El fiscal de la causa ordenó el cese de la prisión preventiva de Nahuel Morandini y Roque Villegas. Aseguró que antes del 20 de marzo estarían llegando a juicio. Ambos permanecieron, durante los últimos 54 días, en el Establecimiento Penitenciario Nº 1.
Tanto el docente de la Universidad de Salta, Nahuel Morandini y el trabajador independiente Roque Villegas, recuperaron su libertad en las primeras horas de la noche del lunes tras ser detenidos por replicar en redes sociales posteos de tono mordaz sobre el ex gobernador de Jujuy, Gerardo Morales y su esposa. Sucedió luego de que la campaña por su liberación llegara a todo el país. El fiscal jujeño, Walter Rondón, quién pidió su prisión preventiva hace dos meses, debió llamar a una audiencia pública donde finalmente se vio obligado a dar marcha atrás.
Morandini y Villegas fueron encarcelados arbitrariamente entre el 4 y 5 de enero pasado, y quedaron imputados en una causa escandalosa armada a pedido del exgobernador radical, por replicar versiones que durante los últimos días de diciembre circularon en redes sociales y en diarios digitales locales sobre una supuesta infidelidad de la esposa del referente radical jujeño. Ahora, los imputados esperan en libertad el “juicio” plagado de ilegalidades. Sigue la campaña por su absolución definitiva.
Cabe señalar que durante la investigación, la justicia jujeña agravó la acusación por el artículo 139 inciso 2 del Código Penal de la Nación que prevé de 2 a 6 años de prisión a quien “por cualquier acto alterare o suprimiere la identidad de un menor de 10 años”, adjudicándole a los imputados publicaciones que también involucraron a la hija del matrimonio de Gerardo Morales y Tulia Snopek.
La causa, por atacar de forma directa a la libertad de expresión y por sus innumerables irregularidades procesales, cobró relevancia pública al punto de que medios nacionales, muchas veces afines a las políticas de Morales (que encuadró la justificación de las brutales represiones ejecutadas por el exgobernador), se vieron obligados a cuestionar la arbitrariedad del Poder Judicial provincial.
En la audiencia que se convocó para este lunes, el fiscal Rondón escuchó los argumentos a favor y en contra de la libertad de Morandini y Villegas. El funcionario pidió “el cese de la prisión preventiva”, ya que al haber sido elevada la causa a juicio “no hay razones” que justifiquen mantenerlos detenidos. Sin embargo, el fiscal nunca explicó cuáles fueron las razones para mantenerlos presos durante más de 50 días, ya que la prisión preventiva sólo es aplicable en casos de peligro de fuga y/o de entorpecimiento de la “investigación”, lo cuál nunca existió.
Además de la audiencia participaron el organismo de la Niñez del Poder Ejecutivo y su homónimo del Poder Judicial. Según las fuentes oficiales, en todos esos casos se opusieron al fin de las prisiones preventivas, pero “con argumentos que no están vinculados a la finalidad que tienen” esas detenciones. En tanto, las querellas contra Morandini y Villegas, están integradas por la esposa de Morales, Tulia Snopek y por el Consejo de la Mujer de Jujuy (hoy bajo la conducción del gobernador y exministro de Hacienda de Morales, Carlos Sadir).
Por su parte el fiscal de la causa señaló que “el Ministerio Público de la Acusación solicitó el cese de detención de los imputados porque estamos próximos a realizar la audiencia de control de actuación, es decir la finalización de la investigación penal preparatoria”. La medida involucra normas de conducta como “prohibición de acercamiento a las víctimas; prohibición de contacto por redes sociales o cualquier otro medio de comunicación”.
En este sentido, Rondón sostuvo que la imputación “no es por un simple tuiteo, sino que surge de la exportación de las redes sociales más de lo que se extrajo de teléfonos de los acusados y tenemos pruebas suficientes para llevar esta causa a juicio”.
Sobre la investigación a una tercera acusada alegó que “se le atribuye el mismo delito por atentar contra el estado civil en la identidad de una persona menor de 10 años”, y en el marco de la investigación confirmó: “No habrá más detenciones”, no sin antes atribuirles a las tres personas como las que “subieron los posteos y de ahí se viralizó”. “Estamos próximos a culminar la causa y antes del 20 de marzo estaríamos llegando a juicio en este proceso, el cual como tiene una pena mínima a 15 años se realiza con juez unipersonal”, concluyó.
Tras el resultado de la audiencia, familiares de Morandini, difundieron un mensaje en el que afirmaron que “con Nahuel y Roque en libertad, seguimos por el sobreseimiento de ambos y de Lucía González”. En este último caso, se trata de una arquitecta jujeña sobre la que pesa una orden de captura en otra causa calcada a la que tramita el fiscal Rondón y que aún no fue apresada por encontrarse fuera del país.
Alrededor de las 20 horas de este lunes, Morandini y Villegas salieron de la unidad penal del Barrio Gorriti de la capital jujeña, allí fueron recibidos por sus familiares y por activistas de Derechos Humanos, organizaciones sociales y políticas. Bajo un clima de emoción, y dando un duro golpe al autoritario régimen jujeño, se abrazaron con cada uno de sus allegados que llevaban más de ocho horas esperando a las afueras del establecimiento.
Al referirse a la causa judicial, Villegas sostuvo: “Quiero dar las gracias a cada uno de los compañeros que nos apoyaron en esta causa. Tenemos que tomar conciencia que hoy nos tocó a nosotros pero mañana le puede tocar a cualquiera”. “En Jujuy no hay democracia sino una dedocracia; hay una persona que desde afuera maneja los hilos para que los funcionarios judiciales cumplan las órdenes de un patrón y eso se tiene que terminar”, señaló el acusado.
“Soy el único sustento económico de mi familia y tanto para ellos como para mí esta detención nos afectó en general” prosiguió Villegas y afirmó que la detención es “irregular”. Además, consideró que si la causa no tomaba estado público en todo el país, “seguramente ya estaríamos condenados”, de esta manera, agradeció a un sector de la prensa que informó “sobre esta situación injusta”.
A su turno, Morandini declaró que “solo con nuestra voz vamos a frenar todos los atropellos que nos tiene acostumbrado el Gobierno de Jujuy hace más de ocho años”. “No vamos a permitir que la connivencia con el Poder Judicial nos siga persiguiendo como ha perseguido a todos los que se oponen a estas políticas represivas”, completó el profesor universitario. A su vez, rechazó el accionar de la justicia ordinaria local, la cual “les prohibió a nuestros familiares y le sigue prohibiendo hablar de lo que nos estaba sucediendo”.
De esta manera, el cántico que se impuso en la noche del 26 de febrero por parte de los activistas que se acercaron hasta la unidad penal fue: “Olé olé, olá, Nahuel y Roque en libertad porque sabemos que no es delito tuitear”. “Agradecemos todo el apoyo y les pedimos sigan atentos para que no haya ningún retroceso y logremos justicia por todo lo que hicieron pasar a Nahuel, Roque y las familias”, concluyeron en su mensaje los familiares de Morandini.

