¿Y si le ponemos correa a Zuckerberg?

¿Y si le ponemos correa a Zuckerberg?

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

Imaginemos que el mítico filósofo griego Platón vuelve de los muertos para caminar (con barbijo) por las calles de Palermo, o va, de curioso nomás, a una marcha donde solo ve banderas de Argentina, carteles que no tienen sentido, gente saltando a destiempo y vociferando como verdad cualquier frase, que puede ser tranquilamente producto de un sueño húmedo de Durán Barba. Pensaría ¿che, me habré ido al carajo con esto de la alegoría de las cavernas? Y si mientras escrolea frenéticamente en Twitter escucha a Juana Viale hablando de meritocracia o a Sturzenegger dando concejos sobre cómo controlar el dólar ¿se pegaría un corchazo al grito de “todo rompen”?

Cuando te lo ofrecen gratis, el producto sos vos

La realidad parece cada vez más inverosímil, como si en lugar de tomar las distopías de Aldous Huxley o George Orwell como críticas a la sociedad, se hiciera lo imposible para hacerlas realidad. Las principales responsables de la crisis de información son las empresas dueñas de redes sociales, ya que cambiaron no solo los modos de percibir la realidad, sino que también permitieron que multinacionales y sectores de la derecha más reaccionaria las utilizaran para los fines más nefastos.

El principal problema que traen las redes sociales es la pérdida del lazo social en favor de burbujas en donde cada persona se encuentra inmersa en un universo que lo obliga a estar conectado y que al mismo tiempo reafirma solo lo que piensa. Esto arroja como resultado una sociedad víctima de una terrible pérdida del pensamiento crítico, que termina propiciando que la información y los datos relevantes pasen a un segundo plano para dejarle a la emocionalidad un lugar central. Es que ya no importa qué se comunica, sino los sentimientos que ese mensaje genera en el receptor.

La batalla por el sentido

Es en este marco donde se inscribe la coyuntura política nacional, dónde un gobierno popular debe encontrar la manera de sortear esta marketización del discurso para poder hacerle frente a ejércitos de blogueros, periodistas y bots, que lo único que buscan es propagar a través del miedo (la emoción más fuerte, relacionada incluso con la supervivencia) las ideas más recalcitrantes. En ese sentido, la principal preocupación del gobierno de les Fernández debería ser legislar sobre la información personal que cada usuario le da a las redes sociales, para que la misma no sea usada para realizar acciones de Target Marketing.

En Argentina los medios de comunicación se encuentran en una cruzada contra el gobierno pocas veces vista. Es que más allá de que sea vox populi que apoyaron golpes de estado y justificaron delitos de lesa humanidad, no deja de sorprender que en medio de una pandemia, que requiere el distanciamiento social, convoquen a cientos de personas enajenadas a contagiarse. ¿Buscarán acaso la muerte de cientos de argentinos para que colapse el sistema sanitario? En ese caso ¿no debería el gobierno ir un poco más lejos que salir constantemente a desmentir operaciones mediáticas? ¿Con qué se combate el odio y el miedo?

Periodismo de guerra

Es tal el poder mediático que parece que el brillante canje de deuda realizado por Martín Guzmán, con la consecuente reducción de mil puntos, (sí, MIL puntos de riesgo país), nunca hubiera ocurrido. En cambio, hoy la “preocupación” es que la clase media no puede comprar dólares. Sin embargo, lo que no cuentan es que el dólar es una commodity fundamental para la importación de insumos y que en los cuatro años anteriores asaltaron el Banco Central y facilitaron la fuga de 80 mil millones de dólares, divisas que hoy (en medio de una contracción económica mundial pocas veces vista) son vitales para el desarrollo de cualquier modelo de país.

El problema siempre es de clase

Por otro lado, mientras que desde Juntos por el Cambio se oponen (¿spoiler alert?) a que les cobren un impuesto extraordinario a las personas más ricas del país (después de todo son sus aportantes de campaña), argumentando que es un sector golpeado, entre otras frases igual de lisérgicas, hay personas viviendo en las peores condiciones en terrenos usurpados, exigiendo y poniendo en discusión una de las principales deudas de la democracia: el acceso a la tierra como un derecho humano.

En tanto, desde la otra vereda se esgrimen argumentos desde la legalidad en defensa de la propiedad privada, pero no hay que olvidar que, en primer lugar, esas tierras están manchadas con la sangre de los pueblos a los cuales se las arrebataron y segundo, que la legalidad (cómo cualquier discurso) es una ficción, por lo tanto está lejos de ser una categoría acabada y que incluso se encuentra atravesada por discursos clasistas. Es más, podría afirmarse que el sistema legal es uno de los instrumentos que se inscriben en la lógica de la perpetuación de las desigualdades de las sociedad argentina.

El hecho de que gran parte de los lotes en disputa sean de un mega proyecto para construir un country lo grafica mucho mejor que cualquier análisis: de un lado, gente viviendo en carpas, pasando frío y todo tipo de penurias; y del otro, un sector que responde a las clases altas. El problema como siempre, es de clase y allí debe estar al pie del cañón el peronismo, el único movimiento político que supo escuchar las demandas de las clases populares.

En ese sentido, uno de los principales proyectos que se encuentran entre las alternativas que baraja Axel Kicillof consiste en que el gobierno provincial compre a través de un fideicomiso y las reparta en carácter de lotes sociales. La construcción de las viviendas sería llevada a cabo por distintas cooperativas de trabajo, porque, como siempre, nadie se salva solo.

Alverso y el lawfare

Otro frente de batalla (¿no serán muchos?) que enfrenta el gobierno nacional está relacionado con el poder judicial. En principio, el primer embate al que se resisten desde el sector que fue punta de lanza en el lawfare es la reforma judicial, que básicamente buscar descentralizar el poder que tienen los tribunales federales de Comodoro Py (donde van a parar causas de corrupción, narcotráfico, trata de personas, etc), una de las cloacas de la democracia argentina, donde se dieron milagros matemáticos como que en el 90% de las causas contra CFK saliera sorteado Claudio Bonadio.

El segundo embate, está relacionado con la locura del gobierno de Alverso, Kretina y Kicillof de impedir que distintos jueces puestos a dedo en el último año de Cambiemos sean trasladados a puestos estratégicos. Lo llamativo es que casi con un discurso único, Clarín, Infobae y la Nación se rasgan las vestiduras hablando de republicanismo, pero cuando el mamerto designó a un juez de la corte suprema (ex abogado de Clarín, siempre muy endogámico) por DNU, miraron para otro lado. Lo que queda claro, una vez más, es que importan las emociones y no la verdad, y en ese terreno es en el que salen victoriosos.

El principal problema del gobierno es comunicacional. En principio porque la batalla, en tanto no se legisle, es totalmente desigual. Argentina ya supo ser vanguardia en leyes como la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, y ahora es momento de que lo sea legislando no sólo a las empresas que proveen los servicios, sino también a las aplicaciones como Facebook y Twitter, donde a través de permisos que nadie lee pero todos firman, se les otorga poder absoluto sobre información sensible de las y los usuarios: no sólo datos personales, sino también sobre el comportamiento de estos en las redes, lo que permite trazar un patrón psicológico que después es explotado por el mejor postor.

El monopolio de la información y de los datos no puede ser más un arma de las corporaciones para desestabilizar a gobiernos populares, como ocurrió en Bolivia, Brasil o incluso en Bielorrusia, dónde utilizan siempre las mismas estrategias: fake news para exacerbar el miedo y odio de una parte de la sociedad. En este contexto, es urgente la reformulación de una ley de medios que contemple todos estos factores y permita que la comunicación deje de ser utilizada como arma.

Nicolás De La Iglesia
Nicolás De La Iglesia

Existencialista. La cuestión del «ser» me parece inabordable. El humor es mi bálsamo, la tabla con que surfeo la ola de mierda que puede ser la realidad. Hace poco me dí cuenta que siempre fui peronista.

¿Qué pasa con el caso Cristina vs. Google?

¿Qué pasa con el caso Cristina vs. Google?

TIEMPO DE LECTURA: 8 min.

El pasado 6 de agosto, la vicepresidenta Cristina Fernandez de Kirchner anunció a través de la red social Twitter que había realizado “una presentación judicial para solicitar una pericia informática urgente contra Google, que serviría como prueba de una demanda”. Este hecho se remonta a que en mayo de este año si une buscaba el nombre de la vicepresidenta en la plataforma, el primer resultado era el de Wikipedia en el que la descripción era “Ladrona de la Nación Argentina”.

La demanda fue aceptada por la justicia, por lo que el viernes 10 de agosto Cristina notificó a la empresa el fallo a favor, además de la resolución judicial que ordenó la pericia informática para determinar el alcance del daño perpetrado y que obliga a Google a conservar todos los datos asociados al nombre “Cristina Fernández de Kirchner” y “Cristina Kirchner” a partir del 17 de mayo de 2020 hasta el día en que se realice la pericia.

Google: Su algoritmo y las fuentes externas

Como cualquier otra empresa, la idea de Google es que une pase más tiempo en su plataforma sin irse a links externos que no sean de la compañía (como puede ser Google Maps en caso de buscar una dirección concreta, por ejemplo). Para que esto suceda se deben tener en cuenta varios factores para que los resultados de las búsquedas sean lo más precisos posibles. Estos factores pueden ser el tema a buscar, la cantidad de palabras utilizadas, las últimas búsquedas realizadas en base a ese tema, y la publicidad consumida por el usuario almacenada en el registro de Google.

Un dato no menor es este último, ya que también los resultados van a depender de la publicidad que consumimos, productos, redes sociales o hasta temas de los que hablamos con nuestro aparatos con micrófonos cercanos ya que Google toma registro de todas estas cosas TODO EL TIEMPO para que las busquedas terminen en su plataforma. El uso del registro de voz es una de las cosas que detalla en sus términos y condiciones de uso para evitar cualquier tipo de demandas o confusiones, y aunque se puede desactivar, no deja de ser peligroso para todes les usuaries el hecho de que esta empresa te escuche todo el tiempo.

A la hora de mostrar los resultados de la busqueda, Google los ordena utilizando su propio algoritmo llamado “PageRank”, que ayuda a determinar la relevancia o importancia de una pagina. A cada página web se le asigna un número en función del número de enlaces de otras páginas que la apuntan, el valor de esas páginas y otros criterios no públicos.

Aquí encontramos que páginas de la fundación Wikimedia (dueño de Wikipedia y Wikidata) califican dentro de las fuentes confiables de Google a la hora de mostrar los resultados de una búsqueda. De hecho, que Wikipedia sea uno de los primeros resultados a la hora de buscar cualquier tipo de información juega un papel más que importante en este caso.

Para tratar de explicarlo de la manera más simple, podríamos decir que Wikipedia es básicamente una enciclopedia mundial traducida a casi todos los idiomas y que se nutre de manera colaborativa. Que sea colaborativa hace que cualquier persona desde cualquier parte del mundo pueda editar sus artículos que, si bien deben pasar por una aprobación, esta aprobación puede tardar días, por lo que este artículo puede aparecer con la última edición realizada.

Wikipedia no solo se nutre de los artículos creados en su plataforma, sino que su base funciona de manera conjunta con Wikidata. Wikidata es una base de datos enfocada en elementos que cumple 3 funciones básicas: 

1 – Centralizar los enlaces interlingüísticos – enlaces entre artículos sobre el mismo tema en diferentes idiomas.

2 – Proporcionar un lugar central para la información de las fichas de todas las Wikipedias.

3 – Crear y actualizar listas de artículos basados en datos de Wikidata.

Como Wikipedia, Wikidata también es editado de forma colaborativa, por lo que también la edición de sus artículos pueden figurar de la como han sido realizadas antes de ser verificadas y aprobadas.

CFK, Google y los hechos concretos del caso

Si hay una realidad es que en este caso Google tiene las de perder. Si bien ninguno de los empleados de Google tipeó “Ladrona de la Nación Argentina” para referirse a la presidenta, millones de personas vieron esto reflejado en su búsqueda bajo el nombre de la vicepresidenta.

Que Google repita sus datos de Wikipedia, que basa sus conocimientos en Wikidata, también es una elección propia. Y si bien la traducción manipulada del término inglés “Vicepresident” se adulteró en su traducción a “Ladrona de la nación”, esto fue absorvido por Google causando el daño.

De hecho, lo más relevante del caso es que Google elige mostrar la información de Wikipedia y darle el lugar de privilegio a esta información, agregando esta descripción a su panel de conocimiento, lo que hizo que este resultado sea exhibido en su producto y no en una dirección externa. Esta es una decisión editorial y, por ende, es responsabilidad de Google. 

Datos del ultimo cambio realizado en Wikidata sobre Cristina Fernandez.

Otro de los hechos menos conocidos es que la perjudicada no sólo fue Cristina. De hecho, si durante esos días de mayo se buscaba al Gobernador de la Provincia de Buenos Aires Axel Kiccilof, el mismo aparecía como “enano comunista”, y el expresidente Amado Boudou como “parásito argentino”.

Que Cristina inicie acciones legales contra Google y no contra Wikimedia también es relevante. Sin el artículo de Wikipedia y la información de Wikidata no se habrían dado estos resultados, pero la diferencia es que los productos de Wikimedia son editados constantemente por muches usuaries, por lo que este hecho no es responsabilidad directa de la empresa. En cambio, la decisión de Google de priorizar estos datos es deliberada.

La pobre defensa de Google y antecedentes similares

El CEO de Google, Larry Page, repitió durante muchos años que el buscador de Google era solo “un lugar de paso hacia, donde el buscador trataba de redirigir a los creadores de contenido de la manera más rápida posible”. Esta concepción ya no es la misma, ya que como hemos aclarado anteriormente, al día de hoy Google trata de que les usuaries pasen más tiempo en su motor de búsqueda. De hecho, un estudio realizado en el año 2019 comprobó que el 50% de las búsquedas realizadas no terminaban en ningún click a enlaces externos. Las búsquedas realizadas en Google terminaban en Google, hecho que se conoce como “las búsquedas sin clicks”.

Estas búsquedas sin clicks no son nuevas. Desde 2015, por ejemplo, si uno busca “te fuiste a la b” en el motor de búsqueda, este te muestra la ubicación del estadio Monumental. Lo mismo con “ex-club” y la Bombonera, cosa que sigue pasando si uno realiza la búsqueda en Google Maps.
Google no puede defender esa postura de repetición ya que eso serviría en casos como el de Belen Rodriguez en 2014, donde la modelo intentó iniciar cargos tanto contra Google como contra Yahoo! porque su nombre aparecía asociado a paginas pornograficas, haciendo responsables a los motores de búsqueda. En ese caso, se consideró que como el contenido es de un sitio externo, no se podía hacer responsable a los buscadores, ya que sólo muestran resultados de contenido guardado en otros sitios en base a si contienen palabras que coinciden con las de una búsqueda.

En el caso de CFK, la fuente es Wikidata. Y como indica su “PageRank”, Google se nutre del contenido de esa base de datos comunitaria para múltiples resultados, así como de Oxford Languages para definiciones de palabras, Weather.com para el clima, y tantas otras paginas que funcionan como fuentes “confiables”.

Los resultados arrojados por Google Maps al buscar “te fuiste a la B” muestran como funciona el algoritmo del motor de búsqueda y como este afecta a otros productos de la empresa.

Así como hay casos que no prosperaron, hay casos que sí. La promulgación del “derecho al olvido” en el 2014 impulsada por la Unión Europea ha sido de gran ayuda para esto. En la misma, se aclaraba que Google debe atender a las peticiones de les usuaries que soliciten el borrado de contenidos que les afectan negativamente. 

Según los tribunales, Google es responsable de almacenar, indexar y por lo tanto procesar la información, por lo que es responsable del contenido que aparece en el buscador.

El “derecho al olvido” ha sido de gran ayuda en muchos casos. Sin ir más lejos, la semana pasada la justicia argentina aplicó este fallo por primera vez, siendo la conductora y productora argentina Natalia Denegri quien consiguió que se dictamine este fallo.

La Cámara Nacional en lo Civil confirmó la aplicación, por primera vez en la Argentina, del “derecho al olvido”, a favor de la productora argentina Natalia Denegri, en su demanda contra la compañía Google, que deberá quitar de su buscador todas las referencias al pasado mediático de la mujer, según informó su abogado, Martín Leguizamón.

Este hecho será de gran importancia para muchos casos de acá en adelante, sobre todo teniendo en cuenta las múltiples denuncias de distintas modelos por la asociación a paginas pornograficas. Hasta da a pensar que el caso de Belen Rodriguez con esta nueva disposición podría haber tenido otro tipo de desenlace.

Los antecedentes viejos(y no tanto) de cómo funciona Google, demuestran que con el fin de acaparar todo, la empresa llegó a un punto en el que no controla muchos de sus resultados. El funcionamiento de sus algoritmos en este momento demuestra que una búsqueda con las palabras adecuadas puede alentar a la aparición de muchas fake news, por lo que esperamos que este caso tenga el desenlace que se merece para que la protección de los datos de les usuaries sea la prioridad.


Fuentes:
https://searchengineland.com/now-more-50-of-google-searches-end-without-a-click-to-other-content-study-finds-320574
https://www.lanacion.com.ar/tecnologia/europa-reconoce-el-derecho-al-olvido-en-internet-nid1690239/
https://www.telam.com.ar/notas/202008/499161-cristina-kirchner-google-denuncia-difamacion-pericia-informatica.html
https://www.telam.com.ar/notas/202008/501561-natalia-denegri-fallo–google.html

Jonatan "Chino" Pérez
Jonatan “Chino” Pérez

De humor ácido, bastante particular. Una enciclopedia de datos poco interesantes. Un poco friki, un poco otaku, y muy colgado. Me dicen «Chino» desde siempre, y no se porqué pero me queda mejor que mi nombre. Un intento de productor de la gloriosa No Se Mancha, columnista en Columna Vertebral, y escritor de la Trinchera.

Fake News: un recorrido por su histórica controversia

Fake News: un recorrido por su histórica controversia

TIEMPO DE LECTURA: 11 min.

Una primera aproximación a su significado podría ser: “son noticias, historias, artículos, etc. engañosas, creadas para desinformar deliberadamente o engañar al lector”. Si bien no hay consenso total sobre su definición, ronda entre conceptos como el anterior. Un aspecto que es discutido dentro de un campo más diverso es su fecha de origen. Se suele pensar que son propias de la globalización y de la extensión del uso de internet, herramientas que pasan por desapercibidas escondidas entre las millones de noticias que se comparten en el día a día. Pero si nos remontamos al siglo anterior, podemos identificar cómo estas prácticas son cualquier cosa menos nuevas.

Otra creencia es que la primer fake news se dio en octubre de 1938, cuando Orson Welles engañó a un país entero con su relato. La intención fue realizar una puesta en escena teatral a través de una radio de la cadena CBS de Nueva York, si bien se había presentado la obra antes de empezar, no todes les oyentes se unieron al programa en ese momento. “Señoras y señores, interrumpimos nuestro programa de baile para comunicarles una noticia de último minuto procedente de la agencia Intercontinental Radio. El profesor Farrel del Observatorio de Mount Jennings de Chicago reporta que se ha observado en el planeta Marte algunas explosiones que se dirigen a la Tierra con enorme rapidez… Continuaremos informando, luego de semenjante anuncio, la mayoría de les oyentes que habían hecho caso omiso a la presentación de la adaptación de “La guerra de dos mundos” de H.G.Wells o no habían llegado a escucharla, pensaron que la situación estaba sucediendo en la realidad, por 59 minutos el país estuvo a la expectativa de una invasión marciana llena de pánico y caos.

Pero ¿fue realmente una fake news? El objetivo del relato no fue el de panicar a les oyentes y que los teléfonos de las estaciones de policías del país se llenaran de llamadas pidiendo explicaciones, el impacto fue solo una consecuencia. Si concordamos en que las fake news tienen un objetivo manipulador, la reivindicación de este hecho por ser la primer fake news, es ni más ni menos falso.

De este lado del mundo, en Nuestra América, hemos vivido el uso de esta herramienta tanto en episodios caóticos como en nuestra cotidianeidad. Un recorrido por ellas nos permitirá entender en qué contextos se dan y cómo no solo funcionan dentro de la sobreinformación sino tambien cuando la información falta.

Fake News y la cultura del terror

En la década de los 70’, dentro de un clima de terror y persecución por las dictaduras militares, se presentaron varios precedentes de fake news. Gobiernos democráticos fueron derrocados y atacados por las Fuerzas Armadas. Estas fueron guiadas por su entrenamiento en la Escuela de las Américas, gestionada y creada por Estados Unidos con lógicas imperialistas para mantener su influencia en el Cono sur y marcando como enemigo a eliminar al comunismo, que ya había ganado las tierras de Cuba años antes. Las dictaduras se establecieron mediante la fuerza y se perservaron gracias al terror y a la desinformación generada, la mayoría de las veces, por fake news.

Los grandes grupos de poder periodísticos encubrieron durante ese período (y más tiempo) las atrocidades cometidas por los gobiernos dictatoriales. Medios como El Mercurio en Chile y La Nación en Argentina fueron actores fundamentales para instalar la idea de que lo que sucedía era una guerra que debían dar inevitablemente: de otra forma, el “subversivo” atentaría contra la seguridad nacional.

Un caso a recordar es el de les 119 desaparecides chilenes. El comienzo se dio en 1975 cuando el diario “La Segunda” -propiedad del diario “El Mercurio”- relató que grupos marxistas recibían instrucción en Argentina y que “organizaban guerrillas en contra de Chile”. Allí mismo, se aclara que sus nacionalidades eran chilenas y que eran las personas declaradas como desaparecidas en su país. A esta campaña se le sumó Argentina a través del diario “Lea” y Brasil mediante el diario “O’Día” donde reafirmaban la información de que los cuerpos que se encontraban en sus países eran chilenos y por supuesto, guerrilleros. Crearon de esta forma una red de encubrimiento con los tres países adentro.

Fuente: Wikipedia

Siguiendo el panorama de los medios chilenos y del poderoso diario El Mercurio podemos mencionar el caso de Marta Ugarte, quien fue perseguida, desaparecida y asesinada por la dictadura chilena en 1976. Marta fue parte de los operativos de los vuelos de la muerte, y su cuerpo fue encontrado en la costa, de hecho fue el único. A los días, la situación se encontraba en la portada del Mercurio, pero haciendo pasar el asesinato a sangre fría por oficiales genocidas por un “crimen pasional”, destacando que se trataba de una “hermosa” y “atractiva joven de 23 años” asesinada por su pareja. Tanto El Mercurio como los demás diarios de su autoría, La Segunda y La Tercera desvirtuaron la situación al evadir la verdadera historia y al crear un clima de fake news con un objetivo claro, encubrir las acciones del gobierno creando un montaje periodístico cruel e inhumano.

Años más tarde, con la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a Argentina en 1979, los medios seguían ocultando las tan evidentes torturas de la dictadura militar. La Nación fue un actor fundamental en la publicación de una solicitada a la CIDH titulada “Los argentinos queremos decirle al mundo”. Esta, firmada por más de doscientas cámaras empresariales y civiles, le decía a la Comisión que en la Argentina había sucedido una guerra y que la decisión de combatir o no en ella no había sido solo de las Fuerzas Armadas.

De esta forma, podemos ver que mientras estos grupos mediáticos sigan manteniendo el poder de crear sentido a través de sus monopolizaciones, van a atender a sus intereses directos, que les ayudan a mantener su fuerza y legitimidad en la sociedad. Los diarios y los negocios pasan de generación a generación en familias de alto rango social, callando las voces de quienes intentar derrumbar su reino a través de la tergiversación de los hechos y creando ideas erróneas en el pueblo.

Ahora ¿por qué fue efectiva? Los medios que brindaban información eran pocos y no existían otras fuentes que fueran tan accesibles para las personas, o no por lo menos para la gran media de ellas. La mayoría de estos medios tenían al mismo propietario, por lo que la diversidad de análisis y contenidos no transitaba dentro de un gran espectro. Mismos dueños, mismos intereses.

Fake News y ocultamiento

Los años pasaron y en Argentina el modelo neoliberal no paraba de privatizar y monopolizar todo lo que estuviera al alcance del sector privado -y si no lo estaba, se encargaban de cambiarlo-. En un sistema gubernamental, y esta vez, democrático, seguimos encontrando casos donde la manipulación de las masas sigue siendo el principal objetivo de empresas comunicacionales guiadas por la economía.

Comenzaba el siglo y el país se sumergía en un clima de completo caos. El saqueo al pueblo argentino fue tal que generó una tasa muy alta de desempleo y pobreza. A raíz de este conflicto, trabajadores desocupades decidieron reunirse y organizarse en cooperativas para afrontar la crisis que les golpeaba más que a nadie.

El 26 de junio del 2002, en el puente Pueyrredon de los accesos a la Ciudad de Buenos Aires, se manifestaron en forma de piquete miles de trabajadores desocupades junto a sus organizaciones, del otro lado les esperaban las fuerzas de seguridad. La represión fue una cacería que terminó llevandose la vida de dos personas: las de Darío Santillan y Maximiliano Kosteki.

En la estación de tren de Avellaneda, donde fueron asesinados a sangre fría, se encontraban fotógrafos del diario Clarín que se habían acercado a cubrir el piquete, y que terminaron siendo testigos de la masacre en manos de los efectivos policiales. Volvieron a sus oficinas con las fotos que indudablemente eran evidencias del crimen que se acababa de cometer y las presentaron ante sus jefes de redacción para que salga en la próxima edición del día, pero estos le dieron otro destino al material.

Según redactores de otros diarios reconocidos del país, los funcionarios de Duhalde, el presidente en ese entonces, se habían encargado de comunicarse con los medios más grandes del país para dar su historia oficial del asesinato: el de un enfrentamiento.

El titular de la nota de ese día fue “La crisis causó dos nuevas muertes”, desligando totalmente del rol de responsable al gobierno y a las fuerzas de seguridad. Las fotos que le siguieron eran confusas y poco claras, sólo se veían manchas en movimiento.

Si bien tenían las imágenes y las evidencias de que Alfredo Fanchiotti y Alejandro Acosta habían asesinado a los dos manifestantes, decidieron no publicarlas y contar otra historia, se apelo al supuesto desconocimiento de los hechos. Los fotografos de Clarín no habían sido los únicos testigos de la masacre, por lo que días después, la situación fue tan evidente por el material y las acusaciones de estes periodistes, que tuvieron que presentar material que esclarecía la situación.

Fuente: Clarín

¿Se trató de una fake news? Si mantenemos la definición que se planteó anteriormente, la respuesta es si. Con la información recolectada se podría haber contado la verdad de lo que les sucedió a Kosteki y Santillan, sin embargo se optó por no hacerlo, tal como lo pidió Duhalde.

El ocultamiento de la información significó una gran crítica al diario por parte de la sociedad. El evitar mencionar datos cruciales, el mensaje se tergiversó y generó el desligamiento de los policías y del gobierno con el crimen, básicamente se desinformó.

Si bien el internet, gran fuente de información, no había alcanzado a la población del país, las formas de comunicarse eran distintas a las que mencionamos en la dictadura. Estaba permitida la libertad de expresión y los movimientos sociales estaban en pleno fervor, por lo que las denuncias no tardaron en llegar y los reclamos eran imposible de invisibilizar y ocultar.

Fake News y destronamientos políticos

Luego de la crisis del comienzo del siglo, los gobiernos populistas volvieron a estar a la cabeza de una gran cantidad de países latinoamericanos. En Argentina, Nestor Kirchner fue el encargado de restituir los derechos pre-existentes y de dar lugar a la reivindicación de nuevos, entre ellos el de la comunicación, la cual pasó de ser vista como mercancía a ser vista como un derecho. Con la Ley de Medios en 2009, bajo la presidencia de Cristina Fernandez de Kirchner, se les brindó a todes el derecho de recibir, crear y comunicar contenidos, a través de procesos de desconcentracion de medios y de ampliación de la diversidad comunicacional.

Del otro lado, a los grandes monopolios mediáticos no les simpatizó la idea de compartir un poco de su poder con los medios comunitarios que solían destrozar, por lo que para ellos fue un atentado contra la libertad de prensa, particularmente contra la suya. Su forma de responder fue a través de la descalificación del gobierno a través de todas las pantallas, páginas y voces que poseían y poseen, se armó una verdadera campaña política en contra de elles.

Algunas de las denuncias y reclamos fueron sobre la corrupción, la inseguridad, los presuntos proyectos de modificar la Constitución para que se le permitiera ser presidenta por tercera vez y, tal vez el más influyente, el pedido de justicia por la muerte inesperada del fiscal Alberto Nisman a principios del 2015 -año electoral-, persona con la que Cristina Fernandez de Kirchner se encontraba ligada por acusasiones del mismo.

Un caso similar se dio en el 2016 en Bolivia, antes de la fecha estipulada para la votación de un referéndum que permitiría a Evo Morales volver a postularse como presidente del estado Bolivariano. El periodista, Carlos Valverde, lo acusó de tener un hijo ilegítimo con Gabriela Zapata, gerenta comercial de la empresa China CAMC, acudiendo al tráfico de influencias que existiría a favor de la empresa. Mas tarde el hecho fue desmentido y la denuncia se cayó sola.

Conclusión

El uso de fake news fue una de las herramientas que permitió que gobiernos democráticos pierdan su legitimidad y por consecuencia, las elecciones. A comparación de las épocas dictatoriales y del comienzo de los 2000, el internet es una fuente de información rápida y accesible para la mayoría de la población. Las fake news ya no se toman como verosímiles por la falta de información y por la concentración de medios bajo la misma consigna, sino por la sobreinformación. Hay demasiados datos perdidos con diferentes sentidos por detrás como para verificar qué es verdad y qué no. Por esta razón muches recurren a fuentes tradicionales de información, como lo son los diarios de cabecera como Clarín, La Nación y Página 12, o tambien los canales televisivos con más rating como TN, El Trece y Telefe. Al fin y al cabo, los mismos imperios comunicacionales de siempre.

Podemos determinar que las fake news no son una novedad, sino que tienen un recorrido histórico en el que se adaptan a las nuevas estructuras comunicacionales y fuentes de información. Su existencia no es un error propio del internet ni del nuevo milenio, sino, como supimos defender anteriormente, de los monopolios mediáticos.

La nueva batalla es la cultural y se da a través de las ideas y símbolos, cuyos ejércitos lo conforman los grandes creadores de opinión. Las fake news constituyen las nuevas formas de establecer relaciones de poder en las que los súbditos debemos ser capaces de reconocerlas y re-trucarlas, de otra forma estaremos perdides en un clima de desinformación y falsedades.


Fuentes:
TAIANA E. (2013) Cap. 3. La geopolítica internacional de los apoyos económicos. En VERBITSKY, H. y BOHOSLAVSKY, J. P. Cuentas pendientes. Los cómplices económicos de la dictadura. Buenos Aires: Siglo XXI.
VILLAGRAN, F. AGÜERO, I. (2008)”El diario de Agustín” Documental. Ignacio Agüero & Asociados, Chile.
SAINTOUT, F. y BOLIS, J. (2016) “Malditos Medios: periodismo y dictadura”, Oficios Terrestres, Nº34.
RINESI, Eduardo (2013). “De la democracia a la democratización: notas para una agenda de discusión filosófico-política sobre los cambios en la Argentina actual. A tres décadas de 1983”. Revista Debates y Combates, Nº 5, Año 3. Buenos Aires: Fundación Casa del Pueblo
https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Cronolog%C3%ADa_Caso_Zapata


Agustina Flores
Agustina Flores

Soy hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

“Cordobazo” anticuarentenoso

“Cordobazo” anticuarentenoso

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

Por Agustina Flores*

 

“Economía vs. Salud” es una dicotomía muy discutida en el último tiempo y que solo ha logrado enfrentar a sectores y ser usada como arma política. El pasado viernes, un grupo de comerciantes autoconvocados del Mercado Norte de la capital cordobesa, se manifestaron en frente del cabildo pidiendo la apertura de la economía. Otras ciudades como Mar del Plata, Salta, La Plata y Adrogué siguieron los mismos pasos y manifestaron su descontento con la “estricta” cuarentena que transitan.

Los manifestantes leyeron un comunicado en el que solicitaron abrir toda la economía y crear una mesa de trabajo con las autoridades. También exigieron diferir el pago de las tarifas de luz y gas, eximir a los comercios de impuestos provinciales y tasas municipales mientras dure la cuarentena y flexibilizar las condiciones de contratos de trabajo ante la imposibilidad del pago de salarios.

La situación comenzó hace semanas cuando se empezó a organizar una apertura de comercios con el lema “#NosFundimos”, que se concretó el 11 de mayo con la apertura de los mismos. Sin embargo, el Mercado Norte debió cerrar sus puertas el pasado sábado 16, a raíz de la detección de un caso positivo de coronavirus en un supermercado ubicado a una cuadra de distancia.

En redes hubo más acción que en las calles. El factor más llamativo es que se hizo alusión al Cordobazo, la resistencia del pueblo ante las medidas tomadas bajo la dictadura de Onganía. De acuerdo a discursos neoliberales, las medidas tomadas durante la pandemia son autoritarias y acusan al gobierno de suspender el Estado de derecho, al igual que de restringir libertades y derechos básicos.

 

 

Twitter, hábitat de trolls y generadores de fake news, fue el escenario de disputa: el hashtag “#Cordobazo” fue tendencia durante todo el día. Los personajes anti cuarentena se fortalecieron con las protestas y detrás de un usuario de Twitter comenzaron a generar controversia, tal vez más de la que en realidad querían.

Las fotos que acompañaban los tweets llamaban la atención con incendios y mucha aglomeración de gente. Luego se supo que no eran parte del “Cordobazo” del 22 de mayo, sino de protestas que habían tomado lugar días antes. En esa oportunidad, choferes del transporte urbano se habían movilizado reclamando el cobro de parte del salario de abril que aún le adeudan las empresas, y los municipales se manifestaron en contra del proyecto que recorta la jornada laboral y reduce los salarios.

Si bien es preocupante la situación por el cierre masivo de negocios, la discusión entre las dos grandes variantes solo genera la descontextualización y la tergiversación los hechos. No hace falta mirar muy lejos para darse cuenta que las medidas que priorizan la economía fracasan en países como Brasil, que recientemente se ha convertido en el segundo país con más infectados (siendo su ejemplo a seguir el que ocupa el primer lugar).

Situación epidemióloga en la provincia

El pasado martes 19, el Centro de Operaciones de Emergencia (COE), había decidido dar marcha atrás con la flexibilización hacia la fase tres por la detección de 55 casos positivos en tres días. Algunos de ellos estarían relacionados a un brote originado en el Mercado Norte -el cual los comerciantes exigen abrir en el “Cordobazo”- lo que causó el cierre de los negocios y el bloqueo de nueve manzanas en la zona desde el viernes 16. El primer contagiado habría sido un empleado, el resto familiares y clientes a raíz de este.

La efervescencia del rol de “juez” del barrio y del continuo control de lo que sucede en las calles, llevó a que vecinos amenazarán con prender fuego la casa de la familia contagiada, por lo que seguirán cumpliendo el aislamiento total durante los 14 días lejos de su hogar. La policía de la provincia se hará responsable de la custodia en la vivienda de la familia.

Luego de una semana de testeos y deliberación hoy se retomará nuevamente la fase cuatro. La razón es la disminución de los casos y el traslado del foco de contagio a otras zonas, los locatarios y empleados de los comercios dieron negativo y estarían en condiciones de volver a trabajar. Además del apriete de los comerciantes en las calles y redes, que por más que exigían una total apertura económica, se ven satisfechos con el veredicto.

Si bien existe un protocolo que cada negocio debe cumplir, la provincia -y el país- estará observando de cerca las consecuencias que pueden generarse. Un error y se puede igualar la cantidad de contagios con respecto al último brote, si los hechos comenzaron de la misma forma hay algo que no se está analizando por completo.

 

Fuente: La Nación

Sentidos comunes que pasean en el aire de televisores y radios hegemónicas no aparecieron de la nada, son incentivados por cierto sector opositor cuyo poder depende del mercado. Como lo es el caso del ex presidente Mauricio Macri y la ex Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quienes adhirieron a un comunicado de la Fundación Internacional para la Libertad (FIL) cuyo nombre ya es curiosamente acusador: “Que la pandemia no sea un pretexto para el autoritarismo”.

Argentina llegaría a 80 días de aislamiento social, preventivo y obligatorio con la extensión estipulada hasta junio, lo cual la convierte en el país con la cuarentena más larga del mundo. La grieta se intensificó generando descontentos en la oposición y los sectores amenos a ellos.

“No es verdad que si abrimos la cuarentena la economía se vuelve próspera”comentó el presidente Alberto Fernández en C5N. Caso que lo demuestra es el de la Ciudad de Buenos Aires donde se habilitó el 60% de los comercios, de los cuales abrió el 40%, y de ese 40% se vendió el 30% de lo que vendía: “No están los consumidores, abrir los comercios es una invitación a salir”.

La provincia, al ser una de las más pobladas, se encuentra en especial observación, aun más después de los brotes de decenas de personas infectadas. La evidencia de que la única “cura” es el aislamiento, es innegable; así que por lo menos hasta el 7 de junio, a nosotres nos toca quedarnos en casa, evitando el virus, y a los comercios abiertos, cuidarse para cuidarnos.

 


* Hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. 
Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

Referencias:

https://www.nuevarioja.com.ar/11597-cordoba-capital-otra-vez-prueba-la-fase-cuatro-de-la-cuarentena

https://www.lavoz.com.ar/politica/estamos-al-borde-de-quiebra-reclamo-de-comerciantes-de-cordoba

https://www.infobae.com/politica/2020/05/26/alberto-fernandez-no-es-verdad-que-si-abrimos-la-cuarentena-la-economia-se-vuelve-prospera/

 

Peronismo Intergaláctico

Peronismo Intergaláctico

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

Por Nicolás De La Iglesia*

En estos días surgió una noticia donde la NASA emitió una alerta sobre un asteroide de 325 metros de diámetro que va a pasar cerca de la tierra. La comunidad científica, para calmar las aguas, bajar un cambio como quien dice, eligió como nombre para la roca espacial “El dios del caos”. No queda claro si les hace falta un community manager (teléfono para el ex jefe de gabinete Marquitos Peña) o efectivamente tienen uno y todavía se está cagando de risa de todes. Lo cierto es que de llegar “El dios del caos” a este rincón de la Vía Láctea, se puede dudar de cuánto más puede traer de algo que, por estos días, sobra. Es más, la tierra diría “¿Querés ver lo que es el caos? Pasá que te enseño ñery”.

A nivel global, la clase política está en terreno fanganoso y debe hacer uso de una herramienta que nunca utiliza: su capacidad de gestión. Un ejemplo de esto se puede ver en los estados europeos que venían arrastrando un estancamiento económico; sin ir más lejos, su principal economía (la alemana) preveía, después de más de una década de crecimiento sostenido, recesión para el 2020. A esto se le puede sumar la terrible falta de representatividad del sistema político, donde grandes partes de la población ni siquiera se toman el trabajo de ir a votar. Esto se puede anclar en un estado de debilitamiento de los estados nacionales después de décadas de financiarización del sistema global. Esta situación dejó a la clase política a merced de las grandes corporaciones (cuando no atienden en los dos kioscos al mismo tiempo).

¿Qué tendrá que ver la coyuntura europea con la argentina? Sirve para tomar un poco de noción acerca de la terrible crisis institucional que venía arrastrando gran parte del mundo. Además, sirve para dar cuenta de que volver a la normalidad, como dicen muchos, no sirve porque, como explica la ensayista y autora de “La doctrina del Shock”, Naomi Klein, “la normalidad es lo que estaba mal”. Es a partir de esta línea que se comienzan a dar ciertas discusiones sobre temas como el impuesto a las grandes riquezas, amén de la desesperación por conseguir la bishusha que hace a los engranajes estatales girar.

Esta semana se llevó adelante una sesión histórica tanto en la Cámara de Senadores como en la de Diputados, en donde se convino la virtualidad con la presencia de aquelles que podían acercarse a los recintos. Mención aparte para les diputades de Cambiemos que viajaron cientos de kilómetros (exponiendo no sólo su salud, sino también la de otres) para ir a sesionar y poder defender los intereses de los millonarios, oponiéndose fervientemente al impuesto a la riqueza, los despidos y un largo y tedioso etcétera. Trabajo noble el de defender a los desamparados de Nordelta.

Además de homologarse todos los DNUs que tiro @alferdez en plena cuarentena, en la sesión sobresalió el discurso de Máximo Kirchner. A lo largo de este, el diputado por el Frente de Todes planteó la desconcentración del “polo industrial”, el cual se encuentra en su mayoría en una de las zonas más afectadas, como lo es el conurbano bonaerense. Al mismo tiempo remarcó la densidad poblacional de esta zona geográfica del país. Esta es una discusión más que interesante teniendo en cuenta las intenciones del ejecutivo nacional de descentralizar la actividad política del país. Hay, de hecho, un proyecto que plantea la instalación de capitales móviles en distintas ciudades de Argentina, a donde el Gobierno llevaría sus oficinas. Esta va a ser sin dudas una de las grandes discusiones a futuro, más teniendo en cuenta que si hay algo que sobra es extensión territorial y que además nunca está demás reafirmar la soberanía nacional.

En una entrevista radial, el hombre de la Shweppes de pomelo dijo que se sentía como los maestros ajedrecistas jugando varias partidas al mismo, haciendo referencia a la crisis laboral, la sanitaria y la económica. Respecto a la crisis laboral se prevé que cerca de la mitad de la población activa del mundo se quede sin trabajo (algo de eso se está viendo en EE.UU., con la peor crisis de desempleo desde el crack del 30’). En cuanto a la crisis sanitaria hay que destacar que en sólo unos meses se levantaron varios centros de atención y se finalizaron obras que venían de cuatro años de abandono. Sin embargo es necesario proyectar una inversión y una reconversión del sistema de salud pública, que es una de las grandes cuentas pendientes del sistema político argentino. Por último, la crisis económica es uno de los grandes desafíos a futuro, no solo en referencia a la negociación que lleva adelante Martín Guzmán con los acreedores (que cuenta con un gran apoyo nacional y de figuras internacionales como la directora del FMI Kristalina Georgieva), sino también al futuro sombrío para la economía mundial en los próximos años.

En este sentido, no hay que dejar pasar la homologación de una rebaja salarial de hasta el 25% para trabajadores suspendidos. La medida surgió de negociaciones entre las cúpulas de la Unión Industrial Argentina (UIA) la Confederación General del Trabajo (CGT), y el Estado nacional, que obró como mediador. Según el Gobierno, la iniciativa tuvo lugar para evitar una ola de despidos. Además, la homologación fue acompañada de una serie de requisitos que los industriales deberán cumplir, como la exención de adultos mayores, trabajadores de grupos de riesgo, embarazadas o personal dedicado a tareas bajo el esquema del teletrabajo.

¿Qué tenemos por delante? Un panorama que lejos de aclarar, está oscureciendo cada vez más. A todos estos factores con lo que tiene que gestionar el Gobierno nacional se encuentra también el periodismo de “guerra”: no hay que olvidarse de quienes están detrás de las fake news que intentan desgastar constantemente a un Gobierno que lo único que quiere es no tener que cavar fosas comunes como en Brasil. El gobierno de @alferdez debe ser lo suficientemente astuto como para negociar con el empresariado argentino y poder esquivar las constantes operaciones que pasaron y que vendrán.


*Periodista, columnista sobre Europa del programa Marcha de Gigantes (Radio UNLP - AM 1390) responsable de la sección de Política Nacional de Revista Trinchera y colaborador de Agencia Timón.
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