¿Uruguay tiene futuro? Vivir y morir en la esquina sur

¿Uruguay tiene futuro? Vivir y morir en la esquina sur

TIEMPO DE LECTURA: 7 min.

Desde poltronas y pupitres con pantallas led y diapositivas, se habla del Uruguay del futuro, de un tren al que hay que subirse sin miramientos. Integrarnos al mundo sin medir los costos y nos proponen actualizarnos a un mundo que cambió y que todavía no se sabe a dónde va. Ante los marketineros de la picadora mundial que hablan del Uruguay del futuro, pero ¿cuál es el futuro de Uruguay?

Varias problemáticas sociales, económicas, políticas y culturales se han instalado en Uruguay desde hace décadas. Una de ellas es el costo de vida. Vivir en Uruguay es caro. Un estudio del Instituto Cuesta Duarte y la Organización Internacional del Trabajo sobre las consecuencias de la pandemia arrojó como resultado que el 69% de los jóvenes tiene salarios sumergidos de menos de 25.000 pesos líquidos (unos 500 dólares) por 40 horas semanales. Más de 650.000 ocupados no llegaron a cobrar ese mínimo, representando un 42% del total”. (1)

Cantidad de uruguayos que piensan en emigrar es mayor que en 2002

“El impacto de la crisis se concentró con mayor intensidad entre los trabajadores más jóvenes” según el informe, y el momento más crítico se vivió en 2020, cuando se perdieron hasta 90.000 puestos de trabajo y rozar los 200.000 compatriotas en seguro de paro. Mujeres y jóvenes son los que cuentan con peores indicadores. Para los menores de 25 años la tasa de empleo pasó de 31% en 2019 a 25% en 2020 y se mantuvo en ese nivel durante buena parte del año.

Los costes mensuales estimados para una familia de cuatro personas alcanzan los: 133.788 pesos uruguayos. Los costes mensuales estimados para una persona sola: 56.182. El costo de vida en Uruguay es el tercero más caro de América Latina. En comparativa el costo de vida en Uruguay es más caro que en el 56% de países del mundo. La vida en Montevideo es un 64% más caro que en Buenos Aires y un 22% más caro que en Santiago de Chile (2)

“El análisis muestra que los jóvenes no sólo enfrentan desempleo mucho más alto y niveles de informalidad significativamente mayores, sino que son quienes perciben remuneraciones más bajas, un resultado en principio esperable por su posible menor formación y capacitación, pero en una magnitud exageradamente alta que evidencia la inserción excesivamente precaria de este colectivo en el mercado laboral”, concluye el informe.

Sube en Uruguay tasa de desempleo |

Un país caro que condena a los jóvenes con salarios sumergidos puede ser la punta de la madeja que explique varios tópicos acuciantes. Por ejemplo, la seguridad social. El oficialismo prevé una reforma donde se aumenta la edad jubilatoria. Esto no es nuevo, ya por entonces, el ex presidente José Mujica declaró que era necesario una reforma en el mismo sentido. Una temática que tiene carácter mundial y que las soluciones planteadas hasta el momento siempre van en detrimento de los y las trabajadoras. (3)(4)

Con salarios sumergidos, es difícil llegar a fin de mes y más aún tener hijos. Uruguay tiene tres millones de habitantes desde hace décadas. Su expresión demográfica es similar a la de los países europeos, de campana invertida, con una base magra de jóvenes y a medida que aumenta la edad se ensancha, teniendo así una población envejecida.

“Por los chiquitos que faltan…”

En 2020 se alcanzó el mínimo histórico de fecundidad. Se alcanzó un 1,4 hijos por mujer y la tendencia es a la baja. (5) De los pocos nacimientos pasamos a las muchas muertes. La Covid-19 (SARS COV2)  en 2020 se llevó 4.940 personas y destronó a las enfermedades del Sistema Circulatorio del puesto uno de causas de fallecimientos con 4429 en el mismo año. Le siguen los tumores (Neoplasias) con 4149.

A todo esto se suma una cifra que tampoco es alentadora: narcos jóvenes, más que narcos, niños y adolescentes vinculados a ese mundo del narcomenudeo, de poco monta,  mueren antes de los 35 años. (6) Los femicidios son una emergencia nacional. En este 2021 se contabilizan 12 solo en el primer semestre y cada año el número crece. (7)

Si el panorama resulta sombrío, hay que añadir que Uruguay tiene actualmente una tasa de suicidio de 20,6 cada 100.000 habitantes, una de las más elevadas de América junto con las que registran Cuba y las Guayanas. Este valor lo ubica por encima de Argentina, Chile, Colombia, Estados Unidos y Canadá.

La tasa general de suicidios en Europa es de 15,4 cada 100.000 habitantes, pero en las Américas ronda los 10 cada 100.000 (Chile tiene una tasa aproximada de 11,5 suicidios cada 100.000 habitantes, Argentina 9,6, Estados Unidos 15 y Canadá 7). La tasa de suicidios en Uruguay viene creciendo desde hace 20 años.

Récord de suicidios en Uruguay supera al de la crisis de 2002 – 18/07/2017 – EL PAÍS Uruguay

En el 2020 el país registraba dos suicidios por día y la mayor parte de estos los llevaban a cabo personas de la tercera edad (a partir de 65 años). Levemente se viene dando un crecimiento de la tasa de suicidios en los hombres de 35 a 50 años de edad, además de un leve incremento de esta tasa en la juventud (de los 19 a 24 años).

Pablo Hein, docente investigador de la Universidad de la República (Udelar), integrante del Grupo de Comprensión y Prevención de la Conducta Suicida en el Uruguay, habla de algunas posibles causas o condicionantes actuales de esta problemática del suicidio. En este sentido indicó que existen dos procesos que están avanzando desde hace unos años a nivel no sólo de Uruguay sino de las sociedades en general, que implican algunos cambios culturales como la pérdida de centralidad del Estado.

Uno de ellos es la falta en la actualidad de algunos referentes, en especial instituciones que eran fundamentales para darle cohesión al individuo (sindicatos, la familia en sentido amplio, clubes deportivos), donde las personas se sentían cómodas, generaban vínculos en términos afectivos, culturales y emocionales, protecciones y reconocimiento. (8)

Según Hein, un cuarto elemento que puede ser otra de las causas de la alta tasa de suicidio que se registra en Uruguay es la gran siquiatrización de la sociedad uruguaya. Resaltó que Uruguay es uno de los países de la región con una alta dependencia con los sicofármacos.

El suicidio es la principal causa de muerte externa en Uruguay, hay más suicidios que homicidios y que muertes por accidentes de tránsito en el país

Migración

La inmigración es el único indicador que viene a generar un revulsivo en la tendencia a la baja de la natalidad y la alta tasa de mortalidad. Además de poblar un país pequeño y con hipertrofia en la capital, donde se concentra la mitad de la población en el departamento más pequeño del país, la mixtura de culturas es un punto a destacar que puede contrastar la emigración.

El último que apague la luz – Foro Agro-Ganadero. Axón Comunicación

Según los últimos datos publicados Uruguay tiene 633.439 emigrantes, lo que supone un 18,3% de la población de Uruguay. Si miramos el ranking de emigrantes vemos que tiene un porcentaje de emigrantes medio-alto.

La emigración femenina (341.989 mujeres, un 53.98% del total), es superior a la masculina (291.450 varones, el 46.01%). Los principales países de destino de los emigrantes uruguayos son Argentina, destino del 21,32%, seguido de lejos por España, con el 11,93% y Estados Unidos, con 8,88%. En los últimos años, el número de emigrantes uruguayos ha aumentado en 274.716 personas, un 76,58%. (9)

Volviendo al inicio, ¿tiene futuro Uruguay?

Artículo publicado originalmente en Periferia


Referencias:

1-https://ladiaria.com.uy/trabajo/articulo/2021/10/69-de-los-jovenes-tiene-salarios-sumergidos-de-menos-de-25000-pesos/

2 – https://www.expatistan.com/es/costo-de-vida/pais/uruguay

3-https://www.efe.com/efe/america/economia/la-seguridad-social-un-desafio-para-uruguay-y-america-latina/20000011-4392793

4-https://ladiaria.com.uy/economia/articulo/2020/10/los-desafios-del-trabajo-determinantes-para-la-seguridad-social/

5-https://ladiaria.com.uy/salud/articulo/2021/7/uruguay-en-su-minimo-historico-de-fecundidad-y-ahora-que/

6- https://www.youtube.com/watch?v=mELanoAYJ0E

7-https://ladiaria.com.uy/feminismos/articulo/2021/7/hubo-12-femicidios-en-el-primer-semestre-de-2021/

8-https://udelar.edu.uy/portal/2021/07/un-tema-que-nos-duele-a-todos/

9-https://datosmacro.expansion.com/demografia/migracion/emigracion/uruguay

Nicolás Centurión
Nicolás Centurión

Como dice un rapero: «por amor y por vicio… se convirtió en mi oficio.» La palabra se milita. Junto café con palabras para subsistir en este paréntesis, desde la periferia.

El futuro es nuestra consecuencia

El futuro es nuestra consecuencia

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La pandemia del COVID-19 generó controversias en todas las esferas de nuestras vidas y fue la protagonista del último año. Las falencias del modelo productivo dominante, que nos trajeron a la crisis socioambiental actual, quedaron expuestas evidenciando los resultados del maltrato a nuestra casa llamada Tierra.

Un sistema que tiene como partícipes a las grandes élites del globo, importantes perpetuadores de las prácticas que benefician a la minoría rica, dejan a millones en el último peldaño de la cadena alimentaria del consumismo. ¿Ver para creer? En el fin de la década no solo fuimos espectadores, sino también protagonistas de la catástrofe.

Nuestra casa está en llamas

El 2020 comenzó con incendios en Australia, luego le siguió nuestro continente con focos activos en la Amazonía, y en nuestro país, más tarde o más temprano, llegaron a más de una decena de provincias, de forma más intensa en las sierras de Córdoba y en el delta del Paraná de Santa Fe y Entre Ríos. Durante el año pasado fueron afectadas por los incendios 1.080.846,98 hectáreas en todo el país.

Desde finales de mayo, en Córdoba el fuego llegó a localidades como Reserva La Calera, Santa María de Punilla, Tanti, Sierras Chicas y la zona entre San Antonio de Arredondo y Las Jarillas. A mediados de agosto, se acercó a Villa Albertina y llegó hasta localidades del departamento de Ischilín. Fueron afectadas más de 40.000 hectáreas y se estima que fue el peor incendio en 12 años.

En el Delta del Paraná los incendios comenzaron en marzo, pero recién en mayo el Plan de Manejo del Fuego tomó acción y atacó 30 focos activos con helicópteros hidrantes. Se registraron en la zona más de 2.800 focos de incendios en el territorio del Plan Integral Estratégico para la Conservación y Aprovechamiento Sustentable del Delta del Paraná (PIECAS DP).

El Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) del Gobierno nacional fue el encargado de dar a conocer información sobre los incendios. Un dato interesante que otorgó fue que el 95% de los incendios fueron producidos por intervenciones humanas: entre los principales escenarios se encontraron la preparación de áreas de pastoreo con fuego, fogatas y colillas de cigarrillos mal apagadas y el abandono de tierras.

Estos datos nos permiten analizar una de las prácticas más cotidianas del modelo de producción tradicional: los incendios como forma de limpiar terrenos para el aprovechamiento agropecuario o inmobiliario. Los incendios generados intencionalmente, suelen darse en épocas específicas del año en donde las condiciones climáticas permiten la rápida propagación del fuego. Una vez afectadas y “limpias”, las tierras suelen tener un precio más bajo que el anterior al de los incendios, por lo que su ocupación por grandes negocios agropecuarios e inmobiliarios resulta sencilla.

En el caso más específico del Delta del Paraná, la región es inundable, por lo que su precio suele ser más bajo de por sí; se tiene fácil acceso a agua de buena calidad; son zonas cercanas a centros de comercialización y consumo; y al ser difícil su acceso suelen tener menos controles por parte del Estado. Las quemas preparan el terreno para alimentar al ganado y ahuyentan especies autóctonas que puedan afectar a su producción.

Las consecuencias son evidentes, se pierden espacios verdes y los distintos ecosistemas son reconfigurados generando desequilibrios que afectan a la sociedad y ambiente en su conjunto. En medio de una crisis ambiental estas prácticas requieren un tratamiento urgente, el camino por excelencia es tomar las demandas de las comunidades en la agenda política. Una de las victorias en ese sentido, fue la sanción de la modificación de la Ley de Manejo de Fuego, que busca proteger ecosistemas que puedan ser víctimas de incendios. Es así que se modificó el artículo 22 bis de la ley 26.815 ampliando las restricciones en el uso de las tierras afectadas, durante 30 o 60 años, para su recuperación. La modificación tiene la intención de terminar con la especulación inmobiliaria y agropecuaria sobre tierras incendiadas.

Una conquista que queda pendiente es el tratamiento y sanción de la Ley de Humedales que busca crear un marco legal que proteja y ampare toda práctica que se de en esos territorios. La propuesta popular tiene la intención de convocar a las comunidades y productores locales para que formen parte del proceso de creación y reglamentación de la ley. Además, se exige que se reconozca la diversidad de los humedales en un inventario con un análisis integral que considere no sólo las condiciones ecosistémicas, sino también, las características socioeconómicas y culturales de la región.

La pandemia de los desmontes

En el norte del país se intensificó otras de las prácticas que, de la mano con los incendios, busca beneficiar a la hegemonía productiva: los desmontes. Los bosques son continuamente atacados por la expansión de las fronteras agropecuarias que buscan mayor rentabilidad llenando los campos con granos predominantes como la soja. Las consecuencias de este tipo de cultivo van desde las modificaciones ecosistémicas a los suelos hasta el envenenamiento de las regiones con agrotóxicos, pero también la deforestación que afecta gravemente a las condiciones climáticas del planeta y a las vidas de las comunidades que habitan los bosques.

El ASPO, al ser abusado por el poder de los grandes empresarios agropecuarios, también fue usado como herramienta para evitar todo conflicto social en respuesta al saqueo. Si bien se organizaron manifestaciones que denunciaron los desmontes, las agendas políticas y mediáticas estuvieron ocupadas con la pandemia, olvidando que el mundo no paró, sino que siguió en movimiento junto con las expresiones de las distintas comunidades en defensa de sus territorios.

En el marco del Aislamiento Social Productivo y Obligatorio, y de una emergencia social y sanitaria declarada en la región, la legalidad y el abuso de saqueo fueron tomadas indiferentemente. Ya en el comienzo del período pandémico -entre el 15 y el 31 de marzo- se desmontaron ilegalmente 2.172 hectáreas en cuatro provincias del noroeste argentino. Vale la pena mencionar que 130 de las hectáreas fueron adjudicadas al presidente de la Sociedad Rural Salteña, Ignacio García del Río. Por su parte, el gobierno salteño -provincia donde se dieron con más intensidad- decidió desligarse del conflicto atribuyendo la responsabilidad a Nación por estar dándose una violación de un decreto nacional -el del ASPO- que excedía su “poder provincial”.

Veneno que cae del cielo

El paquete de atentados contra el ambiente viene completo: se desmontan bosques o se incendian terrenos y se ocupan tierras ilegalmente para cultivos con agrotóxicos que envenenan todo lo que toquen, afectando directamente la salud de las personas y los ecosistemas de las regiones.

En la mayor parte del país, la producción agropecuaria estuvo entre las actividades exceptuadas del confinamiento, sin establecer especificaciones que permitieran reconocer la diversidad dentro del sector. Durante el ASPO se denunciaron “incidentes” con fumigaciones en Santiago del Estero, Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos y Chaco, provincias donde predominan estas prácticas y viven las consecuencias de sus excesos y mal usos. Cada año se liberan 500 millones de litros/kilos de agrotóxicos y se viola la Ley General del Ambiente que busca evitar el abuso de los productos.

Los tóxicos que caen desde las avionetas generan consecuencias graves: malformaciones congénitas, abortos espontáneos, enfermedades oncológicas, problemas respiratorios y pulmonares. Hoy, en medio de una pandemia, una de las consecuencias más graves es la inmunosupresión: debilitamiento del sistema inmunológico reduciendo los linfocitos y alterando los niveles de anticuerpos, en otras palabras, se facilita el acceso de los virus, bacterias y gérmenes al cuerpo humano.

Podemos decir que se lograron pequeñas victorias en este tema, como el acuerdo de Bayer-Monsanto que pondrá fin al 75% de las demandas en curso y futuras contra el Roundup -uno de sus productos más famosos- por ser cancerígeno. De esta forma, se formaliza el reconocimiento de responsabilidad de la empresa y se le da un golpe simbólico, pero no es suficiente.

Otro de los tantos casos que se dieron fue en nuestro país, en San Nicolás. La Justicia Federal recibió un informe pericial que confirmó la contaminación de Atanor -una de las compañías de agroquímicos más grandes del país- en la localidad y en el Río Paraná. Los vecinos reclaman respuestas desde hace tiempo por el fallecimiento de 200 personas en sólo seis cuadras lindantes a la empresa, la comunidad entera queda a la expectativa de que lo que se haga con las pruebas.

¿El agua vale más que el oro? Preguntemos en Wall Street

El agua, bien común esencial para la vida, es cada vez más valiosa por su escasez y derroche extremo. El lobby minero buscó instalarse en el pasado 2020, con mayor rapidez y fuerza en el interior del país durante el ASPO.

A mitad de año, volvió el conflicto a Mendoza cuando el Senado provincial aprobó el proyecto, presentado por el gobernador Rodolfo Suarez, de la creación del “Consejo Económico, Social y Ambiental de Mendoza” que tendría un “carácter consultivo de los Poderes Ejecutivo y Legislativo y de participación para el debate, diseño, planificación e implementación de políticas públicas en materia económica, ambiental y social”. El mismo es representado mayoritariamente por el sector empresarial y solo el 3% por trabajadores del Estado. Mendoza tuvo extensas jornadas de lucha desde 2019, cuando se intentó modificar la ley 7.722 para permitir la utilización de cianuro y ácido sulfúrico en la actividad minera, y que, gracias al levantamiento de la comunidad, se rechazó el proyecto. En la actualidad, sabemos que el novedoso Consejo podría dar paso libre al lobby que sigue intentando instalarse en la región.

En la segunda mitad del año surgió otro conflicto al sur del país. En Chubut, se intenta apelar al segundo artículo de la ley que regula la actividad minera -la Ley N°5001- para realizar la zonificación de la región en donde se encuentra el Proyecto Navidad de la multinacional Pan American Silver, y de esta forma, habilitar la megaminería en la provincia. El pueblo chubutense fue el responsable de la creación de la ley N°5001, luego de un levantamiento histórico en 2003, en contra de la instalación de la empresa Meridian Gold, en este 2020 ni la pandemia pudo callar sus voces.

Para cerrar el año nos encontramos con una noticia un tanto preocupante a nivel mundial: el agua comenzó a cotizar en Wall Street, específicamente en la bolsa de mercados a futuro de Estados Unidos y su precio se determina por la combinación de volumen y disponibilidad. La situación trajo a la discusión al centro del escenario mediático, a pesar de ello, al pasar los días la noticia desapareció. En un planeta donde dos millones de personas no acceden al agua potable, el sistema dominante y los privados siguen acaparando bienes comunes esenciales para nuestra vida como si no estuviéramos necesitando de ellos.

¿Podemos confiar en el 2021?

Si algo queda claro, luego del repaso por el 2020, es quienes están detrás del entramado político, económico y social que sigue permitiendo prácticas saqueadoras.

De la misma forma en la que entendemos que el conflicto envuelve a muches actores y distintos escenarios donde el poder predomina, la solución debe darse desde abajo y desde cero. En un sistema capitalista con políticas neoliberales que nos venden al ambientalismo desde el individualismo y, que propone solucionar los problemas del mundo cerrando bien la canilla para no derrochar agua, la organización popular resulta indispensable.

Es junto a los pueblos originarios que proponen formas de vivir amenas con los ecosistemas y que entienden al hombre como parte del ambiente, es junto a los nuevos proyectos de huertas agroecológicas sin agrotóxicos y sin explotación.

Si esperamos mejoras para este 2021 no hay que olvidar al verdadero enemigo, ni hay que caer en las redes de los falsos presagios liberales. El poder popular podría salvarnos, encaminemos este año hacia la reflexión y, por consiguiente, a la acción.


Agustina Flores
Agustina Flores

Soy hija de los vientos patagónicos. Compañera (in)esperada de la militancia para la liberación. Entusiasta del puño y la letra. Lo personal es político, el periodismo también.

La inclusión frente a la exclusión

La inclusión frente a la exclusión

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El pasado 30 de septiembre el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires llevó a cabo la presentación del Programa de Acompañamiento a las Trayectorias y Revinculación de estudiantes (ATR), de la cual participaron junto al gobernador Axel Kicillof, la Directora General de Cultura y Educación de la provincia, Agustina Vila, el Ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, y el Viceministro de Salud de la provincia, Nicolás Kreplak.

El Programa ATR consiste en un dispositivo de acompañamiento a las trayectorias educativas que implica visitas domiciliarias a estudiantes de primaria y secundaria de todas las escuelas de gestión estatal y privada de la Provincia de Buenos Aires. Tiene como objetivo el fortalecimiento de la continuidad pedagógica y la revinculación escolar de estudiantes que hayan tenido dificultades con la continuidad educativa.

Las visitas domiciliarias serán llevadas a cabo por docentes suplentes que integran el Programa de Incorporación Especial de Docentes y Auxiliares (PIEDAS) y estudiantes avanzados, de 3° y 4° año, de educación superior de los profesorados de educación primaria y secundaria y tecnicaturas superiores de gestión estatal y privada. Podrán inscribirse aquelles estudiantes en formación que no pudieron realizar su práctica, teniendo la posibilidad de acreditarla como una práctica preprofesional.

Cada docente tendrá a cargo un grupo de 6 estudiantes, a les cuales visitará dos veces por semana, percibiendo una beca mensual de $8.000 ($7160+$840 de movilidad). Sobre la movilidad, Agustina Vila argumentó que esta será reducida siendo que les docentes trabajarán con las comunidades educativas de sus distritos, a modo de evitar la circulación en la vía pública. Les docentes recibirán formación ad hoc específica para realizar la tarea de acompañamiento a las trayectorias, y la planificación y el seguimiento de las tareas estará a cargo del docente de cada curso.

Entre les 11.000 docentes suplentes que integran el PIEDAS y les 35.000 en formación se conforma un total de 46.500 docentes que tendrán por objetivo acompañar a les 279.000 estudiantes, que según los números expuestos por la Dirección General de Cultura y Educación (DGCyE), requieren de un mayor acompañamiento pedagógico. De ese total de niñes y adolescentes, 225.000 mantienen actualmente algún tipo de vínculo con las escuelas, pero requieren de un mayor acompañamiento para mantener la continuidad pedagógica. Les 54.000 estudiantes restantes, actualmente no tienen vinculación cotidiana con las escuelas. En términos generales 9 de cada 10 estudiantes mantienen continuidad pedagógica.

Si bien los números son alentadores, no dejan de sorprender conociendo las preocupantes condiciones habitacionales y de nula conectividad de gran parte de los hogares de la provincia de Buenos Aires, y teniendo a nivel nacional más de un 56% de niñes y adolescentes pobres. Por lo cual se torna absolutamente necesario que el gobierno bonaerense dé a conocer los datos recabados en cada distrito, visibilizando detalles del relevamiento llevado a cabo, y apostando al acompañamiento que puede direccionarse desde las organizaciones sociales presentes en cada territorio.

Reconociendo la complejidad actual, es de suma importancia entender que la política pública, previo a su implementación, deba ser pensada estratégicamente, para anticiparse a la emergencia de posibles obstáculos.

Desde el programa ATR, pensando en la territorialidad de la política, sería necesario generar articulaciones con aquelles actores que posiblemente cuenten con las herramientas para aportar a la logística e implementación, como las organizaciones sociales y los sindicatos. En cuanto a estos últimos, la presentación del programa contó con la presencia de los gremios docentes, que se mostraron conformes con la medida. María Laura Torre, docente de SUTEBA, expresó al portal de Diputados Bonaerenses que “el programa ATR es muy interesante para revincular a las y los docentes con los alumnos, algo que vivimos con mucha preocupación”.

A pesar de algunos interrogantes que naturalmente puedan surgir sobre la implementación del programa, es preciso comprenderla como una política coyuntural y necesaria. Evidentemente existe una preocupación en el gobierno de la provincia, y específicamente en la DGCyE, por intervenir sobre la problemática de la continuidad educativa para contrarrestarla, en el marco de una pandemia tan prolongada. El gobernador bonaerense explicitó que se prevé una inversión de 300 millones de pesos para el Programa ATR, destinado a aquelles que han perdido la continuidad pedagógica debido a la falta de conectividad, evitando así el riesgo que implica que asistan nuevamente a las escuelas. Argumentó que “los niños y niñas son los más privilegiados, no nos podemos permitir someterlos a ellos a riesgo o experimento. No queremos que la escuela contribuya a aumentar los contagios, lo vamos a lamentar toda la vida.”

Sobre la vuelta a clases presenciales, manifestó que tomar una decisión prematura es poner en riesgo a les estudiantes y sus familias, y a les docentes. La propuesta desde el gobierno provincial, según expresó, es “para los lugares de más alta circulación y para toda la provincia ir a las casas a buscar una forma de revinculación y de continuidad de sus trayectorias y un acompañamiento”. Para los lugares de menor circulación aseguró que entregaron a Nación un protocolo para clases presenciales, que implicará de un entrenamiento previo garantizando las condiciones óptimas para evitar una exposición riesgosa.

Dimensionar las condiciones de desigualdad existentes en la provincia y en el país, en materia de educación, requiere del necesario y permanente ejercicio de revisar nuestra historia. Axel Kicillof recordó con énfasis que “venimos de una época en la que a la educación la tiraron al tacho, teniéndonos que dedicar a hacerle el service y activar 60.000 computadoras, que tenían chicos y chicas pero que no funcionaban porque ni el service le hicieron” y continuó aseverando que en el período anterior se discontinuó la política de estado de proporcionarle acceso, conectividad y tecnología a les que más lo necesitaban, haciendo que hoy el problema sea mayor.

En el mismo sentido, Trotta aseguró que desde el Ministerio de Educación Nacional “no renunciamos a garantizar todos los aprendizajes de nuestros niños/as y adolescentes, y tampoco la calidad educativa, por eso llevamos adelante la evaluación de la calidad educativa”, afirmando que desde el Ministerio se considera central el presupuesto educativo 2021, para “romper la inercia de la desinversión en el campo educativo que viene transitando la argentina desde los últimos cuatro años”. Que el ministro resalte que “más Estado es lo que necesita la sociedad”, posiblemente se deba al hecho de que venimos de cuatro años en los cuales el desfinanciamiento de la educación pública, y el intento por mercantilizarla generó no solo un aumento de la brecha social, sino también de la brecha digital, específicamente a partir de la decisión gubernamental de la Alianza Cambiemos de suspender el Programa Conectar Igualdad.

Basta con enforcarnos en lo que ocurre actualmente en Capital Federal, donde la ministra de Educación de la ciudad, Soledad Acuña, solicitó la aprobación al ministerio de Educación Nacional de su propuesta oficial que consiste en clases presenciales al aire libre reabriendo determinadas escuelas para les 6.500 estudiantes que se quedaron sin conectividad. Desde el Ministerio, argumentando que “tenemos que lograr que la escuela vaya a los chicos, no exponer a los chicos a ir la escuela”, se propuso como contrapropuesta entregar hasta 6.500 dispositivos tecnológicos a aquelles niños, niñas y adolescente que quedaron fuera del ciclo lectivo virtual y proveer la conectividad necesaria para garantizar su inclusión.

El gobierno de la Ciudad porteña (ciudad con más presupuesto y recaudación del país) no sólo se niega a entregar por su cuenta las computadoras que garanticen un acceso igualitario a la educación virtual, sino que, a partir de la contrapropuesta efectuada por Nación, aún no presentaron los listados de la cantidad de niñes y adolescentes que precisan de los dispositivos y de la conectividad para garantizar la continuidad pedagógica.

La Multisectorial por la Escuela Pública, integrada por madres, padres, cooperadoras, organizaciones sociales, centros de estudiantes y la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), presentó un recurso de amparo en la justicia para que la gestión de Horacio Rodriguez Larreta informe dicho listado en pos de que el Ministerio de Educación Nacional pueda avanzar en la entrega de los dispositivos.

No requiere de un ejercicio dificultoso imaginarnos en qué situación se encontraría el sistema educativo público si Juntos por el Cambio continuase gobernando la Nación y la provincia bonaerense. Se torna explícita la diferencia entre gestiones que conciben a la educación pública como un derecho y una responsabilidad prioritaria del Estado para garantizar la inclusión social, y aquellas que la conciben como un servicio, direccionando la responsabilidad en el individuo que debe esforzarse para acceder a la educación, profundizando así la exclusión. Claro está, que la desinversión en la educación pública, lejos de relacionarse con incapacidades e ingenuidades de gestión, se debe a la decisión política de desactivar la capacidad de aprendizaje y reflexión del pueblo. 

Los esfuerzos que se han desplegado desde los gobiernos nacional y bonaerense, se reflejan en las diversas políticas públicas que apuntan a garantizar la continuidad pedagógica, disminuyendo el acceso desigual a la educación y al mismo tiempo la desigual permanencia existente en el sistema educativo.

Evidenciar todo lo que resta por hacer se debe corresponder con el ser conscientes de que los problemas estructurales en torno a la educación pública existen desde comienzos de siglo, reconociendo los importantes avances entre el 2003-2011, las dificultades y discontinuidades entre 2011-2015, y el escandaloso desprestigio y desfinanciamiento entre 2015-2019. Enfrentar las problemáticas implicará comprender dicho camino como un proceso a largo plazo, siendo menester entenderlo como una prioridad.

Asimismo, afrontar estratégicamente el ciclo lectivo 2021 implicará uno de los desafíos más complejos e importantes del Ministerio de Educación Nacional, desafío que las organizaciones sociales debemos comprometernos a asumir con responsabilidad y compromiso, entendiendo a la educación pública y a la educación popular como una herramienta fundamental para la construcción de una Patria más libre, justa y soberana.


Laura Herrera
Laura Herrera

Soy una militante popular en defensa de los derechos de lxs pibxs, con el compromiso inquebrantable de construir una patria grande, más justa, igualitaria, soberana y feminista. Estoy convencida de que otra realidad es posible.

Los ladrones de guantes rojos

Los ladrones de guantes rojos

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Somos millones los que nos alarmamos por el hambre o militamos y tratamos de tender una mano del modo que sea, para aliviar los golpes que esa violencia les pega todos los días a millones de seres humanos. Pero con eso nunca alcanza, la violencia es muy grande.

¡La violencia no es la pobreza! ¡La pobreza es la consecuencia de la violencia económica que ejercen los pocos que poseen la riqueza que es de todos! Cuando escuchamos “riqueza concentrada”, de esto se trata. ¡En el mundo, unos pocos se quedaron con lo que es de todos! Y van a hacer lo posible para seguir estafando y saqueando como lo vienen haciendo en nuestras tierras desde hace más de 500 años.

Desde que somos “Argentina”, estos señores tomaron muchas veces por asalto la Casa Rosada.  A través de innumerables golpes de estado desalojaron a los gobiernos que hicieron o intentaron hacer algo para repartir de manera un poco más justa esa riqueza concentrada. Pero en el 2015 le regalamos los votos y ya no les hicieron falta “las botas”, ni las balas, ni los bombardeos.

 En 2019 se retiraron heridos ¡pero están muy vivos! No olvidemos que se fueron con casi un 40% de los votos y siguen presentes en sus medios de comunicación, hablando como si tuvieran la solución para combatir la pobreza, ¡como si ellos no la hubieran generado y profundizado!

Los últimos años de neoliberalismo, y todos los gobiernos serviles a los ladrones de “guantes rojos” llevaron la desigualdad a niveles desesperantes, ¡hay pibes que ni llegan a pibes!, antes se mueren por desnutrición o por las enfermedades que los amenazan en los lugares que les toca nacer. Pero, así como muchos seres humanos se empobrecen hasta la muerte, otros se siguen enriqueciendo hasta niveles extremos.

Desde que asumió, el gobierno viene tomando medidas en defensa de los sectores empobrecidos, y digo en defensa porque esto no es un accidente ni una tragedia, es la consecuencia de un violento y feroz ataque lanzado por los sectores que se dedican a la especulación, que profundiza la concentración de capitales y que con toda desfachatez mandan sus “ganancias” a los paraísos fiscales creados por ellos mismos. Paraísos que son verdaderos infiernos que terminan con la vida de poblaciones inocentes, que tuvieron la desgracia de nacer en un territorio que tiene un subsuelo lleno de petróleo, agua, o de cualquier mineral codiciado y saqueable por los ladrones de “guantes rojos”.

¡Los misiles del robo y el capital financiero!, cada vez en menos manos, bombas atómicas circulando por las redes sociales que anuncian con total impunidad la tabla de posiciones de los apellidos y las familias más concentradoras de la economía mundial (no merece llamarse riqueza a la causa que genera la pobreza de tantos millones de personas) números tan grandes que no alcanza el ancho de esta página para escribir esa cantidad de cifras.

¡La concentración económica es un acto violento y criminal y es la plataforma de lanzamiento desde donde parten los misiles que matan por desnutrición a nuestros hijos! ¡El pobre no es el responsable de la pobreza! ¡Y si! ¡Hay que combatir la pobreza, está muy bien actuar con rapidez y tomar medidas de emergencia! Es lo primero que hay que hacer y felicito a los gobernantes, legisladores, voluntarios, organizaciones sociales y políticas que están llevando adelante estas acciones.

¡Pero repito, el hambre es la consecuencia del crimen llamado “Concentración de la riqueza”! Y el día que entendamos que esa concentración es un acto criminal y nos indigne tanto como la pobreza, vamos a estar comprendiendo quienes son los máximos responsables de esos crímenes ¡Digo máximos responsables porque reconozco que hay una lista de grados de responsabilidad, pero ¡Oh casualidad! ¡Los máximos responsables son casi invisibles! ¿Invisibles o invisibilizados? Ustedes ya saben. Blindaje mediático, medios hegemónicos, ¿Les suena?

Cada uno sabrá el grado de responsabilidad que le toca: Empresarios, funcionarios, jueces, legisladores, nosotros mismos; y no para sentirse culpable y flagelarse, sino para comprender que esto no es algo natural, y si los seres humanos construimos esta sociedad también podemos cambiarla. Para construir una sociedad más solidaria y con menos violencia, debemos comenzar a “desarmar” las bases de lanzamiento desde donde parten los misiles que matan a nuestros hijos y hermanos.

Esas bases están ahí afuera, pero en nuestras decisiones individuales y en nuestras organizaciones debemos profundizar la solidaridad y “desarmar” los niveles de competencia e individualismo para así podernos demostrar y demostrarles a los “señores de guantes rojos” que otra sociedad es posible.

¡Y en el medio de esta situación, la pandemia!, ¡llovido sobre mojado! La economía sigue en caída, la esperada reactivación se demora, la desocupación y la pobreza aumentan y los recursos del estado se priorizan para a reparar un sistema de salud que hace muchos años está muy precarizado pero que en los últimos cuatro se agudizó. Se multiplicó la cantidad de camas de terapia intensiva, se construyeron nuevos hospitales y centros de aislamiento para los contagiados, etc.  El gobierno también toma medidas de ayuda para los sectores productivos castigados por la pandemia, con más aciertos que errores y con recursos que nunca alcanzan a cubrir todas las necesidades.

¡Y el impuesto por única vez al 1% más rico de la Argentina! ¡Y Vicentín! Y volvieron a subir sus niveles de violencia los medios de comunicación que defienden a los señores de “guantes rojos”. “¡Comunistas!”, “¡Vamos a convertirnos en Venezuela!”, “¡La yegua está detrás de todo esto!”, y otras tantas fantasías y barbaridades alentadas por los sectores anticuarentena, que mienten y manipulan a una pequeña parte de la población hasta arrastrarlos a movilizaciones ridículas, peligrosas e ilegales. No estoy negando el derecho a la protesta y a la honestidad de algunos sectores que están muy castigados por esta pandemia.

El 6 y 9 de agosto se cumplen 75 años dos de los mayores actos de violencia de la historia de la humanidad, los bombardeos de las Islas Japonesas de Nagasaki e Hiroshima, y nunca se detuvieron. Matan con bombas, con golpes de estado, con saqueos de recursos naturales, endeudamientos… Con estos señores de “guantes rojos”, y sus aliados, se tuvo que sentar nuestro joven ministro de economía, a negociar el pago de una deuda de la que el pueblo argentino no tuvo ningún beneficio. Pero se tuvo que sentar, y logró un resultado más que digno. No olvidemos que estaba frente a los señores de “guantes rojos”.

Y digo, “guantes rojos” porque en muchos casos, las manchas de sangre se los ha teñido por completo.

Lic. Fabián Scorpino

Consejos Permanentes por la No violencia Activa

Estado y Asociaciones deportivas: la importancia del trabajo conjunto

Estado y Asociaciones deportivas: la importancia del trabajo conjunto

TIEMPO DE LECTURA: 9 min.

El retorno del deporte, que en un principio parecía muy distante e incierto, hoy se encuentra a la vuelta de la esquina. Si bien es algo que todes quieren, las condiciones en los países nuestroamericanos son más que complejas: por ejemplo, en Brasil y en Chile, pese a tener un gran número de infectados por el reciente virus, no toman las medidas necesarias. Sus gobiernos permiten que el deporte vuelva con un protocolo muy pobre y sin dimensionar lo que conlleva eso.

Si bien Brasil es el país que se encuentra desbordado a causa de las flojas y pocas serias medidas que ha tomado su presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro. Este no es el único caso que se da: Chile, Ecuador y Colombia también se encuentran en el mismo camino, dejando en claro el posicionamiento (algo no casual) de aquellos gobernantes de derecha. El poner la economía, las asociaciones privadas y grupos hegemónicos televisivos por encima de  la salud y protección de su pueblo, incluso de les deportistas mismos, es una demostración de ese posicionamiento político.

Por eso es necesario hacer un repaso y un desglose de lo que sucede en los países ya mencionados y el resultado que conlleva tomar dichas medidas, comparándolo con la situación argentina y el trabajo en conjunto que se viene realizando respecto del deporte en ese país. Argentina es un ejemplo de cómo deben hacerse las cosas en este punto: se pretende la vuelta de las prácticas deportvas, con los protocolos necesarios y protegiendo a aquelles que lo hacen posible.

Para empezar, cabe mecncionar un dato muy curioso y bastante llamativo, como fue la participación del titular de la Conmebol Alejandro Domínguez en la Cumbre del Mercosur. Junto a él, los presidentes se comprometieron al análisis del protocolo elaborado por la Confederación: “tomaron nota” del proyecto para el regreso de la actividad en el continente y abogaron por una vuelta “de manera segura y ordenada”.

Esto se dejó ver en el punto diez del comunicado, donde aclararon que “el conjunto de presidentes de los estados partes del Mercosur y estados asociados, tomaron nota del Proyecto ‘Vuelta al fútbol’ sobre las Competiciones Deportivas Internacionales ligadasa la CONMEBOL Libertadores 2020, la CONMEBOL Sudamericana 2020, y las eliminatorias CONMEBOL para la Copa Mundial de la FIFA Qatar 2022”.

En dicha presentación de los países que integran el Mercosur, estuvieron los presidentes Alberto Fernández (Argentina), Jair Bolsonaro (Brasil), Luis Lacalle Pou (Uruguay), Mario Abdo Benítez (Paraguay), Iván Duque (Colombia), Sebastián Piñera (Chile), Martín Vizcarra (Perú) y la presidenta de facto Jeanine Áñez Chávez (Bolivia).

En la reunión, Alejandro Domínguez hizo un reconocimiento “a los esfuerzos de los Gobiernos para contener la propagación de la enfermedad en tiempos que exigen decisiones enérgicas, pero también serenidad y equilibrio”.

“Desde el inicio de la pandemia la Conmebol tuvo en claro su prioridad: debemos proteger más que nada la vida de todos, las vidas involucradas en el fútbol; por eso de inmediato suspendimos las competiciones”, indicó. Por otro lado en cuanto al proyecto para la vuelta, marcó que “no supone ni plazos, ni fechas”. “Se trata de un aporte al retorno responsable del fútbol a nuestro continente”, culminó.

Ahora, si bien está clara la preocupación del presidente de la Conmebol para la vuelta al fútbol, lo que genera ruido es su presentación en una reunión de tal magnitud. Muchas veces se ha dejado en claro el poder que pueden tener diferentes asociaciones o entes ligados al deporte en la toma de decisiones y en el actuar de un país o -en este caso- de varios.

Asimismo en Brasil los problemas parecen no parar y quien salió al cruce fue el actual director deportivo del Olympique de Lyon, Juninho Pernambucano, que a raíz del asesinato de una niña de ocho años en una favela de Río de Janeiro, críticó: «Este hecho es una confirmación del tipo de política violenta que tenemos en el país en este momento. Hay miles de George Floyd en Brasil y miles de otros que han sufrido en silencio lo que no sabemos».

A su vez, Pernambucano señaló las diferencias económicas que la élite de Brasil no ve: «La élite no comprende qué tan grandes son las desigualdades financieras en el país y si se hacen más grandes habrá violencia». Además, afirmó que el presidente de Brasil vive de noticias falsas y que «la gente que apoyaba a Bolsonaro era mayoría y fue mi decisión alejarme de ellos. Sé que algunos de ellos lamentan su decisión ahora. Pensaban que Bolsonaro era la única opción».

Por otro lado mientras el mandatario brasileño anunciaba que tenía coronavirus, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) informaba que el 9 de agosto reiniciaría el Brasileirao, un día después que la segunda división local.

Algo irónico es que el único torneo estadual en disputa de Brasil es el de Río de Janeiro pese a que ya se registraron más de 65 mil muertes en el país por la pandemia. Sin embargo el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, indicó en conferencia de prensa que los equipos del estado no participarán del Brasileirao hasta que finalice el campeonato regional, que fue suspendido en marzo por el Covid-19 a tres fechas de su final.

A la decisión de la CFB, que recibió críticas de las autoridades regionales del país, se le sumó el positivo de Covid-19 de un jugador del Flamengo, horas antes de definir el Campeonato Carioca frente al Fluminense. Pese a resguardar la identidad del futbolista, el riesgo de permitir que se juegue la final, lastimosamente no lo resguardó del virus, algo que hubiese sido más pertinente.

Fluminense, equipo que jugó el partido, días antes salió a repudiar en conjunto con Botafogo, la vuelta del fútbol en Río de Janeiro con el mensaje «Respeten nuestras historias», alegando que el país registra más de 1.000 muertes por día de Covid-19.

El domingo pasado se debían disputar los cuartos de final por el Torneo Catarinense entre el Chapecoense y Avai, pero el mismo se suspendió. En la semana la superintendencia de vigilancia en salud del gobierno, dio a conocer que había 14 positivos de Covid-19 en uno de los equipos, mostrando así que pese a las medidas que se toman en Brasil se sigue exponiendo la salud de jugadores. Pese a ello, este torneo junto al Campeonato Carioca y Brasileirao seguirán activos.

En Chile el gobierno mantuvo la incertidumbre sobre el retorno del torneo del fútbol local y sobre si estará en condiciones para recibir los partidos de las clasificatorias sudamericanas para el mundial de Qatar-2020 en septiembre, ante el avance del coronavirus.

La Asociación Nacional del Fútbol Profesional (ANFP) envió la semana pasada al gobierno una carta solicitando un permiso especial de circulación para los jugadores y staff de cada club profesional, con el propósito de poder comenzar los entrenamientos de cara a una posible reanudación del campeonato local el 31 de julio, pero el gobierno dictó que deberían esperar.

Otro dicho que llamó la atención en el país trasandino fue el de Gamadiel García, presidente del Sindicato de Futbolistas Profesionales de Chile, quien mencionó: «Italia volvió a los entrenamientos cuando estaba en el peak y tenía más muertes que en Chile. El protocolo de ellos era muy similar a este». Algo bastante complejo de poner en balanza, ya que las condiciones futbolísticas, sociales y de salud no son para nada parecidas.

Tanto Ecuador (29 de julio) como Colombia (27 de agosto) se encuentran con una fecha pautada para la vuelta del fútbol. Si bien es algo positivo que el gobierno y las asociaciones de fútbol tiren en conjunto, lastimosamente, esto denoto que la apresurada decisión tenía la intención de priorizar el show y el ingreso económico de los derechos televisivos antes que la salud de sus deportistas y aquellos que hacen posible que se pueda jugar.

Pese a ello, los problemas de sus asociaciones de fútbol han salido a flote en estas últimas semanas. El gobierno colombiano multó a la Federación de Fútbol de Colombia por venta de entrada ilegales, a través de la Superintendencia de Industria y Comercio, que penalizó a 17 personas fisicas y tres agentes de mercado, entre ellos la Federación de Colombia.

El superintendente Andrés Barreto confirmó que fueron sancionados por haber ejecutado o facilitado la conducta anticompetitiva. La multa aplicada es millonaria: se trata de 18.3 millones de pesos colombianos, es decir, la suma exacta de u$s 5.2 millones.

La situación en la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), se alteró cuando Jaime Estrada lideró una revuelta en busca de derrocar a Francisco Egas al mando de la Federación. Pese a ello tanto la Conmebol y la FIFA, expresaron que reconocen como único presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) a Francisco Egas, quien fue removido de ese cargo el 24 de abril por seis de los nueve miembros del del directorio, que entonces designó a Jaime Estrada.

Pese al apoyo de dichas entidades la tensión entre los presidentes de los clubes ecuatorianos y Egas es bastante fuerte, muchos apoyan su mandato y otros no. En los próximos días se daría a conocer la decisión final aunque todo parece indicar que Francisco Egas seguirá en el cargo de la F.E.F.

Por último el gobierno argentino junto a la Asociación de Fútbol de Argentina (AFA) tienen una relación bastante buena y en este tiempo su trabajo en conjunto ha dado frutos. Dicho ente entiende la situación que atraviesa el país y acompaña el pedido de cuarentena y el parate del fútbol hasta el momento, aunque es pertinente que les deportistas comiencen a entrenarse de cara a la reanudación de las competencias: está semana AFA envió el protocolo para que los jugadores, en principio, entrenen en grupos de seis, en los Estadios y sin pasar por los vestuarios.

Así mismo en medio de esta situación, el gobierno presentó un nuevo proyecto llamado “Clubes en Obra” que enmarca la iniciativa “Recuperación de Entidades Deportivas” (RED). Está es ejecutada a través de la Secretaría de Deporte, que incluye el Programa de Apoyo en la Emergencia para Clubes, un esquema de subsidios especiales de hasta 60.000 pesos al que ya accedieron más de 2.000 mil clubes de barrio. Esto demuestra la importancia y la ayuda del gobierno no solo para aquellos deportes o entes de gran magnitud, sino también para clubes y asociaciones de menor envergadura.

Este análisis refleja y muestra la constante tracción del gobierno en conjunto con el deporte para tomar decisiones importantes. Por un lado, está la dura realidad de aquellos gobiernos de derecha que tratan de usar el deporte para tapar lo que sucede en la sociedad y a la vez darle pie al mundo mediático que cotiza por el deporte, tal es el caso de Brasil. Olvidándose que esas decisiones apresuradas pueden llevar a un mayor número de infectados e incluso poner en peligro la vida de deportistas.

Por otro lado la Argentina es ejemplo para muchos y hace esperar sus decisiones, para que los resultados sean positivos y aquellos que están el mundo del deporte como también la sociedad misma, no se encuentren expuestos a peligros de contagio. Esto deja entrever la importancia que conlleva trabajar de buena manera tanto en la política, como así también en el deporte.


Eduard Paz
Eduard Paz

Sureño instalado en la ciudad de las diagonales. Fiel pensante de que lo político y lo deportivo van de la mano. Apasionado y siempre al servicio de la comunicación del pueblo y su deporte.

El tiempo es hoy, mañana es tarde

El tiempo es hoy, mañana es tarde

TIEMPO DE LECTURA: 8 min.

Desde que comenzó la pandemia, se ha venido reflexionando acerca de las podredumbres que han quedado en evidencia. No solo de la actitud de desprecio por la vida ajena que tienen quienes pregonan por volver a la “normalidad” del capitalismo tal y como se conoció previamente, sino de múltiples problemas que permanentemente genera un sistema de muerte como el capitalismo.

La pandemia resaltó los desastres que generan las formas de producción capitalista (ya sea en los campos como en las urbes): el calentamiento global la muerte de especies animales o vegetales; la contaminación de ríos, mares y océanos; la emisión desmedida de CO2 a la atmósfera y la consecuente expansión del agujero en la capa de ozono; o la expulsión de personas del el campo a la ciudad. También podrían mencionarse el incremento en los niveles de pobreza, la precarización de la vida, el aumento de enfermedades, o un infinito etcétera.

Pero el COVID-19 también puso de manifiesto las fragilidades de un sistema interconectado e interdependiente (llamado globalización) que ante una situación como la actual no puede dar respuesta eficiente ni desde lo sanitario, ni desde lo económico.

En picada libre

Por sólo dar un ejemplo, los investigadores del Observatotio Económico Latinoamericano (OBELA), Oscar Ugarteche y Arturo Martínez Paredes, analizaron recientemente cómo la pandemia resquebrajó las cadenas de suministros en el rubro alimentario, afectando de manera más significativa a los países dependientes de la importación de la gran mayoría de los alimentos que consumen “como México, EEUU, China, la mayor parte de África y la Unión Europea”.

Según los investigadores, la FAO afirma que “’la fuerte desaceleración de todas las economías del mundo y en particular de las más vulnerables (…) hará que los países, en especial los que dependen de las importaciones de alimentos, tengan dificultades para disponer de los recursos necesarios para comprarlos, ya que las tasas de desempleo han aumentado y las repercusiones económicas de la COVID-19 en el ingreso serán más severas[1].

En relación a las consecuencias de la pandemia, cabe destacar que en abril de este año –antes de que todo estalle por los aires- la Organización Mundial del Comercio ya pronosticaba una caída del PIB mundial de entre un 13 y un 32% para el 2020. Y si bien esta organización señala que la caída de la economía será peor que la crisis del 2008/09 (algunes incluso señalan que pueda ser peor que la de la década del 30), afirman que en 2021 comenzará la recuperación, aunque continuarán los coletazos del desastre.

Según un informe del Centro de Comercio Internacional (ITC, por sus siglas en inglés), “la economía mundial perdió al menos unos 126 mil millones de dólares en 2020 debido a la interrupción global de las cadenas de suministro en EEUU, la UE y China a causa del virus”. Además señala que “en conjunto, esos países representan el 63% de las importaciones mundiales y el 64% de las exportaciones de las cadenas de producción y venta[2]

Éste hecho no solo afecta a los países importadores de alimentos, sino también a quienes los exportan, ya sean de América, África o el Sudeste Asiático. En el informe antes mencionado se afirma que el 55% de todas las empresas pequeñas o medianas se vieron gravemente afectadas, mientras que solo el 40% de las grandes empresas han señalado verse afectadas.

Davos siempre está ahí, aunque no lo veas

Los ganadores ante la pandemia parecen ser los mismos grandes ganadores de siempre, los que cada año se juntan a planificar la economía global en Davos y que ahora proponen un “reseteo” o “reinicio”. Y sí, lo primero que se le viene a la mente tras escuchar esa palabra es la imagen de la empresa de la ventanita creada por Bill Gates (una batalla cultural que vamos perdiendo por goleada). “El Gran Reinicio”, así es como el presidente y fundador del Foro Económico de Mundial de Davos, Klasu Schwab, pretende llamar a este encuentro de la élite mundial en el 2021.

Éste al igual que el genocida norteamericano (aunque muchos lo sindican como estratega), Henry Kissinger, señalan que el “contrato social” (pobre Rousseau, se debe estar revolcando en su tumba) que conocimos ya no sirve y que hay que generar uno nuevo. La élite global sabe que su hegemonía sobre el sistema de acumulación globalizado llegó a su fin y que hoy es China el motor industrial del planeta. Y lógicamente están preparando su respuesta.

Los dichos de estos personajes no son muy diferentes a los del magnate de peluquín que ocupa el Despacho Oval. Ese gran slogan publicitario (de eso sí que sabe) de “America First” va en el mismo sentido. La globalización ya fue. La jugada de las élites será volver a concentrar sus poderes pero localmente. Y como esta crisis va a generar una gran pérdida depuestos de trabajo y la quiebra muchísimas pequeñas y medianas empresas, se abre un panorama favorable para que ellos las compren y sea parte de las reactivaciones de las economías a escala planetaria.

¿A quién pretenden dejar afuera de este reordenamiento? Claramente en la esfera de lo macro, a China. El gigante asiático se puso de pié, luego de décadas de burlas y desprecios occidentales. Pero si se mira en lo micro, los que perderían serían los pueblos del mundo, porque -de darse esta hipótesis- las lógicas de reproducción del capitalismo serían las mismas -o al menos muy similar-, y la impronta destructiva de la modernidad eurocéntrica, occidentalocéntrica y dualista cartesiana seguiría siendo la misma, pero a escala nacional.

Foto: Misión Verdad

La salida no es volver a la “normalidad”

La “normalidad” de las catacumbas a la que el mundo capitalista estaba acostumbrado llevó a que la humanidad superara el récord de emisiones de CO2 a la atmósfera: en mayo de este año se sobrepasó la barrera de las 400 partes por millón de este gas, que para las especies que necesitamos oxigeno es veneno. Esto no sucedía desde hace unos de 2.500 millones de años.

En 200 años, desde “revolución industrial” para acá, la modernidad, el capitalismo y sus lógicas depredatorias, están logrando asesinar al planeta, algo que no hizo la especie humana en miles años sobre el planeta tierra. Porque la responsabilidad no es de “la humanidad”, como los liberales pretenden que se crea. No son les individues les que tienen la responsabilidad de lo que está pasando, es un sistema que destruye todo a su paso para generar mayores niveles de rentabilidad para un puñado cada vez más reducido de personas.

Un discurso histórico

Han sido muchos y muchas las personas que manifestaron que hay que dar un giro de 180 grados en las lógicas de producción y de consumo (sobre todo las del norte global) si como especie se pretende seguir habitando en “esta, nuestra querida contaminada y única nave espacial”[3].

Al respecto y sin lugar a dudas, uno de los discursos más emblemáticos de la historia reciente ha sido el de Hugo Rafael Chávez Frías (Presidente y Comandante Eterno de la Revolución Bolivariana) en la Conferencia de Naciones Unidas para el Cambio Climático de 2009.

En aquel entonces Chávez alertaba sobre la destrucción capitalista y la “dictadura imperial” que aún hoy vive el mundo. Caracterizado por su gran retórica, simpatía y honestidad, en esa oportunidad hubo dos frases que pasarían a la historia, frases que no eran de su autoría, sino de algunes ciudadanes que las escribieron en sus pancartas: “No cambien el clima, cambien el sistema”, o “Si el clima fuera un banco, ya lo habrían salvado”. Síntesis pura y dura.

La comunidad organizada

Dicho esto, urge el debate acerca de cómo se produce, qué se produce, con qué objetivos, qué impacto tendrá ello sobre el medio que habitamos, entre muchas otras reflexiones que la humanidad debe darse de manera madura y responsable.

La pandemia y la podredumbre que sacó a relucir, no hacen más que resaltar la urgencia de esos debates. Porque la derecha y las élites globales (como se mencionó anteriormente) ya están trabajando para dar una respuesta al colapso que ellos mismos generaron.

Será tarea de los pueblos ir construyendo ese otro sistema que reemplace al caduco modelo impuesto por la modernidad eurocéntrica, patriarcal, racista y dualista cartesiana, que en muy poco tiempo llevó al planeta a un lugar de difícil retorno.

Hay que volver a la comunidad, a la resolución en pequeña escala de las necesidades básicas como la producción de alimentos, buscar energías que no destruyan el medio ambiente, al tiempo que se intenta revertir las brechas tecnológicas, pensando tecnologías no para vender sus patentes y aumentar la productividad y la rentabilidad, sino para resolver problemas cotidianos de las personas.

Hay que volver a la producción local, fortalecer el trabajo cooperativo y solidario, atendiendo y resolviendo los problemas que surjan en esas comunidades. Es imposible sostener los niveles de concentración no solo de la riqueza o de la propiedad de la tierra, sino de la población en grandes centros urbanos, hechos que terminan generando colapsos ya sean sanitarios, edilicios, hídricos, o de otra índole.

Para cerrar estas líneas, Chávez (también en aquel discurso en Copenhague), citaba al periodista y escritor francés Hervé Kempf, quien finalizando el preámbulo de su libro “Cómo los ricos destruyen el planeta” señala: “No podremos reducir el consumo a nivel global si no hacemos que los poderosos bajen varios escalones y si no combatimos la desigualdad. Es necesario que al principio ecologista, tan útil a la hora de tomar conciencia, ¨pensar globalmente y actuar localmente¨, le sumemos el principio que impone la situación: consumir menos y repartir mejor”.


Referencias:
[1] https://www.alainet.org/es/articulo/207285
[2] https://medium.com/@misionverdad2012/el-gran-reinicio-davos-conduce-el-modelo-econ%C3%B3mico-global-post-pandemia-3b682d6771a0
[3] Frase utilizada por el colega Walter Martínez al finalizar cada emisión de su programa “Dossier”.


<span style="color:#000000" class="tadv-color">Nicolás Sampedro</span>
Nicolás Sampedro

Prefiero escuchar antes que hablar. Ser esquemático y metódico en el trabajo me ha dado algún resultado. Intento encontrar y compartir ideas y conceptos que hagan pensar. Me irritan las injusticias, perder el tiempo y fallarle en algo a les demás.

Yasky: “Cuando haya pasado el aislamiento muchos van a quedar incorporados a esta modalidad del teletrabajo”

Yasky: “Cuando haya pasado el aislamiento muchos van a quedar incorporados a esta modalidad del teletrabajo”

TIEMPO DE LECTURA: 4 min.

– ¿Cómo fue la discusión en la cámara de diputados sobre los muchos proyectos que buscaban legislar el teletrabajo?

– En realidad terminaron siendo más de 14 proyectos. En la comisión de trabajo, que es donde empezamos a discutir esto, en general hubo un consenso de que el teletrabajo antes de la pandemia y del aislamiento obligatorio tenía más o menos incidencia en poco más del 10% de los trabajadores y trabajadoras del país y pegó un salto muy grande.

Todos vimos que había un vacío legal y percibíamos algo que creo que se va a dar efectivamente así y que es que cuando haya pasado el aislamiento muchos van a quedar incorporados a esta modalidad del teletrabajo. Así que desde ahí hubo una base de consenso de que era una ley necesaria. Tanto desde el Frente de Todos como la gente de Cambiemos acompañó la idea de que era necesario discutir este proyecto y eso facilitó de algún modo las cosas porque -a pesar de que después surgieron diferencias- la votación del dictamen en general fue de aprobación por prácticamente todos. Hubo muy pocas abstenciones.

– Es sabido que hay algunos sectores que se oponen a todo tipo de regulación. Hubo algunos diputados y diputadas que plantearon que esto afectaba el derecho del empleador a despedir y a organizar el trabajo dentro de su propia empresa…

– Si, hubo una serie de convocatorias (en la comisión de trabajo). Empezamos convocando a las organizaciones sindicales. Todas las centrales sindicales del país, la CGT, las 3 CTA, varios sindicatos que ya vienen incorporando el tema del teletrabajo en sus convenios como por ej la gente de FOETRA. Ahí hubo coincidencia en que la ley estableciera un piso de derechos y de garantías y que después en los convenios se pudiera discutir la particularidad, porque una cosa es teletrabajar siendo periodista y otra cosa es teletrabajar siendo médico u oficinista.

Lo fundamental era reconocer el derecho a pertenecer a la organización sindical, porque en muchos casos el teletrabajo se usa para licuar la pertenencia del trabajador del colectivo que lo representa. Es el modelo “Silicon Valey” que le llaman así porque se aplicó primigeniamente en ese lugar de EEUU, y que significa una relación absolutamente invisible, inasible, entre un trabajador y una empresa que impone las condiciones.

En la segunda reunión charlamos con los empresarios, quienes tuvieron miradas disímiles. En general quienes representan a pequeñas y medianas empresas acompañaron la idea, los representantes de la UIA plantearon alguna objeción pero tampoco fue una oposición frontal.

Posteriormente recibimos una nota de “IDEA”, que es ese agrupamiento empresario que reúne a unas 500 empresas y que es más bien un foro de opinión como el simposio que hacen anualmente. Estos hicieron el tipo de caracterización que planteabas en la pregunta: que esta ley iba a agregar complejidades y que iba a significar tener que incorporar trámites de burocracias que iban a terminar redundando en la industria del juicio. El caballito de batalla permanente de quienes pretenden que haya un vacío legal porque siempre este da lugar al abuso.

– Aprovechando tu profesión de maestro y como parte del SUTEBA y de la CTERA, y si bien la educación está funcionando de manera virtual, a veces no igual para todes. Hemos descubierto muchas diferencias a la hora de usar la tecnología ¿Qué reflexión hacés al respecto?

– Justamente el SUTEBA hizo una encuesta muy interesante. Tomó un universo de 5038 docentes, divididos geográficamente en proporción a lo que representa el conurbano y el interior, y salen datos que realmente permiten ver cosas que como decías. Uno puede decir que continúa el ciclo lectivo (o mejor dicho los aprendizajes), pero en la encuesta surge que por ejemplo el 43% de los docentes no tiene computadora, no está equipado, y trabajó como pudo con el teléfono celular. Por supuesto no sabemos el dato exacto en los alumnos pero el cálculo es que es todavía mucho mayor la carencia de equipamiento.

Otro dato muy importante, más de 60% de los docentes continuó -además de trabajando en el hogar- yendo a la escuela para preparar los bolsones de alimentos, para repartirlos, para hacer tareas de apoyo en el barrio. Esto es muy encomiable, porque que un poco más del 60% haya estado poniendo el cuerpo, habla extraordinariamente bien del compromiso que tienen los maestros (…)

(…) Ya estamos pensando pensando en el regreso a la escuela. El jueves hubo una reunión con el Ministerio de Educación. Todos los ministros junto con los gremios acordaron que desde agosto, gradualmente, se va a empezar a volver a las aulas. Y se han definido algunos parámetros que se tienen que cumplir sí o sí para que eso pueda suceder: 1- las garantías de medidas de higiene (tapabocas, mascarillas), equipamiento de las escuelas, y sobre todo la información, primero con los docentes y después con los padres.

Esto porque el ministerio hizo una encuesta con más de 2400 casos y más del 40% dice que aunque se abran las escuelas no va a mandar a sus hijos porque tiene miedo, y una cifra más o menos parecida reconoce que los va a mandar -porque no puede no mandarlos- pero que lo va a hacer con miedo. Hay que trabajar sobre ese miedo, con mucha información, para que los padres no vivan esto como un hecho angustiante.

¡Pobre México! ¡Tan lejos de Dios y tan cerca de los EEUU!

¡Pobre México! ¡Tan lejos de Dios y tan cerca de los EEUU!

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Por Nicolás Sampedro*

Desde su llegada al ejecutivo mexicano, y previamente en la campaña electoral, el presidente Andrés Manuel López Obrador utilizó dos ejes. Uno que históricamente había sido patrimonio de la cultura política del país azteca y otro un factor común de las décadas del PRIAN: la no injerencia en asuntos de otros países y el combate a la corrupción.

Desde que AMLO se hizo cargo del ejecutivo mexicano, no han parado de lloverle agresiones de los que habían gobernado el país hasta ese momento, al igual que presiones externas (fundamentalmente gringas) para que no cambie la política exterior del país, precisamente porque Andrés Manuel prometía la no injerencia en asuntos de otros países.

Ha pasado un año y medio y las complicaciones no han cesado. Desde las operaciones mediáticas, las atrocidades que siguen cometiendo los carteles del narcotráfico, las presiones de Trump, las dificultades para cambiar décadas de políticas neoliberales y la aparición de una pandemia que dejó pedaleando a más de une.

ALERTA: ¿Nuevo Golpe?

Hace algunas semanas el presidente mexicano presentó un documento donde se detallaba un plan de la oposición que contaba con dos grandes momentos: ganar la mayoría parlamentaria en las elecciones de 2021, y sacar a AMLO del palacio presidencial en 2022 mediante revocación de mandato.

Es que la política de no injerencia, no sólo era una tradición mexicana. Hoy día cobra primordial relevancia ante la bestial cruzada contra Venezuela, que tiene a los EEUU de Donald Trump y compañía como principales agresores.

También en semanas recientes, el gobierno de los EEUU sancionó unilateralmente a personas y empresas mexicanas por participar de un programa de intercambio de alimentos por petróleo con la República Bolivariana de Venezuela. La propia Reuters había publicado que el FBI y otros organismos gringos estaban operando desde las sombras para tal fin.

Parece que ante la fracasada invasión a Venezuela bajo la “Operación Gedeón”, el gobierno de Trump y los factores de poder norteamericanos volvieron a arremeter con más sanciones y aumento en el bloqueo contra la patria de Bolívar. Los intentos desesperados no hacen más que ratificar que el gobierno de Maduro (al igual que el del mandarín Xi) serán factores claves en la carrera hacia la reelección del magnate de peluquín[1].

Andrés Manuel en números

Pero, siempre hay un pero… Pese a las dificultades, las complicaciones y los palos en la rueda de la oposición mexicana, la figura de AMLO aún cuenta con una aceptación más que considerable.

Recientemente el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), publicó los resultados de la primera encuesta realizada en territorio mexicano. AMLO tiene una imagen positiva del 55,3% y casi dobla el porcentaje de quienes no ven con buenos ojos al presidente de la “Cuarta Transformación”.

Como si fuese poco, entre los 2 principales partidos de oposición (PRI y PAN) apenas cuentan con una intención de voto de poco más del 16%, en tanto Morena supera el 25%. Es evidente que décadas de corrupción y de gobierno neoliberales han quedados marcados a fuego en la memoria viva del pueblo mexicano, y que pese a las múltiples agresiones, AMLO aún tiene mucho apoyo.

Aunque la pandemia del COVID-19 ha impactado en gran medida en las economías de las familias mexicanas (casi un 80% de les encuestades), “4 de cada 10 mexicanos cree que el país vive un momento de transformación profunda y 6 de cada 10 se muestran a favor de la intervención del Estado para reducir las injusticias sociales”.

Evidentemente son muchos los respaldos con los que cuenta Andrés Manuel López Obrador, pero como se puede observar, los poderes fácticos y el imperio, continúan lanzando ataques para erosionar la figura de AMLO y el proceso político que él encabeza.

Los desafíos

La Cuarta Transformación tiene por delante más de la mitad del mandato, y sus conductores tendrán que utilizar el arte de la cintura política para sortear las piedras en el camino que seguirán poniendo tanto desde la oposición, como desde su vecino del norte.

En relación a esto último, habrá que estar atentes a cómo se posicione el país en el Consejo de Seguridad de la ONU, dado que en breve asumirá como miembro no permanente. De igual manera habrá que observar de cerca cómo será su relación con EEUU (de cuasi dependencia económica), con China y Rusia (como dos actores claves en el mundo que se viene), además de evaluar la recomposición de una relación histórica que el país azteca ha tenido con Nuestra América.

Allá por 2018 cuando el mundo se enteraba que por fin les mexicanes habían podido dar el batacazo contra la corruptela del PRIAN, en distintos puntos de Nuestra América celebrábamos esa victoria como propia; porque era un signo de esperanza ante el reflujo conservador neoliberal que aún azota a la región. Sin duda era (y es) una esperanza en esa recomposición de las fuerzas progresistas y revolucionarias del continente, de ese proceso que habían iniciado Fidel, Chávez, Evo, Correa, Lula, Kirchner, entre otres.

¿Actor clave o de reparto?

México puede ser un actor clave en el nuevo panorama regional. Para ello será determinante la relación que pueda establecer con toda Nuestra América, y particularmente con la Argentina de Todes que encabezan Alberto y Cristina Fernández, fundamentalmente en ese rol de mediador ante las agresiones entre vecines o con los gringos.

Este desafío estratégico en términos regionales se tendrá que dar, necesariamente, mientras hacia lo interno hace las transformaciones prometidas y los cambios necesarios para sacar a México del pozo en el que está metido.

Mientras avanza en esos dos caminos, tendrá que burlar los obstáculos que vayan dejando, tanto desde la oposición como desde la Casa Blanca, porque Washington al parecer está trabajando en dos estrategias en paralelo: por un lado la del intento de golpe interno, mientras por el otro, presiona desde sus oficinas y entidades para intentar alinearlo a la persecución económica y financiera contra Venezuela.

El dicho popular dice: ¡Pobre México! ¡Tan lejos de Dios y tan cerca de los EEUU!


* Prefiero escuchar antes que hablar. Ser esquemático y metódico en el trabajo me ha dado algún 
resultado. Intento encontrar y compartir ideas y conceptos que hagan pensar. Me irritan las
injusticias, perder el tiempo y fallarle en algo a les demás.

Referencias:
[1] https://www.alainet.org/es/articulo/207496

El libreto de la derecha en Latinoamérica: Posverdad, blindaje y el arte de ganar

El libreto de la derecha en Latinoamérica: Posverdad, blindaje y el arte de ganar

TIEMPO DE LECTURA: 6 min.

Por Nicolás Centurión*

En Nuestramérica, la derecha juega en equipo, por más que uno de sus principales postulados sea el individualismo y aparente que cada proyecto nacional marcha por carriles separados. Sus intelectuales orgánicos se cuentan de a cientos. Y, entre ellos se encuentran Olavo de Carvalho de Brasil, asesor de Jair Bolsonaro; Axel Kaiser en Chile como asesor de Sebastián Piñera; Maximiliano Aguiar y Hernando Soto en Perú.

En el rubro de las campañas y asesorías políticas se destacan Juan José Rendón, más conocido como J.J. o el mago negro de la

JJ Rendón

política. Es estratega político, activista, psicólogo, publicista y profesor. Sus asesorías han sido exitosas en Colombia, Honduras, República Dominicana, México y Venezuela donde es el responsable del comité de estrategia del autroproclamado pesidente interino Juan Guaidó, hoy en franca decadencia.

Asimismo, ha reconocido haber firmado un contrato en octubre del 2019 con la contratista militar estadounidense Silvercorp. Los vínculos de Rendón se extienden hasta Uruguay donde asesoró al actual senador por el Partido Nacional Juan Sartori, un empresario completamente desconocido para la opinión pública, que nunca había votado en el país y que apenas sabía el himno nacional.

Otro de los destacados es el ecuatoriano Jaime Durán Barba. Formó la empresa de asesoramiento político Informe Confidencial a fines de la década del 70. Durante los 90 fue asesor en Colombia del partido Alternativa Liberal de Pablo Escobar, debiendo abandonar el país tras el arresto de éste. Trabajó en la campaña del empresario Álvaro Noboa en Ecuador y la de Mauricio Macri en Argentina.

Duran Barba junto a Rendón integran el Salón de la Fama de la revista Campaigns and Elections. Sería los premios Oscar de los estrategas políticos. Cierran la nómina de los primeros cinco: Ralf Murphine de Estados Unidos, Carlos Manhanelli de Brasil y José Luis Sanchis de España.

Durán Barba y Macri

Estos asesores han dado un giro a las formas de hacer política con muy buenos resultados e innovadoras tácticas, han sido acusados de hacer “campañas sucias”. Las fake news y la posverdad son cartas predilectas de su arsenal para imponer imaginarios colectivos y sus acciones políticas muchas veces rozan la ilegalidad.

En Uruguay gobierna una coalición de derechas compuesta por cinco partidos. El grupo líder es el Partido Nacional, del hoy presidente Luis Lacalle, y se pueden trazar ciertos paralelismos de este gobierno con la propaganda macrista made in Durán Barba.

Los sindicalistas son blancos predilectos de estas campañas y los califican como mafiosos, a los docentes como corporativos, los jubilados son una carga, el sueldo de los trabajadores un costo y así con cualquier colectivo que se organice y dispute sentido con esta plana neoliberal.

La estrategia duranbarbista desembarcó en Uruguay. La inseguridad fue el caballito de batalla de la derecha. Lograron en noviembre de 2019 la victoria electoral y apenas asumieron en marzo de 2020, varios ministros y parlamentarios declaraban a voz en cuello que habían encontrado un país en ruinas. La pesada herencia.

Además vociferaban que el déficit fiscal le dejaba poco margen de flexibilidad, que había mucha inflación, que Uruguay se iba a convertir en Venezuela (porque Cuba ya había pasado de moda), que los sindicatos dominaban el país. Así se fue poblando el discurso del ciudadano de a pie que repetía como versos las portadas y columnas de los diarios y canales de televisión afines al gobierno.

Así se fue perfilando el sentir de los uruguayos. La tónica duranbarbista marida muy bien con la subjetividad neoliberal. La lógica es simple, enfrentar a trabajadores contra trabajadores, a los penúltimos contra los últimos de la fila.

Duran Barba divide el mundo en dos: el de la ideología y el de los sentimientos. El primero pasó de moda, según él, y ahora sólo importa el segundo. Por eso el presidente Lacalle, en medio de un escándalo por un audio filtrado de la Vicepresidenta, donde al menos comete el delito de tráfico de influencias, sale en todos los canales jugando al “piedra, papel o tijera” con un niño.

Cuando visita un cuartel militar se lo filma comiendo con los soldados, cuando visita el campo se lo ve trepar un alambrado y en cada acto toma los celulares de las personas que le piden fotos y él mismo toma la selfie.

Es un intento de humanizar al hoy presidente , candidato de un partido conservador de larga data en Uruguay y conjugarlo con las estrategias mediáticas del siglo XXI. Hoy la campaña política (que nunca descansa) es un reality show 24/7, donde los debates se dan a través de declaraciones en caliente en reportajes, los discursos se condensan en un tweet y el programa político de un candidato se resume en un video de instagram de un minuto.

En Uruguay se vive un deja vu macrista. La economía se deteriora cada vez más con la excusa del coronavirus. Los desempleados se cuentan de a miles, los que están en seguro de paro también. El salario real de los trabajadores ha disminuido. Por primera vez en 15 años no se convocará a los consejos de salario (ámbito de negociación tripartita entre empresarios, el Estado y los trabajadores) y el aumento de los jubilados será por debajo de la inflación.

Los homicidios no han dejado de aumentar, los femicidios son una tragedia nacional que nadie le pone coto ni se hace cargo. Los discursos de la impunidad leudan cada vez más bajo la complicidad de los liberales y republicanos que miran para un costado, a la vez que se destapa la mayor red de trata de personas y explotación de menores en la historia del Uruguay.

Con todo este panorama la imagen del presidente se mantiene por encima del 50% de aprobación como había arrojado la encuesta sobre el primer mes de su gestión. La pandemia ha sido utilizada por el gobierno de manera certera para sus intereses, el blindaje mediático ha sido eficaz y la difusa y confusa oposición frenteamplista ha hecho gran favor también.

Este blindaje no hubiera sido tal de tener en vigencia, por ejemplo, la ley de servicios de comunicación audiovisual más conocida como Ley de Medios, que en los gobiernos frenteamplistas, durmió el sueño de los justos en algún cajón del Parlamento. Esta ley no era la panacea, pero al menos hubiera hecho contrapeso al poder mediático que reposa en solo tres grupos empresariales (Scheck, Cardoso y Romay), todos ellos panegiristas, por abhora, del gobiernoderechista.

Reflexiones finales 

La derecha pretende correr los ejes que estructuran los debates, pretende negar la existencia de las derechas y las izquierdas, aunque todo el tiempo haga caza de brujas y califique de “zurdo” a todo lo que cuestione al status quo. Se niega a sí misma, pero reconoce a su contrapartida. Tamaña contradicción.

La vieja política de los grandes actos masivos y de líderes preclaros colisiona con las campañas 2.0 en un mundo que avanza hacia el 5G y el internet de las cosas en un mundo pospandémico que obliga a  repensar y reinventar casi todas las estrategias y tácticas que antes eran efectivas.

Para la izquierda es momento de resistencia, pero con eso no alcanza. Pasar a la ofensiva con novedosas propuestas lo demanda la coyuntura en la que transitamos.

Nota publicada originalmente en: estrategia.la


* Licenciado en Psicología, Universidad de la República, Uruguay. Miembro de la Red Internacional
de Cátedras, Instituciones y Personalidades sobre el estudio de la Deuda Pública (RICDP). Analista
asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, estrategia.la)
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