El equipo económico de Sergio Massa resolvió destinar 75 mil millones de lo recaudado para ejercer un bono a los sectores más carenciados.
A las 15 horas del pasado viernes, se dio por finalizada la medida conocida como “Dólar Soja”, que le entregó durante el mes de septiembre un tipo de cambio preferencial a los productores de soja, a razón de 200 pesos por dólar.
La medida permitió liquidar la cosecha acopiada por los productores, a la espera de la mejor oportunidad del mercado, lo cual desregularizó el ingreso de dólares al Estado durante los meses de junio, julio y agosto, y provocó una fuerte corrida cambiaria.
La medida aplicada por el Ministro de Economía, Sergio Massa, si bien no era la esperada por quienes pretenden una distribución de las riquezas en favor de les más carenciados, tuvo un impacto inmediato, y logró destrabar un eslabón clave para que la rueda económica siga en función.
A través de lo recaudado, el Banco Central de la República Argentina (BCRA), logró comprar la suma de U$S 3.600 millones, lo cual oxigenó las finanzas que se resquebrajaron luego de los tormentosos meses de invierno, y logró enderezar las metas hacia el segundo cumplimiento con los vencimientos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
En el mismo sentido, la buena nueva para les más necesitades es que, el equipo económico de Sergio Massa, realizó una reunión para hacer un balance sobre la efectividad de la medida, y con los números sobre la mesa, discutir las futuras políticas a anunciar.
Lo concluido por la cartera económica en torno al bono previsto (sobre el que faltan ultimar detalles), es que se destinará un monto de 75 mil millones de pesos para su ejecución, y se estima que el monto por persona podría alcanzar los 40 mil pesos, dividido en dos cuotas mensuales, si es que se prioriza a las personas en situación de indigencia como propuso la senadora Juliana DI Tullio.
Si bien la medida estaba planificada desde el lanzamiento del Dólar Soja, la vicepresidenta, Cristina Fernández De Kirchner, expresó a través de sus redes su preocupación por el dato arrojado por el INDEC, sobre el aumento de la indigencia durante el primer trimestre de 2022 (8,8%), lo cual representa un aumento del 0,6% respecto a los últimos datos de 2021.
En ese sentido, la ex presidenta recalcó la urgencia de una medida para estos sectores. Cabe destacar que en el mismo contexto, el INDEC reveló que la pobreza bajó en comparativa del mismo período (37% a fin de 2021 – 36,6% durante el primer trimestre de 2022), por lo que, no sería descabellado que el total del monto se destine a los sectores de indigencia.
En ese sentido, Fernández de Kirchner pidió una respuesta desde la cartera económica: “El ministerio de Economía ha trabajado duro en todas las áreas de su competencia, pero es necesaria una política de intervención más precisa y efectiva en el sector y, al mismo tiempo, diseñar un instrumento que refuerce la seguridad alimentaria en materia de indigencia”.
Restará esperar las definiciones en torno a la ejecución del bono y a qué sectores abarcará.