La sesión especial convocada por el oficialismo que intentaba aprobar cinco proyectos de ley, terminó suspendida. El macrismo se opuso a las iniciativas que proponían la creación de universidades en diferentes puntos del país con ofertas vinculadas a la producción y al mundo del trabajo.
Luego de dar dictamen en la comisión de Educación la Cámara de Diputados debatía la creación de nuevas universidades nacionales con ofertas vinculadas a la producción y al mundo del trabajo. Sin embargo, la sesión especial convocada por el oficialismo terminó en un escándalo. El macrismo se opuso de manera escandalosa a debatir las iniciativas en el recinto el lo que sin dudas pasará a la historia por los bochornosos hechos.
El problema en el recinto se desató luego de que la presidencia de la Cámara, Cecilia Moreau, anunciara la decisión de votar el temario de inmediato y a mano alzada. Con ello se postergaba la inclusión de cuestiones de privilegio, herramienta principal de la oposición para cumplir con el objetivo de postergar indefinidamente la sesión. En este sentido, prácticamente todes les diputades de Juntos por el Cambio (JxC) pretendían anotarse para expresar sus posturas y así dilatar in eternum el avance de esa sesión.
Cabe destacar que el la comisión de Educación, el oficialismo había logrado dictamen de mayoría con el respaldo de Evolución Radical (con disidencias parciales) y de otros bloques minoritarios. Sin embargo, el PRO y la Coalición Cívica cuestionaron fuertemente los proyectos y emitieron un dictamen de minoría, en tanto la UCR se encolumnó detrás de esa postura, salvo por su acompañamiento a la de creación de la Universidad de Río Tercero.
Los proyectos plantean la creación de las universidades de Río Tercero (Córdoba); la Juan Laurentino Ortiz (Paraná, Entre Ríos); la de Ezeiza; la de Madres de Plaza de Mayo; y la de la Cuenca del Salado (Cañuelas, Buenos Aires). En paralelo, se establecía la creación de las universidades del Delta, de Pilar y de Saladillo, todas avaladas en comisión hace varias semanas. Está previsto que el tema se trate antes de fin de año.
La situación en el recinto:
Luego de posponerse el inicio de la sección en tres oportunidades, la miembra informante del oficialismo y presidenta de la Comisión, Blanca Osuna, señaló a viva: “Tal cual plantea el reglamento, vamos a dar tratamiento de la creación de universidades nacionales para la República Argentina. Estamos haciendo una labor cuya atribución nos otorga la Constitución nacional“.
Por su parte, Cecilia Moreau trató infructuosamente durante el tiempo que duró la sesión de llamar a silencio a la oposición. ¿Qué tomaron? preguntó la presidenta del cuerpo ante los gritos desbocados de les diputades opositores. Desde el oficialismo se escuchaba el cántico de “violentos, violentos“, mientras Moreau hacía malabares para encarrilar la sesión. “No me trate de tonta, Wolff, no me subestime“, lanzó la presidenta de la Cámara, al tiempo que le pedía calma a Fernando Iglesias. “Recuperemos la convivencia democrática, el diálogo… Todos van a tener la palabra“, agregó.
Mientras se hacían enormes esfuerzos para hacerse escuchar entre el griterío opositor la diputada Osuna remarcó: “Entendemos que la creación de una universidad es un hecho fundamentalmente de decisión política e impacta en el derecho humano a acceder a la educación, cuya garantía debe acompañar el Estado nacional“.
En ese instante, diputados de JxC como Mario Negri, Cristian Ritondo, Maximiliano Ferraro, Fernando Iglesias y Waldo Wolf comenzaron a gritar y agredir verbalmente a Moreau pidiendo que se levante el debate porque -según ellos- se había violado el reglamento. Incluso Iglesias, Ferraro y Wolf se acercaron al estrado de la presidenta de la Cámara en forma amenazante y a los gritos, mientras la diputada Osuna explicaba los proyectos que se pretendían aprobar. Y si bien Moreau intentó seguir con la sesión, tuvo que levantarla después de poco más de una hora, pese a los intentos del oficialismo por continuarla.
Los intendentes radicales de Saladillo, José Luis Salomón, y de Río Tercero, Marcos Ferrer, afirmaron que sintieron “tristeza” y “decepción” ante el fracaso de la sesión en Diputados en la que se buscaba aprobar la creación de universidades para esas ciudades, al tiempo que advirtieron que “la educación tiene que estar por encima de la discusión política y de la grieta“.
Al respecto, el gobernador de la provincia de Buenos Aires (PBA), Axel Kicillof, enfatizó que “lo que frenaron no fue una sesión parlamentaria, lo que frenaron es el derecho a la formación universitaria de miles de bonaerenses“, al tiempo que cuestionó la actitud de Juntos al señalar que “cuando fueron gobierno protestaban porque sobraban Universidades en el conurbano. Ahora se oponen a que, por ejemplo, en la PBA existan Universidades Nacionales en Pilar, Ezeiza, el Delta y Salliqueló“.
¿De qué tratan los proyectos? ¿Por qué es importante?
El país tiene una universidad cada 330 mil habitantes, México cuenta con una cada 43 mil personas y Brasil una cada 85 mil. En Argentina, por ejemplo, la PBA tiene una cada 550 mil, con lo cual hay un faltante de universidades para los 18 millones de personas que habitan el territorio bonaerense. Este hecho, las vuelve de vital importancia ante la demanda de un mercado laboral que requiere cada vez más híper-especialización. Por ello es importante mejorar las condiciones de acceso a universidades con carreras con carreras específicas y conocimientos específicos que apuntan a zanjar esa demanda.
Con respecto al proyecto de creación de la Universidad de la Cuenca del Río Salado, éste fue presentado por la diputada nacional mandato cumplido y actual ministra de Ambiente bonaerense Daniela Vilar (FdT), y prevé que su sede central esté en la ciudad de Cañuelas, con subsedes en localidades de esa región hídrica.
Asimismo, la iniciativa que le da el carácter de “nacional” al existente Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos Madres de Plaza de Mayo, surge de un expediente presentado hace más de dos años por el diputado nacional y líder de la Central de Trabajadores Argentinos, Hugo Yaski (FdT). Sus contenidos están en línea con la investigación, la defensa, la protección y la promoción para el ejercicio efectivo de los DDHH, conforme se desprenden de la Constitución Nacional, de los tratados internacionales en la materia y de demás leyes nacionales.
El proyecto que establece la creación de la Universidad Nacional de Ezeiza es de la exdiputada y actual ministra de Desarrollo Social de la Nación, Victoria Tolosa Paz (FdT) y prevé carreras y trabajos de extensión e investigación vinculadas al desarrollo aeroportuario, al tecnológico y humano, y de las organizaciones.
Blanca Osuna (FdT) es quien propuso la creación de la Universidad Nacional Juan Ortiz en Paraná y se constituiría sobre la base de la actual Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Entre Ríos. Al respecto la diputada recalcó que “de las cuatro facultades que tiene Uader (Humanidades, Ciencias de la gestión, Ciencias de la vida y la salud y Ciencia y Tecnología) sólo una, Humanidades, concentra el 44% de la matrícula de 29.322 alumnos que tiene la universidad, 12.953 se concentran en esa unidad académica“.
Por último, el proyecto que establece la creación de la Universidad Nacional de Río Tercero, se basa en dos iniciativas de diferente signo político: la de Gabriela Estévez (FdT) y la de Gabriela Brower de Koning (Evolución Radical). En este sentido, las autoras coinciden en que el objetivo de su creación será el de aportar a la reparación histórica de sus habitantes como consecuencia del atentado de la fábrica militar de Río Tercero en 1995.
Con respecto a la importancia de crear nuevas universidades, Estévez señaló que “generan nuevas oportunidades, arraigo y la posibilidad de que los jóvenes se queden a estudiar en sus localidades“. Asimismo, sostuvo que se trata de pensar “qué modelo de país queremos llevar adelante y para eso debemos generar recursos humanos que promuevan el desarrollo regional y genere políticas de arraigo“.
En relación a la mirada federal que tienen los proyectos, Estévez manifestó que “el interior está muy despoblado, así que este proyecto tiene una raíz económica muy importante que está vinculado a cómo se puede generar el desarrollo en el interior más profundo“. Además, subrayó que “muchos jóvenes para poder estudiar deben trasladarse a vivir a otras ciudades y no todas las familias pueden afrontar ese gasto“.
Por último, cuestionó la inversión que realizó el gobierno de Macri en materia educativa: “¿Qué hicieron con los U$D 45 mil millones que tomaron del fondo? Ellos creen que la educación superior es un privilegio para pocos. Nosotros entendemos que si queremos un país desarrollado debemos brindar las oportunidades“.