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Desde la llegada del gobierno libertario de Javier Milei el sector nuclear argentino sufre el desmantelamiento feroz de sectores estratégicos que poseen desarrollo e innovación tecnológica para el país. A día de hoy la Central Argentina de Elementos Modulares tiene 260 trabajadores desafectados y el proyecto padeció un recorte del 50% aproximadamente.

En el marco del brutal ajuste que lleva adelante el Gobierno nacional, comandado por Javier Milei, en su ataque de austeridad fiscal esta semana se dio a conocer que 260 trabajadores de la Central Argentina de Elementos Modulares (CAREM) fueron desafectados. En este sentido, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), a cargo de Guido Levalle, emitió un comunicado y allí aseguró que “la obra del Reactor Modular CAREM continua y no se ha detenido”. Sin embargo, el recorte del presupuesto del proyecto es de aproximadamente un 50% lo que lleva a preguntarse: ¿cómo se puede llevar a cabo un proyecto de innovación tecnológica con tal recorte presupuestario?

Actualmente, el gobierno libertario tiene por objetivo el diseño de una Argentina proveedora de materias primas, pero a costilla de la destrucción del entramado productivo nacional. Y es que en estos nueve meses, los resultados de tales políticas han sido: una fuerte recesión, caída de la actividad industrial en un 19,5% interanual en junio, y una utilización de la capacidad instalada en la industria del 54,5% durante el mes de julio.

En consonancia, el ámbito industrial sufre recortes presupuestarios, despidos, congelamiento de salarios y una falta de proyección en el desarrollo e innovación tecnológica. Estas acciones no son casuales, ya que en ellas se ve un claro reflejo de las medidas implementadas bajo el gobierno menemista en la década del 90. Las cuales tenían como único objetivo desmantelar los sectores estratégicos y la destrucción del sistema industrial del país.

De esta manera, la situación actual de Argentina, en materia industrial, genera otra interrogante: ¿Por qué se debería considerar que el proyecto CAREM no será detenido y desmantelado? En este aspecto se tiene que observar que la paralización de la obra del CAREM por recorte de presupuesto, es parte de la construcción de un modelo de país sin industria, de miseria y hambre para la mayoría del pueblo argentino, ya que al cancelar el proyecto de la Central, se perderá la oportunidad de insertarse al mundo como un proveedor de reactores modulares en un momento crucial.

Este proyecto es determinante por el simple hecho de que este tipo de tecnología e innovación, según los expertos, tendrá una gran demanda para las transiciones energéticas de los diferentes países. En consonancia, tal acción generará fuertes consecuencias como la pérdida de trabajadores y trabajadoras (técnicos y profesionales) altamente calificados, lo que a su vez, provocará un “éxodo nuclear”, es decir, una emigración de este personal.

Al respecto, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, sostuvo en la red social X (ex Twitter): “A contramano de lo que hacen los países desarrollados, el gobierno de Milei decidió paralizar la obra del reactor argentino CAREM, un proyecto estratégico, 100% nacional, y que nos ubicaba a la vanguardia mundial de la tecnología nuclear”.

En consonancia, frente a la situación que atraviesa el CAREM, el delegado de UOCRA Zárate, Julio González, señaló: “Esto no arrancó ayer, tuvimos un período de conciliación obligatoria de casi un mes con diferentes negociaciones. La respuesta siempre fue la misma: la paralización del proyecto con el despido de los compañeros y compañeras”.

“Todavía quedan 160 trabajando por dos meses más y después queda paralizada la obra. (…) Es un proyecto muy importante para el país pero también para Zárate y alrededores, donde la gente hoy se queda sin trabajo”, prosiguió el delegado.

Es más que sabido que Milei muestra un claro alineamiento con Estados Unidos, y la política energética no queda fuera de eso, ya que buscan que estos sectores como el nuclear no tengan razón de ser en el país de la “libertad” que promete el Gobierno nacional.

Para comprender un poco más la situación es necesario hacer un repaso por la historia reciente: el sector nuclear viene de ocho años de retroceso, tras la asunción del gobierno de Mauricio Macri y la toma de deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el 20 de junio de 2018. Allí, los grandes proyectos nucleares (4ta y 5ta central nuclear) anunciados en la ley 26.566, fueron paralizados, con dos objetivos claros por parte de Estados Unidos: evitar que China ingrese en Nuestra América con inversiones en el sector, y por otro, desmantelar el sector nuclear argentino.

En aquel momento, el proyecto CAREM, no solo sufrió la política macrista que encomendó a Techint la obra y esta empresa suspendía la obra constantemente para pedir readecuaciones de precios. Sino que se le agregó el lobby estadounidense por bloquear el desarrollo nuclear argentino y que continuó durante la gestión de Fernández, al punto que en abril del año 2022, la subsecretaría para la no proliferación nuclear de EEUU, Ann Gazner, recorrió instalaciones nucleares en el país y la embajada de los yankees transmitió el siguiente mensaje: “Si los chinos entran en Atucha, nosotros queremos entrar en el CAREM”, según confirmó Página12.

Se le suma a lo narrado, la reciente visita del subsecretario de Estado para el Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente de EE.UU, José W. Fernandez, el cual confirmó el Proyecto Acelerador de Transición a Energía Limpia (CETA, por su sigla en inglés) en Argentina, que propone proporcionar al gobierno de Argentina U$S 500 mil en asistencia técnica para acelerar la transición de Argentina hacia la energía limpia.

Esto no es casual, sino que se puede ver cómo el partido anarcocapitalista que gobierna el país desmantela a cuenta gotas el sector nuclear, y en simultáneo, los yankees financian un proyecto de asistencia técnica para acelerar la transición energética.

Lo que finalmente deja a la vista, la miseria planificada que propone Milei: recesión, caída de la actividad industrial, RIGI, privatizaciones, ajuste y represión. Demostrando y despejando el camino que llevará al país, de seguir así, a una desindustrialización y un desmontaje del sector científico y tecnológico generando el sueño tan ansiado por los libertarios de una Argentina colonial parecida a la del siglo XXI.

La importancia de conocer que es el CAREM

El CAREM es el primer reactor nuclear de potencia íntegramente diseñado y construido en la Argentina. Pertenece a la familia de los reactores modulares pequeños (SMR, por sus siglas en inglés), se definen como reactores nucleares generalmente equivalentes a 300 MWe o menos, diseñados con tecnología modular utilizando la fabricación en forma fábrica de módulos, buscando economías de producción en serie y tiempos de construcción cortos (NEA, 2021).

Mediante la ley 26.566, sancionada el 25 de noviembre de 2009, bajo la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, en su artículo 16 se declara de interés nacional y se encomienda a la CNEA el diseño, ejecución y puesta en marcha del Prototipo de Reactor CAREM a construirse en el país (Infoleg, 2009).

El prototipo está siendo construido en el “Complejo Nuclear Atucha”, Lima, provincia de Buenos Aires. La obra civil comenzó el 8 de febrero de 2014, momento en el cual el CAREM se ha constituido como el primer SMR del mundo en comenzar su construcción, y su finalización estaba estimada a fines de esta década.

Esta primera versión de los reactores tipo CAREM será capaz de generar 32 MWe, y el módulo comercial, tendrá una potencia mayor de entre 100 y 120 MWe, que sería la base de una central multi-reactor. Además, se prevé que alrededor del 70% de sus insumos, componentes y servicios vinculados sea provisto por empresas argentinas certificadas bajo estándares internacionales de calidad.