes fabriles del conurbano bonaerense y en algunas ciudades del interior. Berisso, que aglutinaba a miles de trabajadores del gremio de la carne, fue un baluarte de aquella jornada. Le seguían Tucumán y sus trabajadores de los ingenios azucareros, y los petroleros y astilleros de Ensenada.

Por la mañana, la calle 60 se convirtió en la principal testigo del comienzo de la larga peregrinación que tenía como fin Plaza de Mayo. Pero antes, los trabajadores de Berisso pisaron las calles de la capital provincial, asilo de los sectores reaccionarios anti populares. En La Plata, ardían el Jockey Club y el diario El Día, y la Universidad -hasta entonces reservadas para las élites- perdía sus vidrios: el subsuelo de la patria devolvía la gentileza de una historia de opresión.

Cerca de las 18, luego de caminar, recibir los rayos de sol en la nuca y colgarse en camiones multitudinarios, los trabajadores de Berisso llegan a Buenos Aires, en patas y descamisados. La convicción de que otra Argentina comenzaba a gestarse, la larga marcha para pedir por Perón, el amor por la justicia social; eso era la lealtad. Y eso siempre será la lealtad: la prueba fehaciente de que el amor del pueblo siempre vence al odio de las minorías conservadoras, oligárquicas, odiantes. 

“Yo vi una turba histérica, incivil, que a la Casa Rosada se acercaba”, escribió la poeta de una familia aristocrática, Silvina Ocampo. Su amigo, Jorge Luis Borges, analizó el 17 de octubre en “La fiesta del monstruo”: Perón era el monstruo y los trabajadores, bestias homicidas. 

Más de un millón de personas coparon la plaza de la Casa de Gobierno ese día, dispuestas a esperar lo que fuera necesario para que liberen a Perón. Cerca de las 23 horas, ante la inminente estadía de les manifestantes, Perón es liberado y aparece en el balcón de la Casa Rosada: “Muchas veces he asistido a reuniones de trabajadores. Siempre he sentido una enorme satisfacción, pero desde hoy sentiré un verdadero orgullo de argentino porque interpreto este movimiento colectivo como el renacimiento de una conciencia de los trabajadores, que es lo único que puede hacer grande e inmortal a la Patria”. 

El Gobierno militar se vio obligado a convocar a elecciones generales, en las que Perón sacaría el 52% de los votos. Los primeros dos gobiernos peronistas jamás serían olvidados, ni por los trabajadores, ni por las clases odiantes que festejarían la muerte de Evita y harían lobby para que la Fusiladora se haga con el Gobierno. 

Les cabecitas negras empoderades eran un peligro: para las elites, aquello significaba la pérdida de poder político y económico. Por eso el odio frente a cualquier conquista del pueblo, ayer y hoy.

Desde el 55 en adelante hubo varios de estos modelos excluyentes, con un enorme ataque a la producción, al trabajo, a la educación, a la cultura. Al parecer, la derecha ha mantenido todo este tiempo un discurso bastante inalterado, autoritario, misógino y muy contrario a los sectores populares. Por eso, los días más felices fueron y serán peronistas. ¡Feliz día!

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