El diagnostico sobre el impacto de la inflación en la canasta familiar fue hecha sobre 57 productos en 20 localidades del conurbano bonaerense.
Un relevamiento hecho por el instituto de Investigación Social, Económica y Política de Ciudadana (ISEPCi), reveló que en marzo una familia necesitó un total de $38.000 pesos para comprar la canasta básica familiar, un 20,7% más que en diciembre del 2021, cuando se necesitaban aproximadamente $31.000 pesos.
La evaluación fue hecha por el Indice Barrial de Precios (IBP), sobre un total de 57 productos pertenecientes a la Canasta Básica de Alimentos (CBA), en alrededor de 750 comercios pertenecientes a 20 distritos del counrbano bonaerense.
Los rubros que más aumentaron este fueron el de verdulería en un 33%, seguido de los productos de almacén (23%) y finalmente carnicería (12%).
La misma familia de cuatro personas que en febrero necesitaba $84.700,02, para solventar sus gastos esenciales que componen la Canasta Básica Total (CBT); un mes después requirió para adquirir los mismos productos $87.280,91. Es decir 3,04% más que en el mes anterior; mientras que en el primer trimestre el valor de la CBT aumentó un 16,20%.
Mientras que en 2021 los salarios de los trabajadores registrados aumentaron un 56%, los precios subieron un 51%, marcando una recuperación del 5%. Sin embargo, por el lado de los trabajadores informales se registró que su salario aumento un 40% lo cual derivó en una pérdida del 11% para este sector. Todos estos datos fueron estudiados y publicados por el INDEC.
“Durante el primer trimestre de este año la inflación fue más de 20% y casi no hubo subas salariales. El ‘efecto arrastre’ de la inflación en los alimentos arrasa con cualquier recuperación salarial que se pudiera haber producido en un año de crecimiento de 10% en el PBI, y sigue hundiendo el poder adquisitivo de los asalariados del sector informal“, explicó Isaac Rudnik, economista autor del informe.
