Tras reglamentar la entrega de tierras por omisión, el gobierno de Javier Milei creó este martes la Unidad de Grandes Proyectos Urbanos en el ámbito de la Agencia de Administración del Estado. Entre ellos están varios predios de las Fuerzas Armadas, como el Campo Hípico militar y el Regimiento de Patricios. Buscan recaudar unos mil millones de dólares.
El gobierno libertario encabezado por Javier Milei sigue con su plan de desguace del Estado y ahora se prepara para vender, por decreto, más de 200 terrenos y edificios públicos. Se pone en discusión el objetivo de esta decisión y si su destino es fomentar la especulación inmobiliaria de los grandes grupos económicos. Con ese motivo, este martes dio el puntapié inicial al crear la Unidad de Grandes Proyectos Urbanos en el seno de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE).
Esta medida fue confirmada en la Resolución 107/2024 publicada hoy en el Boletín Oficial que lleva la firma del Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación, Guillermo Francos. Allí se decretó la creación de este nuevo organismo descentralizado, de carácter temporario, que tendrá por objeto “articular, junto con las jurisdicciones de la Administración Pública Nacional correspondientes, la planificación, desarrollo y seguimiento de los programas especiales y grandes proyectos urbanos definidos como estratégicos por parte de la AABE”, sostiene el escrito.
En cuanto a la Unidad de Grandes Proyectos Urbanos, tendrá funciones específicas como asesorar en la “elaboración de contratos, convenios y todo tipo de acuerdos o instrumentos necesarios para la organización y ejecución de Grandes Proyectos Urbanos”. Así como “coordinar el análisis de la normativa urbanística, ambiental y administrativa que posibilite el desarrollo de los Grandes Proyectos Urbanos”, agrega el decreto. Lo cual facilitaría los negocios inmobiliarios.
Además, la medida plantea que deberá “articular y dirigir, en coordinación con las jurisdicciones de la Administración Pública Nacional correspondientes según el ámbito de sus respectivas competencias, las acciones conducentes a la organización de la urbanización, la determinación de usos del suelo y la regularización dominial del gran proyecto urbano Barrio Padre Mugica” en el barrio porteño de Retiro.
Así como también “desarrollar, implementar y ejecutar el Máster Plan de desarrollo urbano integral con impacto positivo en la edificación, energías renovables, espacios verdes y actividades económicas en el inmueble denominado ‘Ex Mercado de Hacienda’, como gran proyecto urbano”, en Mataderos, plantea la normativa.
De esta manera, el oficialismo alienta la incorporación de financiamiento privado para “el desarrollo y expansión del inmueble denominado ‘Ex Mercado de Hacienda'”. Asimismo, en el artículo 4 de la norma se advierte que la Unidad de Grandes Proyectos Urbanos quedará disuelta a los dos años de su creación.
El desguace del Estado
Para una mejor comprensión, cabe recordar que Javier Milei reglamentó el “silencio positivo” para trámites administrativos, un punto de la Ley Bases que abre las puertas al remate de tierras públicas. De esta forma, desde la Rosada se tratará de empujar esto con una serie de decretos para poner a la venta varios inmuebles del Estado.
Desde la sanción de la Ley Bases a fines de junio, el Gobierno Nacional lleva adelante la reglamentación de los distintos capítulos del proyecto. En tal contexto, a partir del 1 de noviembre comenzará a regir el “silencio administrativo”, un mecanismo por el que se autorizan automáticamente trámites administrativos ante la falta de respuesta del Estado.
Esta normativa afecta, entre otros, a las tierras estatales ya que podrían pasar a manos de privados gracias a la inacción del Gobierno nacional. De esta manera, varios negocios inmobiliarios ya no podrán discutirse y quedarán habilitados.
Con este avance, el objetivo que buscan los libertarios parece ser el de hacer caja con la venta de algunos de los terrenos públicos más codiciados por el mercado inmobiliario, y así recaudar unos mil millones de dólares, y para eso está dispuesto a dilapidar incluso varios predios en poder de las Fuerzas Armadas, como el Campo Hípico militar y el Regimiento de Patricios.
Así lo advirtió ayer Página12, que señaló que “lo hará sin pasar por el Congreso, tal como lo hiciera en su momento Mauricio Macri”. Según dicho medio, en el seno del Ejército “hay malestar” y una preocupación creciente ante la posibilidad de que tengan que desprenderse, forzosamente, del Campo Hípico militar y del Regimiento de Patricios, entre muchos otros terrenos estratégicos codiciados por el mercado inmobiliario.
Entonces, todo parece indicar que los remates se harían sin pasar por el Congreso, que viene de impartirle tres derrotas legislativas a Javier Milei en los últimos días, mediante una serie de decretos o un mega DNU, tal como lo hizo en su momento Macri, quien casualmente ostenta el récord de ser el presidente con más terrenos estatales enajenados. Entre 2016 y 2019, habilitó 71 procesos de venta.
Para ello el máximo mandatario puso a trabajar en la medida al ex funcionario porteño de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta, Nicolas Pakgojz, al que nombró en diciembre al frente de la AABE. El cual, en el mundillo del “Real Estate” vinculan como lugarteniente de los intereses del empresario y dueño del Hotel Libertador, Eduardo Elzstain, lugar en el Milei vivió “gratis” durante el tramo final de la campaña e incluso durante el primer mes de su mandato.
Cabe destacar que en julio pasado el DNU 636/2024 de Milei habilitó a Pakgojz “plenas facultades para disponer, tramitar, aprobar y perfeccionar la venta de inmuebles del dominio privado del Estado Nacional”. Esa misma norma otorgó al presidente vender los terrenos a su sola firma y agilizó los procesos de la AABE (que desde diciembre funciona bajo la órbita de la jefatura de Gabinete) para llevar a cabo el desguace.
En ese camino todos los ministerios y dependencias estatales recibieron en los últimos meses el pedido de la AABE de que se le informe sobre la cantidad total de inmuebles y terrenos que tienen a disposición, no sólo aquellos que están abandonados o en malas condiciones.
Ese requerimiento lo recibieron también las Fuerzas Armadas, que gestionan las tierras más onerosas. En medio de una cruda interna con la vicepresidenta Victoria Villarruel y el sector pro-militar del oficialismo, Milei apunta a los terrenos que el Ejército tiene, que son más de 1.500 inmuebles, la Armada unos 3.500 y que entre la Prefectura y Gendarmería suman otros 3 mil.
Además, en Mendoza se encuentra el Campo de los Andes y sus 10 mil hectáreas. En Córdoba está la Fábrica Militar Río Tercero, una de las sedes de Fabricaciones Militares. Previamente el ministro Luis Petri había visitado la zona con representantes del Departamento de Defensa de Estados Unidos.
La visita causó alarma entre trabajadores y derivó en un pedido de informes de la diputada Agustina Propato (Unión por la Patria) exigiendo “información precisa y detallada sobre todas las empresas privadas y/o extranjeras que han visitado la Empresa Estatal Fabricaciones Militares”.
Finalmente, si bien las Fuerzas Armadas se llevarían la peor parte en este gran remate que prepara Milei, también están en la mira de los desarrolladores inmobiliarios buena parte de los terrenos ferroviarios y los que están en poder de las universidades nacionales, de algunos organismos como el INTI y hasta el predio de Tecnópolis.
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