Venezuela gana y levanta banderas de paz y soberanía

Venezuela gana y levanta banderas de paz y soberanía

TIEMPO DE LECTURA: 4 min.

La derecha quiere imponer una agenda de odio y agresión. Desconoce el organismo electoral, lanza sus propios resultados y sus planes de asalto del poder.

La derecha se autoproclama vencedora y desde el lunes 29 de julio, muy temprano, lanza el plan preconcebido de atacar instituciones públicas y privadas, y de perseguir a militantes chavistas. Desconoce el árbitro electoral (Consejo Nacional Electoral, CNE), publica sus propios resultados y amenaza y agrede. 

Las acciones callejeras son financiadas por Estados Unidos y el narcotráfico colombiano. Ya hay alrededor de 800 detenidos, según el informe de las autoridades, y la mayoría confiesa que se les ha pagado con dólares y droga. Muchos han sido entrenados por el paramilitarismo colombiano. Es necesario sumar estas líneas porque esto no aparece en los medios hegemónicos. 

Ese intento desestabilizador tiene el soporte de las redes digitales, de las fake news y de una lluvia de videos manipulados, muchos son de otros momentos. Y hasta de otros países. Es el guion golpista que busca sembrar el odio y racionalizar la agresión contra el que piensa distinto.

Esa oposición de derecha rompe con toda regla democrática, quiere imponerse por la fuerza. Usa las elecciones como excusa para intentar sembrar el caos y el pánico. Desecha el diálogo. Desconoce al otro/a y dice que ya ganó.

Por lo visto, no quiere ganar las elecciones. Busca asaltar el poder e hipotéticamente gobernar sin la Constitución ni la ley, desconociendo el sistema político y a otros poderes: electoral, judicial y legislativo.

Las actas como excusa

El domingo en la noche, el organismo electoral venezolano denunció que recibió ataques informáticos. Su página web fue hackeada, con el consabido contratiempo que eso supone. Buscan ralentizar la totalización en desarrollo. No es un asunto menor, como se quiere hacer ver. Detrás de esa operación está Elon Musk y su corporación, y por supuesto cómplices venezolanos, según la denuncia del gobierno bolivariano.

Es indispensable tener en cuenta que el CNE tiene 30 días para publicar en Gaceta Electoral los resultados. Siempre este organismo ha publicado los resultados totales, mesa por mesa electoral.

Anotemos que la oposición de derecha tiene 20 años repitiendo que hubo fraude, sin presentar pruebas. Nunca han reconocido los resultados. En 2006, el anuncio lo hizo el candidato presidencial Manuel Rosales. En 2013, Henrique Capriles Radonski. En 2018, el candidato Henry Falcón repitió el discurso, tal y como ahora lo hacen, en 2024, María Corina Machado y el candidato Edmundo González Urrutia.

Los resultados del domingo

El 28 de julio (28J) Venezuela derrotó las sanciones unilaterales y criminales de Estados Unidos y sus planes intervencionistas. Le puso freno a la derecha neofascista, que en otros lugares avanza con su impronta neocolonial. Le ganó a Elon Musk, un tercio que jugó fuerte, porque busca imponer sus empresas aquí. Venezuela es uno de los pocos países donde no ha llegado Starlink, un lucrativo negocio que se apodera de las telecomunicaciones. «Cuando no entiendas algo pregunta por los cobres (dinero, guita)» .

Gana una Venezuela heroica, como el título del libro de Eduardo Blanco. Votó con todo en contra y con desventaja, por el efecto de las sanciones y el malestar, y la lógica inconformidad que eso genera. Sin embargo, pasamos la dura prueba. Se salvó la patria.

En medio de las dificultades, la paz resulta muy valiosa, para todos y todas, no importa cómo hayamos votado. Eso frena los planes violentos de los grupos derechistas que encabezan Machado, González Urrutia, López y los demás. 

Desde mucho antes del 28J se fue tejiendo la narrativa del fraude. La derecha dijo, hasta horas antes de los comicios, que las elecciones no guardaban parámetros democráticos, que la tarjeta del candidato de la MUD sería inhabilitada, que ya habían ganado, sin contar los votos; que se suspenderían las elecciones, que no se les permitiría testigos en las mesas electorales, que anunciarían sus propios resultados, que traería a sus propios veedores internacionales, como lo intentaron a sabiendas que eso no es posible, ni legal, ni sucede en ninguna parte.

Hicieron un discurso para la tribuna externa y el 28J movilizaron a opositores frente a algunas embajadas. En Argentina lo hicieron con la presencia de la Ministra de Seguridad, en abuso y desconocimiento de las convenciones internacionales. En ese plano internacional, es claro que intentan de nuevo reeditar algo parecido al fracasado Grupo de Lima. La derecha de Javier Milei, de los españoles VOX y Partido Popular y otros, cree que puede golpear con impunidad la revolución bolivariana, y como lo hacen en sus países, borrar una cultura de derechos y soberanía.

Este es otro país

Comienza otra etapa para la revolución bolivariana. Este es otro país. Es como dice Atilio Borón: «Estamos en presencia de un momento de refundación del proyecto iniciado por el presidente Hugo Chávez en 1999».

Hay que romper la lógica de gestión burocrática que se ha mantenido. ¿Un funcionario es un servidor público? ¿Cómo hacemos para atender las deficiencias de dos áreas centrales: salud y educación? ¿Cómo valorar la crítica y no condenar al mensajero? ¿Y lo de estos salarios que no son? ¿De qué socialismo hablamos en este contexto de ecosistema digital, inteligencia artificial y algoritmos desatados? ¿Cómo hacer para generar transformaciones de verdad y no ser «servidores de pasado en copa nueva»?. 

Orlando Villalobos Finol

Profesor y periodista venezolano. Periodismo interpretativo con memoria e identidad. Tejedor de crónicas. Profesor en periodismo y comunicación. Autor de Reinventar la comunicación.


¡Sumate a la Comunidad Trinchera y aportá a la Comunicación Popular!

Tu aporte es esencial para que el Multimedio Trinchera pueda continuar con la construcción de una comunicación por y para el pueblo. Agradecemos el apoyo de nuestra comunidad y te invitamos a suscribirte para afianzar día a día nuestra Trinchera y disfrutar de un montón de beneficios.

Estrategias contra el asedio imperialista

Estrategias contra el asedio imperialista

TIEMPO DE LECTURA: 5 min.

De cara al proceso electoral que tendrá lugar el 6 de diciembre en Venezuela, en los últimos meses comenzaron a olfatearse algunas rupturas en el Gran Polo Patriótico como frente de unidad. Sin ir más lejos, hace algunas semanas, el presidente Nicolás Maduro, durante una videoconferencia ante el Congreso Bolivariano de los Pueblos, utilizó el concepto de bloque histórico (acuñado por Antonio Gramsci), como línea central de su discurso, para referirse a la encrucijada nacional entre las presiones internacionales, la lucha contra la pandemia del Covid-19 y el escenario electoral venidero.

La evocación de Maduro al concepto de Gramsci no es casual por el momento político que atraviesa el chavismo en relación a lo comentado con anterioridad. Y, a priori, la referencia no parece solamente indicar la necesidad de mantener el bloque político para ganar las elecciones, sino que también parece hacer referencia a la necesidad de relanzar, de alguna manera, los principios fundacionales del chavismo: ir a la disputa por el modelo, por la construcción de hegemonía.

El costado B del frente de unidad

Tanto el Partido Comunista de Venezuela como facciones de Patria Para Todos decidieron no participar del proceso electoral como aliados del Gran Polo Patriótico. En este sentido, observamos a un sector de la izquierda ofertando candidatos independientes e ignorando los llamados que el gobierno venezolano ha realizado para mantener la unidad y recuperar la Asamblea Nacional que perdió en 2015. 

Cabe resaltar que durante cinco años, ese lugar le ha servido al antichavismo para conjurar el bloqueo contra venezuela, deslegitimar el resto de los poderes del estado y conspirar a favor de operaciones golpistas. Todo, obviamente, bajo la expresa tutela de Estados Unidos.

De cualquier manera, las posturas divisionistas con respecto al chavismo no son inéditas. En 2017, cuando Maduro convocó a una Asamblea Nacional Constituyente -el mismo año en el que también se celebraban elecciones para elegir gobernadores y alcaldes- el PCV, PPT y el Movimiento Electoral del Pueblo apoyaron, en las elecciones para la alcaldía de Caracas, la candidatura del ex ministro de Comercio Eduardio Samán en oposición a la candidata que proponía el Partido Socialista Unido de Venezuela, Erika Farías. Como en aquel entonces, un sector de la izquierda no supo estar a la altura y reconocer las complejidades del momento histórico.

El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) inscribió sus candidaturas, entre las cuales figuran las de les dirigentes Diosdado Cabello, Jorge Rodríguez, Cilia Flores, Iris Varela, entre otres. La lista incluyó a candidates de 9 partidos aliados, y en ese sentido, pese a las incertidumbres, el mapa interno ha quedado en gran parte aclarado. Esto no quiere decir que se calmen las aguas porque de seguro vendrán más sanciones y operaciones encubiertas. 

La llave maestra

Con miras a estas pequeñas fracturas, y pensando en otras estrategias de cara a las elecciones del 6 de diciembre, el presidente Maduro firmó la semana pasada un decreto de indulto presidencial a 110 polítiques de la oposición. De esta manera el gobierno venezolano busca la reconciliación nacional y que se reencaucen todas las acciones de todos los actores por las vías constitucionales. La idea es que la situación pueda aprovecharse como oportunidad para que el próximo 6 de diciembre Venezuela pueda demostrar la solidez de su democracia. 

La decisión no fue difícil de digerir para algunos sectores del chavismo, pero la jugada también es parte del cuadro de excepcionalidad política con el que lidia Venezuela. Y un dato no menor es que la Unión Europea aplaudió los indultos.

¿Y la oposición?

El decreto presidencial llegó en un momento donde se han multiplicado los desencuentros opositores respecto a qué hacer de cara al 6 de diciembre. Desde la casa blanca se estaba promoviendo una estrategia abstencionista, algo que a nivel nacional defendía y encarnaba Juan Guaidó, que cuelga de unos hilitos a punto de cortarse, pero que sigue siendo el hombre elegido por Washington.

Fuente: Agencia EFE

Esta estrategia tuvo un lindo revés cuando el dirigente opositor Henrique Capriles (quien peleó elecciones presidenciales frente a Chávez y a Maduro) anunció de manera pública que apostaría a las parlamentarias. Algunos se fueron sumando a sus intenciones, como Stalin Gonzalez, quien era parte del núcleo cercano a Guaidó y anunció su alejamiento del partido Un Nuevo Tiempo para apostar a la contienda electoral. Esos cambios de posición, insinuados con cierta anterioridad, vinieron a confirmar que una parte creciente de la oposición venezolana no solamente descree de la opción abstencionista, sino que ha tomado distancia de la estrategia diseñada desde Estados Unidos.

Esto no quiere decir que Estados Unidos ya no tenga estrategia. Hace algunos días, James Story, quien está a cargo de la embajada virtual de los Estados Unidos en Venezuela, realizó una transmisión en vivo con Guaidó para subrayar que lo van a seguir apoyando, aún después de las legislativas. En esta misma transmisión fue anunciado que Estados Unidos podría declarar a las Fuerzas de Acciones Especiales de Venezuela como una organización terrorista y pactar un acuerdo entre la DEA y Guaidó.

Aunque pareciera que el camino del asedio se va agotando, la postura de Estados Unidos se mantiene: Washington no va a reconocer las elecciones del 6 de diciembre, llama a mantenerse detrás de Guaidó y amenaza con nuevas sanciones económicas. Y pese a que habrá elecciones en noviembre para ver quién ocupará el sillón presidencial del Despacho Oval, la política de agresión constante no sufrirá demasiadas modificaciones.

En este sentido, el diálogo que comenzó a entablarse con la Unión Europea, organismo invitado por el gobierno a observar las elecciones del 6D, también representa estrategia del chavismo en la lucha por el rescate de la institucionalidad y la estabilidad política. Europa quería alejarse de la visión yanqui, intenta recuperar peso y quizás pueda aportar algo en la estabilización del camino democrático, para dejar con menos espacio a cualquier factor golpista.

Miranda Cerdá Campano
Miranda Cerdá Campano

Nací en Chubut y milito porque no hay mejor manera de transformar el mundo. Soy hincha fanática de San Lorenzo y fundamentalista de la Vuelta a Boedo. Lloro por todo y no sé cómo explicarle a la gente lo mucho que me gusta la palta. 

1