Lacalle en su torre de marfil y el abajo que empieza a crujir

Lacalle en su torre de marfil y el abajo que empieza a crujir

TIEMPO DE LECTURA: 8 min.

Ahí entran en juego los gobiernos, las medidas que toman y la actitud ante la pandemia. El gobierno derechista liderado por Luis Lacalle Pou no niega la pandemia ni es anti vacuna, pero no por ello resulta que está haciendo todos los esfuerzos posibles para paliar esta crisis.

“Los malla oro” y la economía

El gobierno mantiene su retórica de la “libertad responsable” y el “malla oro”, apuntalándose en el cuidado individual y en el sector privado de los grandes capitales. Liberalismo individual y económico en tiempos que demandan presencia del Estado, mancomunión de todos los sectores y organizaciones sociales para afrontar esta crisis. Toda una definición de clase.

El 14 de abril el Parlamento aprobó una nueva tanda del impuesto a jubilaciones y a empleados públicos con ingresos mayores a 120.000 pesos nominales (unos 2.670 dólares) para aportar al Fondo Covid. En el 2020 este impuesto recaudó apenas unos 30 millones de dólares. Ante las propuestas de gravar también a los sectores más ricos para fortalecer el fondo de crisis, desde la coalición gobernante volvieron a responder que no están dispuestos a gravar al “malla oro”, porque es el motor para salir de la crisis.

Cabe recordar que, según el Banco Central del Uruguay, entre abril y diciembre del año pasado, se fugaron capitales por concepto de inversión de cartera (también conocida como inversión especulativa) por casi 3.500 millones de dólares, cinco veces el valor de todo el fondo Covid 2020.

Las conclusiones se desprenden solas. El famoso “malla oro”, lejos de ser el motor de la economía, fuga su capital en el exterior para surfear la incertidumbre de la crisis. Son los mismos que gritan “Viva la patria” con la bandera nacional en la mano, pero sus activos en otros países. (1)

Otro de las falacias nombradas hasta el hartazgo por el gobierno, es que no hay capacidad para gravar a los capitales, pero la realidad es porfiada y ha demostrado lo contrario por boca de ellos mismos. La obsesión del equipo económico del gobierno con el déficit fiscal los coloca a la derecha del FMI. Este organismo multilateral ha fomentado que los gobiernos gasten para paliar la crisis, pero parece que el mensaje no llegó a Uruguay. (2)

Cien mil nuevos pobres, y contando…

Saluden a Uruguay que se va…

En materia sanitaria el gobierno ha hecho oídos sordos a los planteos de la oposición e incluso a los de su propio Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) que en febrero de este año anunciaba que de seguir en este rumbo, las proyecciones indicaban el aumento exponencial de contagios y fallecimientos por Covid-19.

Uruguay ostenta el tétrico galardón de ser el país con más contagios por millón de habitantes en el mundo. Las sociedades médicas estiman que en los meses siguientes se puede desencadenar la peor crisis de los centro de tratamientos intensivos. Al día de hoy su capacidad está a un 80% y en el departamento con la segunda población del país, Canelones, el porcentaje de vacunación no alcanza el 15%.

Con este panorama el presidente Lacalle tuvo tiempo para hacer lobby para conseguirle 50 mil vacunas a la Conmebol para que se pueda disputar un torneo de fútbol. ¿Gestiones para ayudar a las ollas populares? No, gracias parece decir el gobierno.

Sean los orientales tan ilustrados como conectados

Una de las pocas restricciones para reducir la movilidad ha sido la de las clases presenciales en todos los niveles. Al igual que el año pasado, las brechas económicas, habitacionales y de conectividad emergieron a la luz como erupción volcánica.

Uruguay: pobreza estructural y violencia funcional al capitalismo – CLAE

Esta semana el diario oficialista El Observador colgó en sus redes sociales un video, donde varias familias en un asentamiento popular transitaban sus clases virtuales. Las imágenes hablaban por sí solas. La conectividad, los materiales, varios hermanos en una misma habitación estudiando, la casa lloviéndose en medio de la clase virtual.

El contraste de esta situación con las declaraciones del Ministro de Desarrollo Social, generan la reacción de alguien que estuvo cautivo por años en la oscuridad y de repente mira de frente al sol. El jerarca expresó: “Los pies en el barro o el frío en la noche no impiden que la gente tenga una garra enorme” y con el “entrenamiento adecuado llegue muy lejos «.(3) La meritocracia a todo galope.

Va bala

En la última semana se registraron tres casos de abuso y autoritarismo policial. Una persecución en pleno centro de Montevideo terminó con la muerte del conductor perseguido. Los argumentos policiales fueron que el auto y el conductor estaban requeridos, y que éste abrió fuego primero. Nunca se encontró el arma.

Por esta persecución, los policías chocaron a un taxista que quedó internado. Chocaron a otro auto donde viajaba una pareja con su beba y los bajaron apuntándoles con armas.

El día jueves 15 un hombre se atrincheró en una pensión con cuchillos y fue ultimado por la policía. Una niña de 12 años murió por una bala perdida y un hombre de 29 años mientras esperaba el ómnibus falleció a causa de otra bala perdida por un enfrentamiento entre policías y delincuentes.

Conmoción: Policías asesinan a una mujer en México, en un hecho similar al crimen de George Floyd | La Opinión Austral

El fin de semana se conoció la sentencia de otro caso de abuso policial que aconteció en noviembre de 2020. Ocho policías indagados, cuatro procesados, uno de ellos con antecedentes por abuso policial y amenazas. Otra persecución y disparos de los uniformados fue el hecho desencadenante.

La única diferencia con la primera persecución fue que una bala pegó en el brazo del conductor y otra quedó alojada en el asiento del mismo a centímetros del pulmón. Incluso los policías plantaron un arma en la escena de los hechos que no tenía huellas y que estaba registrada en el Ministerio del Interior. Las pruebas de parafina para restos de pólvora, dieron positivo en los policías y negativo en el conductor. La defensa del sindicato de los policías se retiró del caso.

Esto no pretende ser una crónica policial de la semana, sino dar cuenta del clima en el que se está viviendo en Uruguay. Las fuerzas policiales tienen a un ministro que se declara “hincha” de éstas. Donde se precisa profesionalidad, mando, estrategia, se tiene a un barrabrava (Jorge Larrañaga) como mandamás.

El propio ministro fue derrotado en la interna de su partido (Nacional, el mismo que el del presidente Lacalle) y nuevamente derrotado en las urnas cuando la población le votó NO a su propuesta de reforma constitucional “Vivir sin miedo”. Básicamente constaba de sacar dos mil militares a la calle como apoyo a la policía y mano dura con el aumento de penas de determinados delitos relacionados con la propiedad.

Esta reforma se coló por la ventana y entró en la “ley ómnibus” de la Ley de Urgente Consideración. Los militares no están contemplados pero se le ha dado piedra libre a los policías. Desde la tribuna su jefe los arenga y por televisión amenaza a delincuentes mientras llama a la DEA estadounidense, dice que para combatir el narcotráfico.

Uruguay. Cuando la reunión no es un derecho: represión, ajuste y crisis – Resumen Latinoamericano

El ministro se empeña en mostrar que los delitos han bajado sensiblemente por pura y exclusiva gestión suya y no por la pandemia, como ha sucedido alrededor del globo. Incluso se le ha cuestionado la metodología con la que se miden los delitos. (4) Mientras, el Presidente se empeña en mostrar que la situación económica es por la pandemia y no por gestión suya. ¿A quién le creemos?

Así las cosas. La desigualdad agiganta su brecha cada vez más. Parece que existieran dos Uruguay. Hoy surge otra generación condenada a la desnutrición, a la marginalidad, con un futuro opaco, inalcanzable. Similar a la del 2002, nuestra última y catastrófica crisis. Cercana al narco, lejos de un libro. El aeropuerto queda más cerca que un trabajo digno. Las balas más rápidas que la luz en un cuarto oscuro que se llueve.

El proyecto de la oligarquía local parece que vuelve a posicionarse en el mismo lugar, como cada veinte años, donde el país vuelve a crujir y los de abajo a juntar los pedazos del derrumbe.

Arriba el regocijo, los paraísos fiscales, las exportaciones, el champagne y los barrios privados al alza. Abajo el desempleo, las ollas populares, la pobreza creciente, los sueños que se marchitan. El descontento empieza a fermentar.

Artículo publicado originalmente en Periferia.


Notas:

(1)»La larga lista de implicados cita contadores, abogados, políticos, deportistas, artistas, y empresarios. Pero también, a propietarios y directores de grandes medios de prensa, como El País, El Observador y Búsqueda, que operan cuentas en paraísos fiscales.

Otras figuras destacadas de la política y el deporte como Ignacio de Posadas, Sergio Abreu, Edgardo Novick, Rodrigo Goñi, Pedro Bordaberry, Jorge Sanguinetti, Antonio Marchesano, Ricardo Zerbino, Daniel Weiss, Orlando Dovat, Francisco Gallinal, Eugenio Figueredo, Pablo Forlán, Paolo Montero, Juan Pedro Damiani, Julio Szafran, Nicolás Jodal, Ernesto Kimelman, Ricardo Peirano Peirano, Guillermo Scheck, Luis Eduardo Cardoso y Hugo Romay son algunos de los nombres que parecen citados en los “Papeles de Panamá”.»

(2) Directora del FMI pide a países que “gasten y gasten” y que no retiren los estímulos

https://www.elpais.com.uy/user/suscripcion?utm_source=article

(3)Pablo Bartol: “Los pies en el barro o el frío en la noche no impiden que la gente tenga una garra enorme” y con el “entrenamiento adecuado llegue muy lejos”

https://ladiaria.com.uy/politica/articulo/2021/4/pablo-bartol-los-pies-en-el-barro-o-el-frio-en-la-noche-no-impiden-que-la-gente-tenga-una-garra-enorme-y-con-el-entrenamiento-adecuado-llegue-muy-lejos/

(4)#LIBROSPERIFERICOS – Temporada 2 – «Ya no podemos vivir así» – Rafael Paternain

Nicolás Centurión
Nicolás Centurión

Como dice un rapero: «por amor y por vicio… se convirtió en mi oficio.» La palabra se milita. Junto café con palabras para subsistir en este paréntesis, desde la periferia.

Pandemia y trabajo: El peso sobre las espaldas de los trabajadores uruguayos

Pandemia y trabajo: El peso sobre las espaldas de los trabajadores uruguayos

TIEMPO DE LECTURA: 4 min.
Desde una perspectiva global parecen números menores, pero en proporción a la población son números que preocupan. El gobierno exhorta a que cada uno mantenga su burbuja, “que ajuste sus propias perillas” y apela a la responsabilidad individual. “Es un gobierno que se hace cargo y asume la responsabilidad”, dice el presidente, pero la realidad es que no hay medidas para paliar esta situación. Todos los dardos son contra la población y el gobierno no realiza media autocrítica. 
Coronavirus en Uruguay: la singular y exitosa estrategia del país para contener la pandemia sin cuarentena obligatoria – BBC News Mundo

Las fronteras, sobre todo las con Brasil al noreste del país, siguen siendo un colador. El turismo de ricos sigue existiendo. Las aduanas y las restricciones son para los pobres.

El gran capital y las grandes empresas siguen con los motores a tope. El colapso vuela raso al piso afectando a las pequeñas y medianas empresas, a los comerciantes, bares, teatros y restaurantes pequeños que ya no pueden sostener su situación. Los trabajadores se están comiendo los pocos ahorros que tenían.

En una nueva escalada del gobierno contra los trabajadores, una reforma de la seguridad social aparece en escena. Una seguridad social que está en déficit, de alrededor de unos 800 millones de dólares al 2019.

Lo cierto es que Uruguay tiene un problema demográfico serio. Según la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) ,un cuarto de la población del Uruguay tendrá más de 65 años en 2050. En 1950, por ejemplo, por cada mayor de 60 años había seis personas en edad de trabajar, pero hoy hay cuatro, y se estima que en 20 años no alcancen a tres.

En 1996, año de la anterior reforma previsional, en Uruguay nacieron 58.000 niños y en 2019 apenas 37.000, con una tasa de reposición demográfica de 2,1 hijos por mujer. El único grupo que crece es el de los mayores de 60 y 65 años, en particular, los de 80 y más. Los números hablan por sí solos: Uruguay es un país envejecido.

Reforma previsional: datos y opiniones sobre una decisión a tomar, ¿qué jubilaciones se subsidiará? | la diaria | Uruguay
Lo primero que aparece sobre la mesa es extender la edad de retiro. Las grandes patronales solo piensan en aumentar su productividad y aumentar su tasa de ganancia. Desde la óptica de los asalariados, es otra afrenta a sus intereses.

El desarrollo tecnológico ha hecho que tareas que demoraban días pasen a realizarse en pocas horas. La automatización del trabajo, consecuencia de la robotización, la inteligencia artificial y la nanotecnología; han disparado exponencialmente la producción de los productos y el desarrollo de las industrias a niveles sin precedentes.

Esto que podría devenir en jornadas reducidas de trabajo, no solo en horario sino también con respecto a los días laborables, simplemente se ha tornado en mayor explotación de los trabajadores.

En menos tiempo se produce más, pero se mantienen las horas de trabajo y ahora se pretende extender la edad de retiro. Esta iniciativa aúna voluntades de actores impensados sentados en la misma mesa. Por ejemplo la ex directora del Fondo Monetario Internacional (FMI) Christine Lagarde y el expresidente José Mujica.

La pandemia vuelve a meter la cola en todos los temas. El teletrabajo a raíz del confinamiento es otro de los elementos que perime la condición de vida de los trabajadores. En varios lugares las empresas no se hacen cargo de los costos que asumen los propios trabajadores y que ellos deslindan.
En medio de cuarentena y crisis sanitaria, central sindical de Uruguay realizó un paro nacional

En Uruguay lo que sucede es que además de lo narrado anteriormente, las empresas están reduciendo sus plantillas enviando al seguro de paro y/o despidiendo trabajadores, según cuenta la delegada en la Federación Uruguaya de Empleados del Comercio y los Servicios (FUECYS) Ángela Colman.

El panorama es complejo y nada esperanzador, mientras la pandemia avanza y las redes de contención se empiezan a deshilachar por un Estado que se retira de la ayuda y se afianza en el ajuste.

A pesar de que exista una comisión multipartidaria para tratar la reforma de la seguridad social junto a empresarios y sindicatos, el horizonte marca que nuevamente los platos rotos irán a costa de los riñones de los trabajadores.

Artículo publicado originalmente en Periferia

Nicolás Centurión
Nicolás Centurión

Como dice un rapero: «por amor y por vicio… se convirtió en mi oficio.» La palabra se milita. Junto café con palabras para subsistir en este paréntesis, desde la periferia.

Las vacunas, el fútbol y el relato

Las vacunas, el fútbol y el relato

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

Uruguay es un país futbolero. Eso es innegable. La utilización de metáforas futboleras ante la vida a veces roza el hartazgo incluso para los futboleros, dentro de los que me incluyo.

Desde el poder ejecutivo se celebró la llegada de las vacunas “como un gol”, un  “maracanazo”, recordando la gesta de 1950 cuando Uruguay salió por última vez campeón mundial de fútbol. En vez de darse abrazos se aplaudieron entre todos los asistentes al Consejo de Ministros. El diario conservador El Observador se basó en las declaraciones de los ministros para hacer una nota plagada de metáforas futboleras.

La retórica es de triunfalismo. Una tónica de épica se pretende instalar en el país que recibió último las vacunas en toda Sudamérica. Una especie de ética protestante que se jacta del esfuerzo y del sufrimiento. Como si todo este tiempo de espera fuera una recompensa al final del túnel. Como si en este tiempo no hubo muertos, ni internados en tratamiento intensivo, ni cientos de contagiados.

OPS/OMS Uruguay – El futbolista uruguayo Edinson Cavani se une a la OPS para promover la vacunación

Las vacunas llegaron luego de anuncios y conferencias de prensa que hacían creer la inminencia del arribo de las mismas al país. El Ministro de Defensa (si, de Defensa y no el de Salud) anunció una etapa de prevacunación… pero hasta el día de hoy no se sabe qué significa.

El tono de victoria expresado por las autoridades gubernamentales es inversamente proporcional a la gestión, planificación y transparencia sobre las vacunas. Ni que hablar de la gestión de la pandemia.

La gestión de la pandemia fue y es piloto automático de las políticas sociales que el Frente Amplio había dejado. Se premió al “malla oro”, otra metáfora deportiva, pero esta vez sobre ciclismo. El malla oro vendría a ser la persona exitosa, la que va ganando la competencia. Es decir, se premió a los grandes empresarios y que el resto de los que vienen atrás quedaran a la fortuna del mercado.

Esto ya no es metáfora sino una definición del herrerismo, sector político-ideológico que lidera el presidente Lacalle Pou.

Sueltos de cuerpo

Todas las respuestas sobre el plan de vacunación contra el COVID-19 en Uruguay – Información – 27/01/2021 – EL PAÍS Uruguay

El gobierno celebra la llegada de los cargamentos en un contexto donde no hubo oposición ni palos en la rueda para el natural desarrollo del plan de vacunación. No hubo marchas antivacunas, los intentos de instalar el relato de la “plandemia” se desmontaron enseguida por las propias mentiras de sus impulsores. No hubo campañas de demonización de la vacuna ni denuncias de envenenamiento como sucedió, por ejemplo, en Argentina.

El centroizquierdista Frente Amplio, como primer partido de oposición tras 15 años en el gobierno, solo ha esbozado tímidamente ataques por twitter que poco asiento tienen en la cotidianidad de la gente. Más que inmóvil o tibio, el Frente Amplio parece estar catatónico ante las celebraciones del oficialismo y concentra sus baterías en la recolección de firmas contra la Ley de Urgente Consideración (LUC) y su congreso para la elección de autoridades internas.

Lo que llegará al país serán 192.000 dosis de la vacuna Sinovac. Para el 15 de marzo se esperan 1.558.000 dosis de la misma vacuna, mientras que desde el 8 de marzo hasta el 26 de abril el país recibirá 460.000 dosis de la elaborada por el laboratorio Pfizer.

Según estiman las autoridades, a un ritmo de 30 mil dosis diarias, seis días a la semana, en dos meses aproximadamente se tendrá inmunizada a gran parte de la población. El gobierno ya canta victoria de antemano y de los últimos en obtener la vacuna, Uruguay  pasaría a ser los primeros en inmunizar a casi la totalidad de su país

Sala de emergencia para pacientes con coronavirus, en el CASMU (archivo, enero 2021).

Lo que no dicen las autoridades es que somos un país con una población escasa -unos 3,3 millones de personas-, tenemos un territorio pequeño, no existen poblaciones que sean inaccesibles, se puede acceder por automóvil a cualquier punto del país y Uruguay posee un sistema integrado de salud de alcance nacional que obviamente no fue implementado por el actual gobierno de la coalición multicolor neoliberal y de derecha. 

De todas estas condiciones, la del sistema de salud fue gracias al Frente Amplio, las otras son características intrínsecas del Uruguay. Así que el regocijo de este plan de vacunación (recién publicado) no es gestión de la Coalición Multicolor.

El FA insiste con otras medidas, entre ellas las de proporcionar un ingreso básico de emergencia a las personas más afectadas, evitar desalojos, diferir pagos a organismos estatales, apoyar a las pequeñas y medianas empresas, mejorar los seguros de desempleo y adelantar inversiones en infraestructura para dinamizar la reactivación.

La anunciada llegada de las primeras dosis obviamente alivia ansiedades sociales y presiones sobre el gobierno, pero al mismo tiempo determina que otros asuntos ganen posiciones en la agenda política, en especial los relacionados con problemas económicos y sociales acumulados desde que se declaró la emergencia sanitaria.

El senador oficialista Juan Sartori ya presentó un proyecto de ley para prevenir la corrupción y privilegios a la hora de vacunarse. Un hecho que deja a las claras la importancia de que los gobiernos del campo nacional y popular sean bien prolijos con su accionar, porque la onda expansiva no es solo para adentro de su país, sino que se utilizan las falencias de unos, como tiros por elevación a  otros gobiernos o fuerzas políticas del mismo marco.

Como es su costumbre, el presidente Lacalle está decidido a concentrar los focos sobre su persona el 2 de marzo, cuando se presente en el Parlamento para exponer sobre su primer año de gestión.

Ni Maracaná, ni gol en la hora, ni remontada de atrás. Si quieren hablar de fútbol, el gobierno se parece al balompié local: atado con alambres, deudas con los jugadores, corrupción y siga, siga.

Artículo publicado originalmente en Periferia

Nicolás Centurión
Nicolás Centurión

Como dice un rapero: «por amor y por vicio… se convirtió en mi oficio.» La palabra se milita. Junto café con palabras para subsistir en este paréntesis, desde la periferia.

Desafíos 2021: la constancia del cambio permanente (Parte I)

Desafíos 2021: la constancia del cambio permanente (Parte I)

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

Palabras que refieren lo que fue el hecho noticioso más importante del año 2020. Un año que se nos va y que ha estado marcado, indudablemente, por esta pandemia del Covid-19 con efectos múltiples: en el área sanitaria, política, turística, social, económica. Incluso respecto a la visión del virus, transitando desde aquellas teorías conspirativas, pasando por el negacionismo y la constatación de lo feble que es nuestra humanidad. A pesar de esta constatación es evidente la necesidad de replantearse nuevos modelos de desarrollo, donde resulta crucial el papel relevante que tiene que cumplir el sector público, el Estado, cuya acción tendrá que ser mayor al que ha tenido en las últimas décadas. Un Estado vilipendiado, sujeto a criticas inmisericordes y que muestra en forma indiscutible que “el muerto que vos matasteis goza de buena salud”

Lo mismo respecto a una revisión, cuestionamiento y hasta un cambio medular de lo que ha sido el modelo de globalización impulsado hasta ahora. Esto implica la búsqueda y la lucha por nuevos modelos de participación social, nuevas estructuras sociales donde la población tenga garantizado sus derechos en un amplio espectro de necesidades. Es evidente que resulta insuficiente y hasta una burla que la participación de la sociedad se limite a acudir cada cierto tiempo a emitir un voto y creer que así ya estamos licenciados como demócratas. Lo mencionado, en un marco de cambios personales y colectivo importantes, donde la crisis ha provocado o catalizado cambios importantes en la manera en que trabajamos, en la que nos relacionamos, adquirimos bienes y servicios, en la forma en que podemos viajar y convivir. En la forma que podemos vislumbrar un mundo más unido o definitivamente en un mundo que camine hacia un sálvese quien pueda.

Resulta evidente que el Covid-19 ha traído consigo el desastre en amplias ramas de la economía. La escasísima demanda de los servicios de turismo ha generado un efecto económico desastrosos en países donde dicha actividad es prioritaria:  España, Italia, México, Tailandia, República Dominicana o Cuba. En España por ejemplo, el peso del turismo alcanzó los 154.487 millones de euros en 2019, lo que supuso el 12,4% de su PIB y donde el turismo alcanzó los 2,72 millones de puestos de trabajo, el 12,9% del empleo total. En Italia, el sector turismo representa el 13% del PIB y las pérdidas de este año 2020 se estiman en 120 mil millones de euros. En Cuba representó el año 2019 el 12% del PIB con 5 millones de turistas. Una caída brutal para un país que ha buscado por esa vía caminos de ingresos tras afectaciones económicas tras la caía del campo socialista, socio prioritario.

Tanto como en turismo, constatamos la interrupción en la cadena de suministros en un modelo capitalista donde las partes para fabricar un producto se hacen en distintos países, que afecta a quien provee los componentes y quien ensambla el producto final. Una cadena rota y frente a la cual vamos a tener que observar con cuidado pues el empresariado (con apoyo estatal) tratará de recuperar sus perdidas a costa de los trabajadores, recurriendo siempre a ese estado vilipendiado, haciendo realidad aquella que “las ganancias son privadas y las pérdidas sociales”

Si algo ha dejado en evidencia, esta crisis sanitaria, es la falta de protección social, el descalabro de los sistemas públicos de salud y las enormes brechas sociales en regiones como la latinoamericana por ejemplo, evidenciado en las medidas implementadas para paliar los efectos del Covid-19. La vieja máxima neoliberal respecto a la “necesidad de disminuir la grasa del estado” debe dar paso a un Estado si bien no obeso por lo menos con peso y estatura adecuada. Chile refiere un ejemplo en materia del retiro de nuestros fondos previsionales, que constituye una medida insuficiente, coyuntural, donde el salvataje de la difícil situación económica ha corrido a cuenta de los propios trabajadores y escasa participación estatal. Con una estrategia comunicacional desinformadora y manipuladora, que asigna la responsabilidad de pensiones miserables futuras a los trabajadores y no a las fallas de un sistema en esencia injusto.

Se nos va un año 2020 marcado, igualmente, por una política continua de agresiones, guerras, políticas de dominio y de máxima presión que ha seguido incólume contra: Irak, Yemen, Palestina, El Líbano, Libia, Irán, Venezuela, Cuba. Cáucaso Sur, Sáhara Occidental. Disputas comerciales con China. Presiones contra las instituciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Consejo de Derechos Humanos, Corte Penal Internacional, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) Violación permanente de resoluciones internacionales respecto a Palestina. Yemen, Siria, Irak, el pueblo Rohingya, entre otros.

En las últimas semanas hemos sido testigos del denominado “Proceso de Normalización” destinado a seguir implementando la política de colonización y ocupación de Palestina y el Sáhara Occidental, junto a la protección y lavado de imagen de monarquías como los EAU, Bahréin, Marruecos y Arabia saudí y lógicamente a la entidad sionista. Como también el chantajear a un gobierno, como el de Sudán, a quien se le prometió por Washington sacarlo del listado de países patrocinadores del terrorismo si establecía relaciones con el sionismo. Todo ello coordinado, patrocinado y llevado a la práctica por Washington. Una política vergonzosa, chantajista, despreciable.

Un camino plagado de cambios

La crisis causada por el Covid-19 nos enfrenta a desafíos cotidianos, necesarios de resolver: empleo, asistencia sanitaria, seguridad pública, asistencia financiera, apoyo alimenticio, el pago de las deudas del hogar en múltiples áreas. Pero, nada de ello que es vital, para el día a día, nos debe dejar de lado la mirada de futuro. Bajo lo descrito que refiere constatar y en el marco de un pensamiento y una acción antiimperialista ¿Qué es lo que se viene como desafío y exigencias?  En general lo observado, revelado, constatado y criticado en párrafos anteriores, nos expresa lo que debemos cambiar, el norte de nuestra acción.

En el plano de mi continente y en específico en Latinoamérica y el Caribe el mundo post pandemia está cruzada de interrogantes y escasas certezas. Las proyecciones económicas establecidas por las diversas instituciones dedicadas al tema económico, como es el caso de la Comisión Económica para América latina y el Caribe (CEPAL) ya certifican que el 2020 ha sido el año de mayor contracción económica en los últimos 100 años. Consta transversalmente, que la crisis sanitaria ha agudizado las desigualdades y la fragilidad de los sistemas sociales poniendo en jaque el sistema político, la economía regional y las posibilidades de desarrollo. Esto hace temer un aumento del hambre y la pobreza, que tanto esfuerzo, sacrificio y décadas de esfuerzo habían logrado disminuir, sobre todo en aquellos países donde la llegada de movimientos revolucionarios y progresistas lograron avanzar en indicadores de desarrollo en beneficio social.

La interrogante es saber si la agenda de trabajo va encaminada a recuperar esos indicadores o intensificar el trabajo político que permita agudizar las contradicciones sociales, políticas y económicas, como parte de una estrategia de toma del poder. Lo dejo abierto al análisis del lector pues suelo escuchar, en este caso en mi entorno, que las condiciones objetivas de la revolución están y lo que hay que hacer es agudizar las contradicciones y trabajar por incrementar las condiciones subjetivas, que es hablar del factor conciencia, dirección y organización.

En un contexto internacional nos enfrentamos a la polarización y el proteccionismo, sobre todo de aquellos bloques más poderosos y que suelen aunar esfuerzos de autoprotección y hasta la obtención de beneficios dentro de la crisis. Hablo del bloque norteamericano, el bloque europeo y las grandes corporaciones transnacionales tanto económicas, industriales, financieras como de armas. Esto implica enfrentar dicha realidad y donde resulta imprescindible, como agenda de trabajo esencial, para el 2021 y siempre tenerlo como blanco permanente de nuestro trabajo la lucha contra el sionismo, en todos los ámbitos. Fundamental la eliminación del sionismo y del Wahabismo como ideología. Y, al mismo tiempo el dar a conocer, mostrar, ilustra, escribir, defender el trabajo del Eje de la Resistencia.

Artículo publicado originalmente en segundopaso.es

Pablo Jofré Leal
Pablo Jofré Leal

Periodista y escritor chileno. Analista internacional, Máster en Relaciones Internacionales por la Universidad Complutense de Madrid. especialista en temas de Latinoamérica, Oriente Medio y el Magreb. Es colaborador de varias cadenas de noticias internacionales. Creador de revista digital www.politicaycultura.cl

El mundo no está enfermo, lo están depredando

El mundo no está enfermo, lo están depredando

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

Se acerca el cierre del año y la humanidad se ha vuelto un poco más injusta. En la mayoría de los países del mundo la desigualdad social aumentó. No sólo por culpa de la pandemia como se pretende hacer creer desde la prensa hegemónica mundial, sino producto de la ausencia de políticas realmente efectivas para frenar el crecimiento del hambre y la miseria.

La pandemia -además- vino a demostrar que la voracidad del capitalismo no tiene fin. La forma que va adoptando el sistema -cada vez más tecnificada y virtual- deja al descubierto que no importa ni siquiera la vida de les seres humanes. No es ningún descubrimiento asombroso: bajo las reglas predominantes en este mundo, sólo importa la rentabilidad, el poder y la concentración de la riqueza en cada vez menos manos.

El gran negocio del capitalismo es la muerte: de la naturaleza ante la voracidad por producir sin límites, que se lleva la vida de miles de especies animales y vegetales; la muerte de personas producto del racismo, del patriarcado, del colonialismo, o de guerras lanzadas en nombre de la democracia, los derechos humanos y/o el progreso.

Hay quienes dicen que la pandemia del COVID-19 fue un acto reflejo de la naturaleza, un llamado de atención a la única especie que habita este planeta y destruye y mata sólo por placer.

Algunes analistas especulaban con que la crisis sanitaria que produjo la pandemia haría que se tome conciencia de la necesidad de cambiar, de dar un giro de 180 grados para evitar que esta lógica de muerte planificada lleve a la propia extinción de les seres humanes. Iluses quienes creyeron que tal cosa podría suceder.

Pese a todas las advertencias hechas por científiques, pese a las marcadas consecuencias sobre el medio ambiente, el calentamiento global, la aparición de más y más enfermedades, la muerte sistemática e imparable de personas por falta de condiciones mínimas de subsistencia. Nada parece detener esta alocada maquinaria.

Las disputas globales siguen avanzando, ahora por ver quién se hace con el control y predominio de la tecnología y con ello la pole position para avanzar primeros y más rápidamente en la reformulación de los aspectos estratégicos en el desarrollo de las capacidades de predominio sobre el resto: militar, comunicación, financiera y económica, servicios, educación, robotización, etc.

Disputas que como se ha señalado en anteriores oportunidades tiene a los EEUU y a China como principales competidores. Y si bien en algunas cosas puede decirse que tienen lógicas diferentes, lo cierto es que tanto una como otra son aspiradoras que no paran de consumir materias primas en volúmenes cada vez más importantes.

Al igual que con la pandemia, algunes se ilusionaron con la llegada de Joe Biden como el 46º Presidente de los EEUU. Si se observa sin mucho detalle el prontuario de este señor se podrá discernir fácilmente que es poco probable que ello suceda.

Los años de Trump fueron años de una violencia inusitada en la retórica oficial de la Casa Blanca. Los de Biden quizás sean más diplomáticos, no por ello menos agresivos. Intentarán revertir muchas de las adversidades en las que quedó la diplomacia de ese país luego del paso del huracán, volverán las andanadas de fake news, las presiones de la embajada, las presiones de los organismos multilaterales de crédito, las “inversiones” para que China no siga avanzando en Nuestra América.

Con Biden no se terminará ni la guerra comercial, ni las agresiones contra Rusia, Venezuela, Cuba, Nicaragua, Irán o cualquier otro país que ose enfrentar los mandatos del caduco imperio del norte. Las jugarretas puede que pasen a ser más sutiles, pero seguirán existiendo. La región seguirá siendo un territorio en disputa.

Irán, Rusia y China seguirán apostando a diversificar y mejorar sus relaciones con nuestro continente, los EEUU intentarán que eso no suceda. El caso más gráfico quizás estará en cómo utilicen la presidencia de Claver-Carone frente del BID (históricamente ocupada por une latine). Con ello seguramente intentarán resquebrajar el financiamiento y las inversiones Chinas en los países de la región.

Las ONG’s ligadas a los gringos y los europeos seguirán operando y “construyendo” opiniones en diversos temas para deslegitimar a los gobiernos populares que intenten avanzar en la integración regional, más allá de las diferencias ideológicas existentes en los diversos gobiernos.

Los préstamos del FMI y el BM a los países de la región seguramente se verán potenciados bajo la excusa de ayudar a esos gobiernos a sobrellevar las complejas consecuencias de la pandemia del COVID-19. Eso sí, a los gobiernos “amigos”, al resto ni para una curita.

El 2020 fue un año de muchas batallas, de enormes desafíos a los que se tuvieron que enfrentar los distintos pueblos de Nuestra América y el mundo. Desafíos que se vieron agravados por una pandemia que no es otra cosa que la consecuencia de la voracidad del capitalismo y sus promotores. Nada hace creer que el 2021 o los años venideros no serán iguales o más complejos.

Si hay algo que es seguro de cara al futuro inmediato de la humanidad, es que seguirán existiendo las injusticias; que seguirán generándose descalabros en la economía al igual que en el medio ambiente; que posiblemente aparecerán más virus y que los que ganaron siempre querrán seguir ganando pese a que ello pueda generar la muerte de miles o millones de personas.

Lo único que se puede predecir de ese escenario es que seguirá habiendo lucha, resistencia y organización de los pueblos para tumbar las injusticias, provengan del colonialismo, del capitalismo, del racismo, del patriarcado o de todas juntas.

Trabajemos en la unidad y para ser cada vez más solidaries, estudiemos para ser cada vez más conscientes de los peligros que se avecinan, denunciemos las injusticias y opresiones del sistema para que nadie las desconozca. Brindemos por los años de lucha que vendrán, que serán muchos.

Nicolás Sampedro
Nicolás Sampedro

Prefiero escuchar antes que hablar. Ser esquemático y metódico en el trabajo me ha dado algún resultado. Intento encontrar y compartir ideas y conceptos que hagan pensar. Me irritan las injusticias, perder el tiempo y fallarle en algo a les demás.

El abandono estatal es insalubre

El abandono estatal es insalubre

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

Sí, volvemos a escribir sobre Chubut porque el abandono a les trabajadores estatales, que llevan casi cuatro años de lucha, presenta nuevos episodios, con un nuevo escenario pandémico y con les mismes actores y actrices de siempre.

La toma de deuda de los últimos años para la construcción de hospitales, escuelas y otras obras públicas, que siguen sin materializarse, llevó a que se desinvirtiera cada vez más en los organismos estatales y sueldos de les trabajadores.

Con la llegada de Mariano Arcioni a la cabeza de la provincia, la única “solución” a la deuda que se planteó fue la de seguir desfinanciando al sector estatal y plantear como única alternativa la instalación de proyectos mineros en Chubut.

El pago escalonado de sueldos tenía fecha de expiración para finales de noviembre del 2018, sin embargo, van dos años y contando. De aumentos de sueldos y aguinaldos ni hablemos. Menos de inversión en infraestructura y programas como el Transporte Estudiantil Gratuito (TEG).

Crónica de una semana más de lucha

El COVID-19 encontró a la provincia en las peores condiciones y cuando el Estado debería estar más presente ante la emergencia sociosanitaria, más lejos se encuentra.

Con 8.051 casos, 3.810 personas recuperadas y 110 muertes en la provincia que van en aumento día a día, les trabajadores de la salud se encuentran enfrentando al COVID-19 desamparades. Sin apoyo estatal, los establecimientos médicos intentan no derrumbarse para poder tratar a las personas infectadas.

“Hay trabajadoras que se han desmayado en la guardia del hospital porque no habían comido en días, muchas fueron desalojadas en su departamento por no poder sostener el alquiler; incluso, hay parte del personal que no puede pagar el colectivo o cargar nafta en el coche para ir a trabajar” comentó Andrea Leonett, delegada del Sindicato de Salud Pública SiSaP, para La Poderosa.

Luego de semanas de exigir respuestas, depositaron el sueldo correspondiente al mes de julio solo para el sector de salud; el resto de les trabajadores estatales siguen esperándolo. Pero eso no fue suficiente y no cumple con ninguno de los reclamos que se manifiestan. Se exige por parte de les trabajadores el pago de salarios y aguinaldos atrasados, de todos los meses, para todo el sector estatal. Además, se pide al gobierno hacerse cargo de las condiciones precarias en las que se encuentran los hospitales de la provincia y la falta de insumos necesarios para enfrentar la emergencia sanitaria. También, es necesario mencionar el incumplimiento de las paritarias, el estado de quiebra de la obra social y las amenazas al sistema jubilatorio.

Foto tomada afuera de Casa de Gobierno / Fuente: ADNSUR

Les trabajadores estatales decidieron comenzar una vigilia el pasado lunes 5 en la Casa de Gobierno. Además, por parte de Salud, se decidió realizar un paro de 120 horas, desde ese mismo lunes hasta el viernes 9 inclusive, y comenzar un acampe en el Ministerio de Salud.

Junto a esa medida se presentó una nota al presidente de la Legislatura Provincial y a diputades de los distintos bloques, solicitando que se convoque urgentemente a una sesión especial presencial para tratar el proyecto de ley que presentaron con respecto a la deuda.

Allí se plantea la suspensión del pago de la deuda para que el Estado garantice salud, educación y seguridad alimentaria, pagando en tiempo y forma el sueldo a les trabajadores; una reforma tributaria con el objetivo de obtener ingresos que hoy están fuera de la recaudación, como el impuesto inmobiliario rural y a actividades como la pesca, el aluminio y el petróleo; y que se soliciten informes correspondientes a los ingresos propios de la provincia.

La nota finaliza denunciando: “No hay salida posible en la megaminería. Reiteramos que no es no. No a la megaminería. Sí a que la crisis (responsabilidad del gobierno) la paguen los que siempre han ganado a costa del pueblo trabajador”.

La primera respuesta al comienzo de esta semana de manifestaciones fue la del ministro de Salud, Fabián Puratich, para Télam, en donde se mostró descontento con las medidas acatadas y las calificó como “terribles en un contexto de pandemia” en el que la provincia está “al borde de la cantidad de camas de atención disponibles”.

Acampe afuera del Ministerio de Salud / Fuente: SiSaP

El martes 6, la jornada comenzó con cortes de ruta por parte de las fuerzas de seguridad: en la Ruta 7 estaba infantería y en la Ruta 25 gendarmería y Policía de la Provincia junto con el ministro de Seguridad, Federico Massoni. También se decretó asueto administrativo, por lo que la Casa de Gobierno y el Ministerio de Salud se encontraban prácticamente vacíos.

Como si el sabotaje a las manifestaciones fuera poco, el gobierno recurrió a la represión. En la puerta de Casa de Gobierno, efectivos policiales golpearon al Secretario General del Sindicato de Salud Pública SiSaP, Carlos Sepúlveda.

El acampe continuó en el Ministerio de Salud tal como se había previsto: hasta que no pasaran 120 horas no se iban a ir y hasta que no se entablara una conversación y se resolvieran los reclamos, las diferentes medidas de fuerza se darían por tiempo indeterminado.

El jueves 8, trabajadores de la salud que estaban acampando en el Ministerio se dirigieron al Cine Teatro de Rawson en donde estaban el ministro Puratich y el Intendente de Rawson Dámian Biss por una conferencia enmarcada en el Plan Detectar, que llegó a la provincia por el gran aumento de casos. La conversación con el ministro no fue para nada resolutiva ya que éste se limitó a irse sin dar respuestas.

El viernes 9, se esperaba finalizar la semana con la reunión en la Secretaría de Trabajo a la que el SiSaP había sido citado, sin embargo, tuvo que suspenderse por estar cerrado el edificio por tareas de desinfección por posibles contactos estrechos por COVID-19.

El acampe se levantó, pero la lucha persistirá hasta que reciban soluciones concretas a la desidia que viven les trabajadores desde hace años.

“A partir de la próxima semana veremos con qué acciones seguimos adelante. Esto puede cambiar minuto a minuto”, comentó Noelia Domenez, delegada General del SiSaP.

¿Qué significa ser trabajador esencial?

Con casi 300 casos diarios de nuevos positivos de COVID-19 y con la ocupación casi completa de las camas de los hospitales de la provincia, les trabajadores de la salud deben estar preparades para afrontar la situación de la mejor manera. La situación es otra.

Plantear por un lado que la salud debe ser prioritaria y por el otro deberle a los trabajadores dos meses de sueldo, no cumplir con las paritarias y ni siquiera mantener a los establecimientos en condiciones para recibir pacientes, es sumamente contradictorio.

Se pide responsabilidad y que les trabajadores vuelvan a los hospitales, pero sin comer, sin poder transportarse con cuidados, sin poder pagar las cuentas, sin tener obra social en medio de una emergencia sanitaria mundial.

Además, los reclamos se comunican con soluciones. Como mencionamos previamente, se presentaron proyectos para aminorar la gran deuda causante de todos los problemas, pero al parecer el lobby minero no se rinde tan fácil.

Todo parece claro cuando se ordena de esta manera, las cuentas cierran. Ahora le toca al gobernador Mariano Arcioni y a les ministres hacerse cargo de les 63 mil trabajadores estatales que no solo deben preocuparse por el COVID-19, sino también por comer.


Agustina Flores
Agustina Flores

Soy hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

Que no colapse el sistema sanitario es una responsabilidad colectiva

Que no colapse el sistema sanitario es una responsabilidad colectiva

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

(Actualización al 18/08/20)

Hace menos de un año, la palabra pandemia no circulaba en casi ningún ámbito. Luego, disparado por el COVID-19 atravesó todo el mundo y la emergencia del nuevo virus SARS-Cov-2 que produce una enfermedad respiratoria aguda, con un alto potencial de transmisibilidad en la cotidianeidad de la vida de las personas, transformó la realidad que conocíamos.

En todo el mundo se están desplegando diferente medidas para mitigar el impacto del virus, que de por sí, cada una tiene distintos resultados, y a las que peor les va, cuentan muertos por doquier, ya que por la dinámica propia de la enfermedad, los sistemas de salud se saturan y la mortalidad aumenta cuando no alcanza la capacidad para atender a las personas.

En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), vive alrededor del 35% de la población del país (aproximadamente 15 millones de personas según en último censo), esta concentración poblacional, aumenta la probabilidad de contacto entre personas, y por lo tanto permite que la circulación del SARS-Cov-2 sea mayor que en otras partes de la Argentina, en efecto es la región con más cantidad de casos confirmados de COVID-19.

Contemplando la tasa de transmisión del virus y el número de casos que hoy hay en el territorio nacional, el sistema sanitario ya está alcanzando los niveles de saturación!

Pese al gran esfuerzo por parte del sistema de salud en su conjunto, y en especial del sector público, que desde que comenzó la pandemia, amplió la capacidad de respuesta del sistema sanitario, la situación al 9 de agosto es que el porcentaje de ocupación de camas está en continuo aumento.

Si bien, por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires entre diciembre de 2019 y agosto del 2020 la cantidad de unidades de terapia intensiva del subsector público, pasaron de 883 a 1989, incrementándose un 125%, es fundamental entender que el sistema de atención es un recurso limitado.

La figura inferior (figura 1) compara el incremento de números de camas de terapia intensiva y de la ocupación de las mismas entre los días 14/07, 21/07, 29/07, 06/08 y 18/08 del año 2020. Cada barra representa el número total de camas de terapia intensiva del sistema sanitario provincial. En rojo se muestran las camas disponibles, en azul las camas ocupadas. En el eje vertical se puede observar el crecimiento en el número de camas totales, y se observa una leve disminución del porcentaje de utilización, debido al aumento de Unidades de Terapia Intensiva entre el 06/08 y el 18/08

Porcentaje de utilización, debido al aumento de Unidades de Terapia Intensiva entre el 06/08 y el 18/08

Reforzando lo que venimos compartiendo los datos de los meses de julio y agosto muestran que la cantidad de camas totales aumentó un 10.2%, sin embargo la ocupación de las mismas aumentó 19.3%. Esta diferencia refuerza que por más que se sigan aumentando la cantidad de camas, en un momento no alcanzarán, y es ahí cuando la mortalidad del virus es infalible.

La figura 2a y 2b (inferior) compara la dinámica de aumento de la cantidad de camas de internación con la utilización de las mismas para el AMBA (sin CABA) para cuidados mínimos, intermedios e intensivos, entre los días 14/07 al 18/08 del 2020. En la figura 2a las barras azules muestran el porcentaje de aumento de las camas totales y las rojas muestran el aumento en el porcentaje de las camas ocupadas. La diferencia entre ambas, evidencia que de mantenerse este ritmo el sistema puede saturarse y colapsar.       

En la figura 2b se discrimina de manera porcentual, según dia 14/07, 21/07, 29/07, 06/08 y 18/08 del 2020 (Barras de colores) y según el tipo de complejidad de camas, que hay en el sistema sanitario) de MABA (Sin CABA).

La utilización de la cantidad de camas en el sistema sanitario bonaerense ha ido aumentando. Respecto a la medición del 06/08, el porcentaje total de ocupación de camas disminuyó levemente para todos los tipos de camas, y por ello es importante que no relajemos las medidas preventivas, sugeridas para evitar la propagación y el contagio por coronavirus

¡Estamos transitando el alerta roja de la pandemia!

Estamos atravesando uno de los momentos críticos de la pandemia en nuestro país, siendo actualmente el continente americano el epicentro de la pandemia. El confinamiento obligatorio tiene cada vez menos adhesión y como investigadorxs y trabajadorxs del campo de la salud apelamos a que la ciudadanía reconozca la importancia de tomar medidas de cuidados personales y colectivos para no estresar aún más el sistema sanitario. La responsabilidad civil se suma como una de las estrategias sustanciales de prevención que hoy tiene esta pandemia. 

El promedio de casos confirmados de la primera semana de agosto alcanzó los 4314 casos, mientras que en la semana del 12 al 19 de agosto el promedio de casos bajó a 4157. Si bien hay una leve disminución, es importante que siga cayendo la cantidad de casos diarios, para evitar la saturación del sistema como sucedió en varios países. La figura 3 muestra la tasa de duplicación de casos confirmados con Covid-19 para la Provincia de Buenos Aires desde el inicio de la pandemia.

Si bien un aumento de la tasa de duplicación de casos en días implica una reducción de la transmisibilidad del virus. El aumento sostenido de los casos diarios, hace que baje la cantidad de días de duplicación, con el riesgo de que el sistema colapse. Por eso es necesario que sigamos adoptando todas las medidas de cuidado a nuestro alcance para evitar que el sistema se sature y tengamos que lamentar aún más muertes.

La tasa de duplicación en días respecto de la medición del 06/08 tuvo un aumento de 21.9 días  a 26.7 días, lo que es consistente con la disminución del promedio semanal de casos confirmados por COVID-19 en la Provincia de Buenos Aires.

La economía mundial está atravesando la mayor caída de la que se tiene registro en la modernidad y el discurso de las derechas de mantener el “funcionamiento” de la economía pese al riesgo concreto de la saturación de los sistemas de salud, con el consecuente daño irreversible que trae aparejado la muerte, sólo muestra el desprecio a la vida y a la otredad que han tenido históricamente los sectores más conservadores y reaccionarios.

Las estrategias de prevención que venimos escuchando desde el comienzo de la pandemia, distanciamiento entre las personas, el lavado frecuente de manos, la protección de las vías respiratorias con el tapaboca-nariz y evitar las aglomeraciones, siguen siendo las únicas medidas preventivas que tenemos al alcance, para evitar contraer el virus  y de esta forma poner en riesgo a personas que si lo contraen pueden tener complicaciones graves incluso la muerte.

La responsabilidad civil se suma como una de las estrategias sustanciales de prevención que hoy tiene esta pandemia.  Que no colapse el sistema sanitario es una responsabilidad colectiva.

Artículo publicada originalmente en Red Argentina de Investigadorxs en Salud

Soledad Santini

Presidenta de la RAIIS y e investigadora del CONICET

Nasim Iusef Venturini
Nasim Iusef Venturini

Habitando la tarea de generar ciencia, con los pies en el barro y a partir de la acción, para construir justicia social. Me formo permanentemente en los campos de la economía y la salud, y considero que lo más importante es cuidarnos y cuidar nuestra tierra.

Jujuy, víctima de falsos presagios

Jujuy, víctima de falsos presagios

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

Era domingo 9 de agosto por la noche, la semana todavía no había arrancado, pero las malas noticias ya habían arruinado los días por venir. Se sentía el gusto amargo en la provincia jujeña por la confirmación de que se estaba en el peor pico de contagios durante este tiempo de lucha contra el virus invisible. Con la escultura de una pequeña virgen a su derecha y el micrófono a su izquierda, el Gobernador jujeño anunciaba el colapso del sistema de salud que tanto descuidó, y dejó entrever entre sus palabras flojas de información el desinterés de levantar a la provincia y más importante, a sus habitantes.

Esta fue la gota que colmó el vaso de meses llenos de abandono e irresponsabilidad del Estado.

El fallido ejemplo a seguir

La provincia de Jujuy presentó un progreso estable y controlado durante los primeros meses de lucha contra el COVID-19, manteniendo el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio en todo el territorio. Sin embargo, como todo señor radical de camiseta amarilla, no le falló a sus ideales y/o a los que pregonan sus compañeros de partido tanto a nivel nacional como regional.

Cuando la paz insostenible de consenso entre gobiernos, medios comunicacionales y la sociedad llegó a su fin al cumplirse 100 días de cuarentena, Jujuy tomó una de las peores decisiones y vivió las consecuencias.

La curva que indica el aumento de casos y fallecides no paró de subir cuando se pasó de fases hasta llegar a la apertura de negocios, shoppings, locales de comida y hasta la promoción del turismo interno. El gobernador apareció en todos los canales de televisión nacionales siendo alabado por periodistas poco contentos con el ASPO. Se lo reconoció como el ejemplo del país, pero vimos las graves consecuencias semanas después: el pueblo jujeño está en total crisis y descontrol.

A principios de mes se anunció que el 93% de las camas de terapia intensiva estaban ocupadas. El aumento de casos se dio en tan pocas semanas que el sistema hospitalario, abandonado por años, no pudo con el pico. Directivos y personal médico de hospitales hacen colectas porque no les llegan los materiales mínimos de protección que el gobierno debe garantizar. Además de que el cuerpo médico no da abasto con la cantidad de casos en cada institución.

La provincia le pidió a Nación millones de pesos hace días, lo cual se cumplió, pero nadie es testigo de ello, o por lo menos no el pueblo.

Las consecuencias se presentaron en las ciudades casi de inmediato. Las personas contagiadas se quedaron sin lugar donde ser atendidas por lo que vuelven a sus casas sin ninguna solución y esperando estar lo mejor que se pueda en esas condiciones. Fallecen en sus casas y les mismes vecines intentan comunicarse con familiares y/o allegades para que los cuerpos no queden abandonados allí. En esto se traduce el abandono del Estado.

A igual que los hospitales, los cementerios están colapsados. No hay lugar y no hay personal para enterrar a les fallecides, las familias tienen que cavar las tumbas con sus propias manos. Este fue el caso de José Domingo Ramírez, quien tuvo que enterrar a su madre. La funeraria le dijo que debía “ir al cementerio y hablar con el encargado”, pero lamentablemente él iba a tener que cavar la fosa y enterrarla porque “la empresa no se hace cargo de eso”, explicó en diálogo con C5N, y además agregó: “Nunca me hicieron un test porque no tenían”, por más que se supiera que estuvo en contacto con su difunta madre.

Otro caso lamentable que se dio en la provincia fue el del fallecimiento de un hombre por ingerir dióxido de cloro. El químico fue recomendado por diferentes comunicadores, entre elles la famosa Viviana Canosa, y generó un cuadro de desinformación muy peligrosa. La irresponsabilidad de difundir “remedios” no aceptados por los organismos competentes pueden resultar fatales como fue el caso del hombre mencionado.

Luego de estos desgraciados eventos, el gobernador Morales apareció en el escenario. El 10 de agosto, en el anuncio de la ocupación casi total de las camas de terapia intensiva, Morales instó, como solución al problema, a “que se metan el antibiótico para ir peleándola de entrada”.

A raíz de esto el gobernador fue denunciado penalmente por el Colegio de Farmacéuticos y el Colegio Médico de Jujuy, quienes aclararon que los medicamentos sólo se dispensan bajo prescripción médica y pidieron un uso racional de ellos para evitar un faltante para quienes los necesitan. También desde el Ministerio de Salud de la Nación, siempre se sostuvo la recomendación de evitar la automedicación ante los primeros síntomas.

Ingenio Ledesma como foco de contagio

El ingenio jujeño Ledesma y sus herederos, los Blaquier, son históricamente recordados como fieles seguidores de las órdenes dictatoriales de hace unas décadas por la Noche del Apagón. Hoy en día, su mala fama no ha cambiado demasiado: les trabajadores de sus plantas industriales no trabajan en las condiciones adecuadas por lo que, a través de los años, el ingenio se ha visto rodeado de polémicas y luchas por parte del gremio, el Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma.

En este contexto pandémico, el complejo del ingenio se convirtió en un descontrolado foco de contagio y propagación del COVID-19 por la falta del cumplimiento de los protocolos de seguridad e higiene y las condiciones precarias de trabajo que se denuncian hace tiempo. Luego del fallecimiento de cuatro obreros y tres de sus familiares, el gremio estableció un paro de 24 horas en forma de protesta. Les contagiades son alrededor de 250 trabajadores.

A través de un comunicado llamado “Los dueños de la muerte”, el sindicato reclamó “la realización masiva de testeos a las y los trabajadores, cambios en el departamento de medicina laboral, la ralentización del movimiento de personas, el respeto de los tiempos de recuperación, el seguimiento y evolución de los trabajadores, la eliminación de sanciones ilegales, el control estricto de los protocolos, el licenciamiento de mayores de 60 años y el respeto del salario de todas y todos”.

Sin embargo, sin importarles si les trabajadores sufren enfermedades previas o si tienen familiares que no pueden exponer, les pasan a buscar en camiones apretados y sin protocolos; se trabaja igual. Como no son los grandes dueños los que se enfrentan al virus por un plato de comida de un sueldo que ni siquiera es el adecuado, no les interesa.

En consecuencia, la organización Abogados y Abogadas del Noroeste Argentino en Derechos Humanos y Estudios Sociales (Andhes) realizó presentaciones ante las carteras laborales de Nación y Jujuy por vulneraciones a los derechos humanos en la empresa.

En su intervención manifestaron algunos aspectos en los que se incumplen las normas de prevención: los elementos de protección son de fabricación casera y a la hora de trabajar se les imposibilita respetar la distancia mínima de seguridad. Además, se comentó que los grupos más vulnerables de la sociedad son los obreros vinculados a las tareas agrarias por recibir menos ingresos salariales y, por lo tanto, tener menos posibilidades de acceder a las medidas sanitarias necesarias para enfrentar el virus.

Fuente: Diario El Paso

La provincia terminó la semana con la sorpresiva noticia de que su gobernador dio positivo de COVID-19, el mandatario lo confirmó el viernes 14 a través de sus redes sociales. “Quiero comentarles que recién me confirmaron el diagnóstico de COVID-19 positivo. Me encuentro asintomático, cumpliendo con el aislamiento y todas las recomendaciones médicas”, afirmó. Los casos de contagios hasta ese día eran 4.238, con la recuperación de 3.116. La cantidad de fallecides superan un centenar.

Las consecuencias no son invisibles como el virus, por más que se intente ocultar en las grandes pantallas. La gestión del jefe jujeño de Cambiemos demostró cómo la política neoliberal condena al pueblo, y queda más claro en situaciones de extrema gravedad y de necesidad de un Estado presente.


Referencias:
https://rnma.org.ar/2020/08/06/denuncia-contra-exar-s-a-y-ledesma-s-a-a-i/
https://www.tiempoar.com.ar/nota/jujuy-con-el-sistema-de-salud-casi-colapsado-morales-llama-a-automedicarse


Agustina Flores
Agustina Flores

Soy hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

Los ladrones de guantes rojos

Los ladrones de guantes rojos

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

Somos millones los que nos alarmamos por el hambre o militamos y tratamos de tender una mano del modo que sea, para aliviar los golpes que esa violencia les pega todos los días a millones de seres humanos. Pero con eso nunca alcanza, la violencia es muy grande.

¡La violencia no es la pobreza! ¡La pobreza es la consecuencia de la violencia económica que ejercen los pocos que poseen la riqueza que es de todos! Cuando escuchamos “riqueza concentrada”, de esto se trata. ¡En el mundo, unos pocos se quedaron con lo que es de todos! Y van a hacer lo posible para seguir estafando y saqueando como lo vienen haciendo en nuestras tierras desde hace más de 500 años.

Desde que somos “Argentina”, estos señores tomaron muchas veces por asalto la Casa Rosada.  A través de innumerables golpes de estado desalojaron a los gobiernos que hicieron o intentaron hacer algo para repartir de manera un poco más justa esa riqueza concentrada. Pero en el 2015 le regalamos los votos y ya no les hicieron falta “las botas”, ni las balas, ni los bombardeos.

 En 2019 se retiraron heridos ¡pero están muy vivos! No olvidemos que se fueron con casi un 40% de los votos y siguen presentes en sus medios de comunicación, hablando como si tuvieran la solución para combatir la pobreza, ¡como si ellos no la hubieran generado y profundizado!

Los últimos años de neoliberalismo, y todos los gobiernos serviles a los ladrones de “guantes rojos” llevaron la desigualdad a niveles desesperantes, ¡hay pibes que ni llegan a pibes!, antes se mueren por desnutrición o por las enfermedades que los amenazan en los lugares que les toca nacer. Pero, así como muchos seres humanos se empobrecen hasta la muerte, otros se siguen enriqueciendo hasta niveles extremos.

Desde que asumió, el gobierno viene tomando medidas en defensa de los sectores empobrecidos, y digo en defensa porque esto no es un accidente ni una tragedia, es la consecuencia de un violento y feroz ataque lanzado por los sectores que se dedican a la especulación, que profundiza la concentración de capitales y que con toda desfachatez mandan sus “ganancias” a los paraísos fiscales creados por ellos mismos. Paraísos que son verdaderos infiernos que terminan con la vida de poblaciones inocentes, que tuvieron la desgracia de nacer en un territorio que tiene un subsuelo lleno de petróleo, agua, o de cualquier mineral codiciado y saqueable por los ladrones de “guantes rojos”.

¡Los misiles del robo y el capital financiero!, cada vez en menos manos, bombas atómicas circulando por las redes sociales que anuncian con total impunidad la tabla de posiciones de los apellidos y las familias más concentradoras de la economía mundial (no merece llamarse riqueza a la causa que genera la pobreza de tantos millones de personas) números tan grandes que no alcanza el ancho de esta página para escribir esa cantidad de cifras.

¡La concentración económica es un acto violento y criminal y es la plataforma de lanzamiento desde donde parten los misiles que matan por desnutrición a nuestros hijos! ¡El pobre no es el responsable de la pobreza! ¡Y si! ¡Hay que combatir la pobreza, está muy bien actuar con rapidez y tomar medidas de emergencia! Es lo primero que hay que hacer y felicito a los gobernantes, legisladores, voluntarios, organizaciones sociales y políticas que están llevando adelante estas acciones.

¡Pero repito, el hambre es la consecuencia del crimen llamado “Concentración de la riqueza”! Y el día que entendamos que esa concentración es un acto criminal y nos indigne tanto como la pobreza, vamos a estar comprendiendo quienes son los máximos responsables de esos crímenes ¡Digo máximos responsables porque reconozco que hay una lista de grados de responsabilidad, pero ¡Oh casualidad! ¡Los máximos responsables son casi invisibles! ¿Invisibles o invisibilizados? Ustedes ya saben. Blindaje mediático, medios hegemónicos, ¿Les suena?

Cada uno sabrá el grado de responsabilidad que le toca: Empresarios, funcionarios, jueces, legisladores, nosotros mismos; y no para sentirse culpable y flagelarse, sino para comprender que esto no es algo natural, y si los seres humanos construimos esta sociedad también podemos cambiarla. Para construir una sociedad más solidaria y con menos violencia, debemos comenzar a “desarmar” las bases de lanzamiento desde donde parten los misiles que matan a nuestros hijos y hermanos.

Esas bases están ahí afuera, pero en nuestras decisiones individuales y en nuestras organizaciones debemos profundizar la solidaridad y “desarmar” los niveles de competencia e individualismo para así podernos demostrar y demostrarles a los “señores de guantes rojos” que otra sociedad es posible.

¡Y en el medio de esta situación, la pandemia!, ¡llovido sobre mojado! La economía sigue en caída, la esperada reactivación se demora, la desocupación y la pobreza aumentan y los recursos del estado se priorizan para a reparar un sistema de salud que hace muchos años está muy precarizado pero que en los últimos cuatro se agudizó. Se multiplicó la cantidad de camas de terapia intensiva, se construyeron nuevos hospitales y centros de aislamiento para los contagiados, etc.  El gobierno también toma medidas de ayuda para los sectores productivos castigados por la pandemia, con más aciertos que errores y con recursos que nunca alcanzan a cubrir todas las necesidades.

¡Y el impuesto por única vez al 1% más rico de la Argentina! ¡Y Vicentín! Y volvieron a subir sus niveles de violencia los medios de comunicación que defienden a los señores de “guantes rojos”. “¡Comunistas!”, “¡Vamos a convertirnos en Venezuela!”, “¡La yegua está detrás de todo esto!”, y otras tantas fantasías y barbaridades alentadas por los sectores anticuarentena, que mienten y manipulan a una pequeña parte de la población hasta arrastrarlos a movilizaciones ridículas, peligrosas e ilegales. No estoy negando el derecho a la protesta y a la honestidad de algunos sectores que están muy castigados por esta pandemia.

El 6 y 9 de agosto se cumplen 75 años dos de los mayores actos de violencia de la historia de la humanidad, los bombardeos de las Islas Japonesas de Nagasaki e Hiroshima, y nunca se detuvieron. Matan con bombas, con golpes de estado, con saqueos de recursos naturales, endeudamientos… Con estos señores de “guantes rojos”, y sus aliados, se tuvo que sentar nuestro joven ministro de economía, a negociar el pago de una deuda de la que el pueblo argentino no tuvo ningún beneficio. Pero se tuvo que sentar, y logró un resultado más que digno. No olvidemos que estaba frente a los señores de “guantes rojos”.

Y digo, “guantes rojos” porque en muchos casos, las manchas de sangre se los ha teñido por completo.

Lic. Fabián Scorpino

Consejos Permanentes por la No violencia Activa

1