Mansilla: “El problema de la basura es un problema estructural en la ciudad”

Mansilla: “El problema de la basura es un problema estructural en la ciudad”

TIEMPO DE LECTURA: 7 min.

Dialogamos con Cintia Mansilla, concejala platense por el Frente de Todos, sobre el tratamiento de los basurales a cielo abierto y la falta de transparencia del municipio.

La deficiencia en el servicio de recolección de residuos y el crecimiento de basurales a cielo abierto en los barrios de la periferia de La Plata contrastan con la promesa de Ciudad Verde y Sustentable que propone el intendente Julio Garro. Hablamos con Cintia Mansilla, concejala platense por el Frente de Todos, sobre la problemática que afecta cada vez a más vecinos y los reclamos por la falta de transparencia del municipio en sus vínculos con la empresa ESUR, que se lleva el 25% del presupuesto local. 

¿Qué sucede con el servicio de recolección de residuos en los barrios? ¿Qué demandas reciben de los vecinos? 

Estamos en una situación muy crítica respecto a la recolección de residuos en la ciudad. Si te alejas un poco del casco urbano, se ve que la cuestión de la basura es un problema, que ya afecta sanitariamente en los barrios de la periferia de la ciudad, pero también en términos de la planificación. En concreto, el problema es la deficiencia del servicio.

Uno de los primeros problemas es que no hay claridad o transparencia en función de saber cuáles son los recorridos concretos que tiene que hacer la empresa de recolección de residuos. Y el segundo, tiene que ver con la falta de la ubicación de contenedores en los barrios, que se suma al problema del estado de las calles: los camiones no entran a los barrios de la periferia porque las calles no están en condiciones para que suceda. 

¿Y en el casco urbano?

En el casco hay un funcionamiento bueno del servicio de recolección, aunque sucede que algunos barrios quedaron en el casco más histórico, como el barrio Hipódromo, por ejemplo, y otros lugares que se van alejando del casco urbano, y en los que hay muchos reclamos de los vecinos sobre el servicio. Particularmente, en el barrio Hipódromo pasó que las cuadrillas de limpieza que estaban funcionando en ese lugar, que eran cooperativistas, se sacaron a partir de la idea del intendente de pasar a contratación a esos trabajadores. Pero eso no sucedió, hay un personal que no se reemplazó y toda la limpieza que se venía haciendo del barrio no se está haciendo. 

También es cierto que hay un maquillaje en el casco, que se va notando, pero que también es un problema. Tanto en los barrios como en el casco urbano no pasan a buscar las bolsas verdes de forma diferenciada. Entonces el ejercicio de los vecinos de reciclar desaparece cuando el mismo camión pasa a recolectar y se lleva las bolsas negras y verdes todas juntas. 

¿Qué problemas genera esta deficiencia del servicio?

Hicimos un recorrido muy detallado de varios de los barrios que se encuentran con esta situación y tenemos un problema enorme con la creación de basurales a cielo abierto en muchas de las localidades: Villa Elvira, Romero, Altos de San Lorenzo. Los vecinos reclaman que el camión pasa una vez por semana o no tiene una frecuencia clara. Eso genera que se acumulen residuos por la falta de servicio, pero también que los vecinos tiren basura en una esquina porque no la pueden llevar a 30 cuadras donde hay un contenedor o una calle por la que pasa el camión. 

En la ciudad tenemos un problema estructural que es el crecimiento sin planificación y sin acompañamiento municipal, que hace que algunos barrios queden por fuera de la estructura a resolver, tanto edilicia como también de calles. Y esto afecta todo: no llega el servicio de salud como tiene que llegar en la salita de los barrios, no llega el arreglo de calles, y tampoco tenemos un avance en cuanto a la falta de cloacas. Si a esto le sumamos que la recolección de basura no es tal, y se generan estos basurales a cielo abierto o microbasurales, tenemos un problema sanitario enorme. 

¿Por qué sucede esto? ¿Sobre quién recae la responsabilidad?

La recolección de basura en la ciudad es un servicio tercerizado. No lo lleva a cabo el municipio, sino una empresa que es ESUR S.A., contratada desde hace varias gestiones. Es decir, el problema de la basura es un problema estructural en la ciudad. Eso es así. No viene solamente de esta gestión, pero sí se profundizó. 

En 2018, el intendente Julio Garro tuvo la oportunidad de cambiar la empresa prestataria del servicio, cosa que no realizó. Al contrario, se le sumó una cantidad mucho más grande de dinero en la contratación y hoy tenemos casi el 25% del presupuesto municipal puesto en esta empresa.  Lo que se invierte representa el presupuesto más caro en recolección de residuos en la provincia de Buenos Aires.

Esto muestra que no es un problema en términos de fondos, sino que tiene que ver con el funcionamiento del servicio y el no seguimiento por parte del municipio: no hay multas que se hagan por la falta de recolección de la empresa, ni tampoco sabemos qué discusiones tuvo la gestión respecto a las denuncias que vienen haciendo repetidamente los vecinos de prácticamente todos los barrios de la ciudad. Tenemos un presupuesto enorme puesto en este servicio que no funciona. Hay muchos municipios que tercerizan el servicio, pero también hay muchos ejemplos de municipios que gestionan la recolección de basura, con mucho menos presupuesto que el nuestro, ya sea con cooperativas conformadas u otras experiencias. Entendemos que La Plata está en condiciones de poder hacerlo. 

Pero Garro habla de La Plata como “Ciudad Verde”…

Hay una focalización en lo que sale a decir el intendente, donde tenemos una ciudad supuestamente planificada, con puntos de Ecocanje, con recolección de residuos y tratando de generar una política en cuanto a la separación de residuos en origen. Esto está bueno discursivamente, es algo que el intendente viene recalcando cada vez que habla del tema, como lo hizo en el inicio de sesiones ordinarias del Concejo. Es mentira que tenemos una ciudad eco sustentable con una política marcada en ese sentido. El intendente desconoce concretamente qué es lo que pasa en la ciudad y qué le pasa a los vecinos. 

¿Qué respuestas dio el municipio sobre los problemas con este servicio?

Desde el bloque del Frente de Todos hemos presentado muchos pedidos de informe respecto al funcionamiento de la empresa ESUR, sobre las recolecciones que no se hacen, los caminos que están supuestamente señalados para que pase la recolección de basura y no pasa, los días en que deben pasar los camiones, etc. La recolección de basura parece más un negocio para el municipio que un servicio esencial. Lo que hay por detrás es muy oscuro porque no sabemos cuáles son las obligaciones que tiene la empresa y cuál es la acción que toma el municipio para que la empresa haga lo que tiene que hacer. No hay nada de transparencia. No hay ninguna multa hecha por parte del municipio a la empresa ESUR por las fallas en el servicio.

¿Qué propuestas se presentaron o se están trabajando desde el bloque del Frente de Todos?

Nosotros discutimos dos cosas: que para poder generar una mirada más profunda del funcionamiento del servicio necesitamos saber en qué consiste el mismo, que es lo que estamos pidiendo y no nos dan respuesta. Realizamos presentaciones todas las sesiones al respecto. Hemos presentado desde el bloque algunos proyectos que tratan de atacar el tema de la falta de transparencia y el enorme financiamiento que tiene la Municipalidad. Los pedidos de informe son en función de eso, porque es difícil para cada vecino reclamar el recorrido del camión de la basura si no sabe cuál es. 

Hay propuestas que se presentaron como proyectos de ordenanza, pero no fueron votadas. Uno de los mayores problemas que tenemos con el bloque es que no somos mayoría en el Concejo, pero además Juntos por el Cambio tiene la mayoría automática, entonces para muchas de estas cuestiones relacionadas con temas esenciales para la población no podemos intervenir a menos que generemos campañas de visibilización de los microbasurales, de los basurales a cielo abierto y de basurales provocados por el mismo municipio. 


Agustina Flores
Agustina Flores

Hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

Delfina Venece
Delfina Venece

Nací en el interior de Buenos Aires: los porteños nos confunden con Parque Chacabuco. De crianza gorila, devenida en pseudo-troska por contraste, hoy peronista por convicción. Mi canción favorita a los 10 años era Los Salieris de Charly, de León Gieco.

Olor a basura: los negocios de Garro siguen ensuciando la ciudad

Olor a basura: los negocios de Garro siguen ensuciando la ciudad

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Vecinos y vecinas de los barrios de la periferia platense conviven con basurales y en condiciones que pueden perjudicar su salud, mientras se enfrentan al silencio y la negligencia del municipio y sus acuerdos con la empresa que presta el servicio.

Los basurales a cielo abierto que se multiplican desde hace años en los barrios de la periferia platense no se pueden ocultar detrás de un disfraz verde que intenta imponer el gobierno local en manos de Julio Garro. Los vecinos y vecinas son testigos, todos los días, de las fallas en los servicios de recolección de los residuos, la falta de contenedores cercanos a sus casas o barrios y las condiciones en las que se encuentran las calles, que impiden el ingreso de los camiones que se llevan la basura. 

La iniciativa del gobierno neoliberal de Juntos por el Cambio en La Plata para construir una “ciudad verde, sustentable y resiliente” contrasta enormemente con los intereses y negocios que tiene el municipio con la empresa ESUR S.A., la cual recibe casi el 25% del presupuesto local por ofrecer un servicio no funciona como corresponde. 

Residuos sin rumbo

Los servicios no llegan a los barrios de la periferia de la ciudad, o lo hacen de forma irregular e insuficiente, provocando la creación de basurales a cielo abierto o microbasurales en las esquinas, en terrenos baldíos, o incluso sobre calles que terminan bloqueadas para la circulación. Muchos de ellos generados por los mismos vecinos que no encuentran otra solución para la ubicación de sus residuos, pero también aquellos provocados por el mismo Estado municipal.

Mapa de basurales en La Plata en 2017

No se conocen los recorridos, días y horarios en los que el camión pasa a recolectar la basura; en la gran mayoría de los barrios el recolector directamente no pasa o lo hace con irregularidad; no hay contenedores para depositar la basura y los vecinos deben caminar cuadras y cuadras para encontrar uno; a lo que también se suma las condiciones en las que se encuentran las calles: los camiones argumentan que el estado deficiente de los caminos les impide acceder a los barrios para retirar la basura. Y como si ello fuera poco, lejos de promover una ciudad verde y sustentable, el mismo municipio genera basurales a cielo abierto en las afueras del casco urbano en lugar de generar políticas para la gestión de los residuos.

La página web de la Municipalidad presenta los mapas de recorrido de los camiones de recolección de basura pero no son respetados. En Sicardi, Garibaldi y Arana solo hay recorrido para los camiones que retiran basura en la bolsa negra (no reciclables, residuos húmedos). Al igual que en algunas zonas de Altos de San Lorenzo y Villa Elvira.

¿Quién se hace cargo?

El problema de los basurales no emergió de repente en los últimos años en los barrios de la periferia. Es un problema estructural. De hecho, la empresa ESUR S.A. tiene las llaves del servicio desde hace más de 20 años. Pero la situación se profundizó durante la gestión del intendente Julio Garro, quien no dudó en renovar la licitación en 2018 por ocho años más, a pesar de los reclamos de los vecinos. A lo largo de 2022, según el presupuesto aprobado por el Concejo Deliberante, está previsto que esta empresa reciba una cuarta parte de los recursos totales con los que cuenta el municipio: casi 6.500 millones de pesos de un total de más de 27 millones para la recolección de residuos y la instalación de contenedores. 

Fuente: Municipalidad de La Plata

Además, el pliego de condiciones generales aprobado hace cuatro años establece que la fiscalización y control de los servicios debe estar a cargo de la Municipalidad. Pero la misma se resiste a dar información y no realiza un seguimiento real de las condiciones del servicio. 

“No hay multas hechas por la falta de recolección de la empresa, ni tampoco sabemos qué discusiones tuvo la gestión respecto a las denuncias que vienen haciendo repetidamente los vecinos de prácticamente todos los barrios de la ciudad”, señaló a este medio Cintia Masilla, concejala por el Frente de Todos en La Plata al ser consultada por esta problemática. Y agregó: “Lo que se invierte representa el presupuesto más caro en recolección de residuos en la provincia de Buenos Aires. Un presupuesto enorme puesto en un servicio que no funciona”. 

No es un problema de recursos económicos. El presupuesto en alza destinado a este servicio deficitario da cuenta de negociados oscuros que están ocultos a los ojos de los vecinos y vecinas de toda la ciudad. Lo que sí pueden ver con claridad quienes habitan las periferias del casco urbano son los basurales a cielo abierto y microbasurales que se multiplican. 

El Estado municipal no solo debería haber evitado la generación de los basurales, sino que, una vez que ya existen, tiene la obligación de brindar una solución: según las leyes nacionales N° 25.675 y N°11.723, las Autoridades Municipales quedan obligadas a clausurar los basurales.

Más que solo basura

La situación perjudica cada vez más las vidas de los vecinos de los barrios. Incluso hace que algunas calles dejen de ser transitables. “Tenemos un basural en la esquina hace 3 años, pero desde antes ya teníamos basurales en 25 y 85, donde es una calle que no está abierta, quedó como campo tapada por la basura. Otro basural en 26 y 86 donde antes había contenedores que desaparecieron, otro en 27 y 86 también, y muchos más”, nos comentó “Negu”, vecina de Altos de San Lorenzo y responsable del comedor 25 de Abril de la CTD Aníbal Verón, ubicado en calles 25 bis y 87. 

Basural de las calles 25 bis y 87 – Imagen propia

“Te dicen que pasan lunes, miércoles y viernes, y después te aparecen un jueves. Depende de uno como vecino saber qué días pasa el recolector, poder quemar la basura que se pueda quemar, y hacer entender a los vecinos que tirar la basura en cualquier lado es como tirarla en la puerta de tu casa”, explicó “Negu”. 

A esto se suma que los basurales generan condiciones peligrosas para la salud de quienes transitan las cercanías de esos espacios. La falta de resolución de este problema por parte del municipio genera problemas sanitarios graves que ponen en riesgo a los platenses. Así también, afecta al ambiente por la modificación de las funciones ecosistémicas de cada territorio. En este caso genera la mala absorción de las aguas -produciendo inundaciones-, la contaminación de las napas subterráneas y los arroyos cercanos, la modificación de la tierra en términos de fertilidad para las zonas productivas, entre otros.

La mentira de la ciudad verde

Fuente: Municipalidad de La Plata

El pasado 28 de junio, Argentina entró en “default ambiental”: todos los recursos que teníamos para consumir en un año, de acuerdo a la cantidad que generamos en ese mismo período, ya fueron consumidos. Ante esto, el intendente de la ciudad, Julio Garro, hizo un llamado de atención en Twitter y resumió en un hilo las políticas ambientales que implementó durante su gestión.

Mencionó los “puntos de ecocanje” y los “puntos verdes”, charlas sobre compostaje y cuidado ambiental y la entrega de reconocimientos a empresas que cuentan con producción sustentable. Si bien son políticas correctas, no se terminan de implementar y se contradicen con otras acciones del municipio: el no tratamiento de los basurales a cielo abierto ya mencionado, la recolección incorrecta de residuos en donde se juntan todas las bolsas -las verdes y las negras- sin respetar la separación en origen, entre otras.

Un municipio en silencio

Las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante de la ciudad encuentran frecuentemente un tema en agenda: los pedidos de informes de la bancada opositora del Frente de Todos para que el Ejecutivo explique cómo es la auditoría y el control sobre la empresa ESUR. Sin embargo, las respuestas nunca llegan. No hay fiscalización ni control del servicio, tampoco multas o penalizaciones que sancionen a la empresa a partir de los reclamos y demandas de los vecinos y vecinas.

La falta de información sobre este negociado y la negación de la problemática por parte del municipio obstaculiza la presentación de propuestas y alternativas al servicio. La necesidad de recibir una respuesta es urgente. Los basurales siguen creciendo y ponen en peligro la salud y el bienestar de los barrios de la periferia, mientras el gobierno local celebra políticas ficticias para la planificación urbana y la promoción del cuidado del ambiente. No hay cortina verde que pueda tapar el olor que desprende la negligencia, y los basurales. 


Delfina Venece
Delfina Venece

Nací en el interior de Buenos Aires: los porteños nos confunden con Parque Chacabuco. De crianza gorila, devenida en pseudo-troska por contraste, hoy peronista por convicción. Mi canción favorita a los 10 años era Los Salieris de Charly, de León Gieco.

Agustina Flores
Agustina Flores

Hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

A 5 años de su desaparición: ¡Justicia por Santiago Maldonado!

A 5 años de su desaparición: ¡Justicia por Santiago Maldonado!

TIEMPO DE LECTURA: 3 min.

A pesar de los distintos testimonios e irregularidades en la causa, la justicia sigue bloqueada y no da respuestas a una familia que sigue luchando. 

Cinco son los años que se cumplen este lunes 1º de agosto de la desaparición de Santiago Maldonado, en el marco de una represión producida por efectivos de la Gendarmería en el año 2017, ante la protesta llevada a cabo por la comunidad mapuche Pu Lof, en el distrito de Cushamen.

Maldonado había participado del corte de una ruta junto con 40 miembros del grupo mapuche en la provincia de Chubut, a modo de protesta por el encarcelamiento de varios de sus compañeros en la ciudad de Bariloche.

Tras el accionar de las fuerzas de Gendarmería, ningún familiar ni persona cercana a Maldonado volvió a saber nada de su paradero, por lo que se abrió una mega protesta exigiendo su aparición con vida, la cual culminó el 17 de octubre del mismo año, con la aparición sin vida del cuerpo de Santiago Maldonado, hallado a orillas del río Chubut.

A partir de allí, la consigna se transformó en un pedido de justicia que hasta el día de hoy sigue sin ser resuelto por parte de quienes deben ejercerla; que se escudan en la hipótesis de que Maldonado “se ahogó en el río”, replicada por algunos medios nacionales y que traba, junto a otros factores, el avance en este pedido.

En este sentido, el militante de Derechos Humanos en Argentina, Pablo Pimentel, explicó a Revista Trinchera porqué esta hipótesis carece de credibilidad:

“Dicen que Santiago estuvo en una parte del río que fue revisada tres veces por la prefectura y no lo encontraron. Cuando aparece el cuerpo, un policía lo fotografió en la Morgue de Esquel, y claro que estuvo mal, pero yo le decía a Sergio (Maldonado, hermano de Santiago), tenés toda la derecha de hacer la denuncia, pero esa foto democratizó el estado de Santiago”, relató Pimentel.

En torno a estado del cuerpo, el dirigente de DDHH explicó que “el cuerpo de Santiago apareció intacto, sin ninguna mordida de ningún animal, después de 78 días que supuestamente estuvo en el agua; pregúntenle a cualquier forense o bombero local de un lugar donde haya río cómo aparece un cuerpo después, tan solo alguno días en el agua”.

“La investigación se le debe hacer a Bullrich (Patricia), a Noceti (Pablo), y por supuesto a Mauricio Macri; ya que le pusieron una persona al juez Guido Otranto para hacer y deshacer la causa como mas le convenía. Tuvieron el tiempo de 78 días para pensar una estrategia”, destacó Pimentel.

Según el destacado en DDHH, la familia Maldonado hoy se encuentra ante un bloque que le impide avanzar judicialmente, producto de un entramado entre el poder económico y el de los medios concentrados, que cubren al poder judicial.

“Hoy el estadio jurídico se encuentra en la Corte Suprema, donde Sergio Maldonado pide la integración de una comisión independiente para que se pueda investigar absolutamente todo lo que pasó con Santiago desde la primera hora del 1 de agosto de 2017, hasta su aparición el 17 de octubre, a una semana de las elecciones, lo cual representa sin dudas una aparición política por parte del gobierno de Mauricio Macri”, sentenció Pimentel.

Por otra parte, una testigo encubierta realizó a Página 12 testimonios muy importantes para la causa. Se trata de una residente de Esquel, licenciada en Salud, que ejerció su profesión en el escuadrón 36, y pudo visualizar varios hechos importantes para la investigación dentro del mismo.

El que sin dudas resalta por sobre los demás es el pedido que recibió, según lo declarado, por parte del comandante Juan Pablo Escola, el cual constaba en esconder una caja en su domicilio que contenía un arma, celulares, y un trapo ensangrentado. La testigo aseguró que se negó a hacerlo.

 “Me ordenaron recibir una caja, en un horario sospechoso, las cinco de la madrugada en mi casa, y días después surgió el allanamiento en el escuadrón (N. de R. en el marco de la investigación judicial por la desaparición de Santiago Maldonado). Ahí tuve dudas y solicité explicación, pero me respondieron ‘cierre la boca, es una orden”, relató.

A pesar de los distintos testimonios e irregularidades en la causa, la justicia sigue bloqueada y no da respuestas a una familia que sigue luchando. A 5 años de la desaparición de Santiago Maldonado seguimos exigiendo respuestas y justicia.

 

 

 

Comenzó el tradicional ritual en honor a la Madre Tierra

Comenzó el tradicional ritual en honor a la Madre Tierra

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El Día de la Pachamama vuelve a congregar este lunes al pueblo con festejos populares a lo largo y ancho del país.

A partir de agosto en el mundo andino-amazónico y en ámbitos urbanos, se celebra el tiempo de la Pachamama o el tradicional ritual en honor a la Madre Tierra. Esta ceremonia traspasó fronteras durante siglos para extender el legado de los pueblos originarios de Nuestra América. Durante este mes en todo el país, diferentes comunidades se suman con sus tradiciones a la celebración en defensa de los recursos naturales y el cuidado del planeta.

Para conocer sobre el sentido de esta costumbre, Revista Trinchera dialogó con Claudia Gotta, educadora de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), historiadora, militante de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos en Argentina y secretaria Nacional de Pueblos Originarios, quien relató: “La ceremonia de la Pachamama se remonta a tiempos ancestrales, era un espacio sagrado que propiciaban los diversos hermanos y hermanas de diferentes comunidades y naciones que conformaban específicamente el espacio conocido como andino en los tiempos de la América prehispánica”.

“Es una ceremonia en la que estas comunidades reproducían el orden de su vida material, mediante las prácticas agrícolas, tomaban en este tiempo en el agosto profundo que hoy a través de los almanaques identificamos con este mes, un tiempo de agradecer y a la vez volver a peticionar, ya sea las cosechas o la vida que seguía siendo posible y a la vez solicitar a la Pacha Madre que este acompañamiento pudiese seguir gestándose”, sostuvo Gotta.

Por su parte, Angel Strapazzon, miembro de la plataforma IALAs, docente de la Universidad Campesina Rururbana Indoamericana y referente del Mocase, le comentó a Revista Trinchera que “la ceremonia es milenaria y de diferentes pueblos originarios, que recurren a las memorias históricas. Además, es recurrir a los hechos y acontecimientos que marcaron la lucha de los pueblos por su dignidad, para una mayor justicia, una vida del buen vivir. Recordarnos, volver a pasar por el corazón, la mente y el cuerpo que hay un pasado, un presente y un futuro que puede ser mejor. Significa hacer memoria de los acontecimientos que nos constituyen como pueblo dentro de una gran nación”.

Además, ofrendar a la Madre Tierra viene de una sabiduría ancestral que tiene que ver con el calendario agrícola, que está basado en los recorridos del sol, como también por todas las características que tiene la tierra y el clima. Uno de los primeros rituales, de sahumar los hogares, se suele hacer en las primeras horas del 1 de agosto, oportunidad en que las familias depositan en una ollita con carboncitos, elementos como sahumerios, mirra, incienso o simplemente coa. También hay personas que utilizan únicamente insumos como café y yerba. Según la costumbre, este ritual sirve para armonizar la casa y alejar los malos espíritus.

Con respecto a “dar de comer” a la Pachamama, Claudia Gotta destacó: “Esta frase no es la más feliz, pero es una expresión que se utiliza, en concreto es para agradecer y devolver un poco de todo lo que la Madre Tierra nos brinda. En esa boca que está frente a la pacheta y todos los agostos abrimos y volvemos a abrir, devolvemos le devolvemos gran parte de los dones que ella nos da, pero sabemos que estamos lejos de ser recíprocos de toda esta simetría que merecería esta devolución”. Además, al abrir ese pozo en la tierra, se lo adorna con serpentina y papel picado. Se eligen los mejores alimentos cosechados para convidar a la principal invitada, la Madre Tierra, y también se le brinda bebida y comida preparada por las integrantes del hogar o la comuna.

Con respecto a los momentos y días en que se realiza la celebración, Strapazzon señaló: “El primero de agosto es un día simbólico, pero depende, hay pueblos que lo celebran todo el mes y hay pueblos que lo celebran solo el primero del mes y otros que lo celebran el último día de agosto. Porque la ceremonia del primer día de la Pachamama, que es el del origen, no es lo mismo que la ceremonia del último día, ya que el 31 habla más del final de la creación, del sentido positivo”. Mientras que Gatto agregó: “Lo que no corresponde es hacerla fuera de este mes, porque es en este mes en consonancia es cuando se efectuaba esta ceremonia de agradecimiento y petición para propiciar la renovación del ciclo de la vida”.

Cabe destacar que la ceremonia nunca se dejó de realizar pese a la pandemia de Covid-19, ya que se celebraba solo con la familia o grupos de familias y de manera cuidadosa. Sin embargo, este año el ritual volverá a ser multitudinario y celebrado por el pueblo en cada rincón del país.

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