Milagro Sala, una vez más, rehén de Morales

Milagro Sala, una vez más, rehén de Morales

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El Tribunal Oral Federal de Jujuy desempolvó una causa iniciada por “tirar huevos y repudiar” la visita del entonces senador Gerardo Morales -que se encontraba en silencio desde 2018- y este jueves condenó a Milagro Sala a tres años y medio de prisión. Plot twist: Milagro no se encontraba en Jujuy cuando sucedió la protesta.

Una vez que Morales dejó de ser senador y ascendió al cargo de gobernador, las causas tomaron peso y comenzaron a perseguir a la dirigente de la organización Tupac Amaru. Milagro Sala fue detenida el 16 de enero del 2016 y en diciembre del mismo año, el Tribunal Oral Federal de Jujuy la condenó por supuestamente haber instigado la protesta contra Morales en 2009.

Milagro no estuvo presente en el escrache, sin embargo, se utilizó como fuente de la causa el testimonio de René Orlando Orellano, quien declaró que la organización de la movilización había tenido lugar dos días antes en la vivienda de la dirigente. ¿Quién es René Orlando Orellano? Era empleado de la gobernación de Morales.

En la causa, que llegó a Casación en 2017, el fiscal Javier De Luca apoyó la absolución de Milagro mientras que Gustavo Hornos, Mariano Borinsky y Juan Carlos Gemignani -integrantes de la Sala IV- confirmaron la sentencia en contra de ella. Además, ordenaron al tribunal de Jujuy agregar a la sentencia por el delito de amenazas, del cual Milagro fue absuelta. La causa fue a la Corte Suprema en 2018 que rechazó el recurso por no ser sentencia definitiva y dejó firme la condena a tres años de prisión en suspenso en ocasión de un escrache contra Gerardo Morales.

Este junio es mes de elecciones en Jujuy y Morales despertó una causa contra Milagro como herramienta política. Esto no fue sorpresa para ella, según declaró en el Destape Radio “en época de elecciones siempre me abren una causa o me condenan en otra”, y añadió momentos después que “hoy Gerardo Morales lo único que tiene para mostrar es que me tiene presa”.

Es así que el Tribunal Oral Federal de Jujuy retomó la causa de la protesta en 2009 y este 4 de junio rechazó la prescripción de la causa perdida por la defensa de Milagro. El 8 de junio se convocó a una audiencia a realizarse dos días después, Milagro tuvo menos de una semana para comparecer ante el Tribunal y no tuvo tiempo de reunirse con sus abogados ya que ni siquiera estaban en la provincia, solo se vieron por Zoom. El 17 de junio, el Tribunal dio su veredicto y agregó el delito de amenaza a la causa previa, por lo que agravó la condena a tres años y medio de prisión. También fueron condenades María Graciela López (tres años y seis meses) y Ramón Salvatierra (dos años y un mes en suspenso). Marcos Aldazabal, abogado de Milagro Sala explicó a Página 12 que “el fallo es completamente ilegal en tanto se dicta en una causa que está prescripta”.

Además de determinar la causa y su sentencia de forma veloz impidiendo una estrategia rápida por parte de Milagro y su defensa, la causa presenta una serie de irregularidades que permiten poner en discusión el trasfondo de su origen y de sus tiempos.

Primero, el origen de la causa no tiene razón de ser: como los dichos del abogado Aldazabal aclararon, dictar una sentencia en una causa que ya estaba prescripta es ilegal, el procedimiento no tiene fundamento jurídico.

Segundo, la irregularidad con respecto a jueces de la causa. Dos de elles habían fallado por la absolución de los imputados por el delito de amenaza en 2016 y ahora votaron en contra de la dirigente social. Por otro lado, la tercera jueza, Marta Liliana Snopek, es prima de la pareja de Morales, y ni siquiera participó del debate del 2016, lo cual la llevó a pedir por un nuevo juicio, sin embargo, luego votó a favor de la nueva sentencia.

Tercero, a otro de los imputados, Ramón Salvatierra, no lo dejaron elegir a su propio abogado y se le impuso un defensor oficial. El 30 de junio se realizará una audiencia luego de que la Corte Suprema le haya dado la razón, su resolución podría declarar al juicio como nulo.

La defensa de Milagro pidió la intervención del Máximo Tribunal Penal y denunció a los tres jueces del Tribunal Oral Federal de Jujuy ante el Consejo de la Magistratura. También existe una medida dictada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos que está vigente y obliga a todas las autoridades del Estado a proteger la vida y la integridad física de Milagro, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Amnistía Internacional y Andhes solicitaron que se mantengan esas medidas previsionales.

Las irregularidades de la causa presentan un panorama fraudulento dentro de la Justicia. Del otro lado, en las elecciones entrantes, Morales se presentará con la condena a Milagro como un trofeo más de su gestión exitosa en contra de dirigentes sociales que atentan contra los intereses de un sector minoritario de la sociedad. De hecho, uno de los argumentos utilizados en el juicio fue la defensa de que “un Senador elegido por voto popular, representa a uno de los poderes del Estado, Poderes que se erigen en pilares de la forma republicana de gobierno y, como tal es merecedor del respeto y la custodia de la institución democrática que representa”. Morales representa a la institución democrática, Milagro representa al pueblo saqueado y hambriento que también merece respeto y una vida digna, lo cual, organizaciones como la Tupac Amaru, tienen como horizonte político.

A una semana de las elecciones en la provincia de Jujuy, Gerardo Morales sigue utilizando a la dirigente como herramienta política. A Milagro Sala se la persigue por ser mujer, por ser coya, por ser negra y por defender a los pueblos olvidados de la patria y ya a 5 años y 154 días sigue siendo presa política.


Agustina Flores
Agustina Flores

Hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

Cambiemos y la sana costumbre de ir más allá de los limites

Cambiemos y la sana costumbre de ir más allá de los limites

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Por Nicolás De La Iglesia*

Un golpe de estado, según el sentido común establecido sobre finales del SXX, es algo por lo menos, repudiable. Sin embargo, lo que pasó en Bolivia dejó en descubierto que ese sentido no formaba parte de un sentido instituido, sino que había una contra hegemonía que operaba en busca de una resignificación. Y eso fue lo que sucedió, no sólo desde medios oficialistas sino también desde el gobierno nacional se desconoció y se evito hablar de “golpe de estado”, así, con todas las letras. En su lugar, buscaron eufemismos de todo tipo y color. La Nación, que históricamente dio cátedra de cómo desconocer golpes, tituló: “La democracia pierde atractivo en la región”.

Cuando promediaba el final del SXX, también terminaba, o por lo menos así lo consideraban distintos referentes de las Ciencias Sociales, la idea de que la violencia podía ser un medio para alcanzar objetivos en la política tradicional. Con la caída de la Unión Soviética y el derrumbe del muro de Berlín comenzaron a gestarse nuevos paradigmas dentro de la política tradicional. Los valores democráticos, después de las dictaduras más sangrientas, parecían tener cada vez más importancia.

Lo cierto es que hay ciertas discusiones que se pensaban zanjadas, sobre todo en este país, como que no se puede aceptar el derribo de un gobierno democráticamente electo a través de un golpe de estado. La actitud de la derecha Argentina, de ciertos funcionarios y medios oficialistas deja en claro que la discusión NO está terminada. Peor aún si se pone en cuestión la fuerte carga simbólica que conllevan estas acciones.

Ivanka, Gerardo y compañía

Si bien el gobernador de Jujuy Gerardo Morales negó contundentemente que haya existido colaboración de su gestión con los golpistas bolivianos, hay ciertos hechos que hacen dudar sobre la veracidad de sus declaraciones.

En primer lugar -y teniendo en cuenta que en política las coincidencias no existen- la visita a Jujuy de la hija y asesora del presidente de Estados Unidos, Ivanka Trump, a poco menos de un mes de que estalle el conflicto en Bolivia. Alguien podría suponer que nada tiene que ver una cosa con la otra y acusar de “conspiranoicos” a quienes esgrimen que el gobernador miente.

Una de las virtudes de la derecha Argentina -mejor dicho, de la derecha mundial- es endilgar constantemente a la izquierda cosas que sólo ellos ponen en práctica. Para poner un ejemplo a mitad de año Donald Trump decidió sacar a EEUU del pacto de proliferación nuclear con la excusa de que Rusia no lo estaba cumpliendo. Pero, pero, pero, tiempo después se descubrió a través de imágenes satelitales que los yanquis hacía rato que no cumplían con el tratado. Ese modus operandi también se emplea en Nuestra América.

Volviendo a la visita de la hija del twittero más picante de la web, lo llamativo es que varios analistas como Stella Calloni advirtieron cómo después del Plan Cóndor -a mediados de los años 80’- la secretaría de estado de los Estados Unidos optó por estrategias menos llamativas para intervenir en los asuntos de los estados del cono sur. Estas, tienen a las ONG’s como pantalla y uno de los ejemplos que señala la periodista  y que se fue desperdigando a cada país de la región es la NED (National Endowmentfor Democracy). Reconocida como la “cara social de la CIA”, según varios documentos fue participe activa del intento de golpe contra Evo Morales en el año 2008, hecho que le valió la expulsión del país vecino.

¿A qué viene este relato de la función injerencista de las ONG’s? Ivanka es representante de Women’s Global Development and Prosperity, W-GDP (Iniciativa para el Desarrollo y la Prosperidad Global de las Mujeres) una propuesta ideada desde la Casa Blanca. Ahora bien, vale aclarar que en el marco de su visita a Jujuy también estuvo acompañada por una delegación bastante nutrida. Entre ellos estaban: el Subsecretario de Estado, John Sullivan; el Jefe Interino de la Corporación Privada de Inversiones en el Extranjero (OPIC), David Bohigian; la Subsecretaria Interina de Asuntos del Hemisferio Occidental, Julie Chung y el Administrador de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Mark Green.

Sobre este último personaje y la agencia que representa, hay que decir que esa misma organización estuvo detrás de distintos movimientos en contra del presidente depuesto Evo Morales. Se descubrió que en 2011 -y está documentado- financiaron levantamientos de sectores indígenas que luchaban por el medio ambiente. Los líderes de estos grupos de choque llamaban hasta doce ¡Sí, doce! veces por día a la embajada norteamericana.

Volvamos a Jujuy, el despliegue incluyó más de dos mil de agentes de inteligencia (2.500 para ser precisos) y tal vez lo más importante el desembolso de U$S 400 millones de ¿ayuda? para el gobernador. Lo llamativo es que al día siguiente un avión partió desde Jujuy hasta Santa Cruz de la Cierra con ¿ayuda? para socavar los incendios en la amazonia boliviana. Como se dijo antes, las coincidencias en la política no existen y acá son muchas.

Por último, hay que destacar que el gobierno nacional supo, por lo menos 48 hs antes, de que se produjera el golpe ya que Luis Fernando Camacho pidió un salvoconducto al cónsul argentino en Santa Cruz, Roberto Dupuy, en caso de que sus planes salieran mal. El funcionario le dijo que eso debía ser tratado con la embajada en La Paz e intento hacerlo desistir en sus planes. Muy distinto fue el accionar de Cambiemos que evito por todos los medios posibles llamar al golpe por su nombre. Este hecho trajo nuevos conflictos dentro de la coalición ya que los radicales, que lo último que les quedaba era no reconocer un golpe de estado, le hicieron honor a la “tradición” democrática.

No hay que pasar por alto la reacción de Cambiemos y de los medios hegemónicos, porque estamos ante la reivindicación del golpe de estado como herramienta. La carga simbólica que tiene este hecho es alarmante no sólo porque de justificar un golpe no se vuelve, sino porque no condenarlo los hace cómplices. Sus manos también estarán manchadas con la sangre de los y las bolivianas que murieron en manos de una nueva dictadura que desgarra, una vez más, las venas de Nuestra América.


*Periodista, columnista sobre Europa del programa Marcha de Gigantes (Radio UNLP - AM 1390) responsable de la sección de Política Nacional de Revista Trinchera y colaborador de Agencia Timón.
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