El informe elaborado por la Oficina de la Mujeres de Corte Suprema de Justicia reveló que hubo un femicidio cada 35 horas.
De cara a la próxima movilización de Ni Una Menos, el viernes 3 de junio, la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación difundió la actualización del Registro Nacional de Femicidios correspondiente al 2021. El informe, registra 251 víctimas letales de violencia de género, un promedio de un femicidio cada 35 horas. De ellas, 231 fueron víctimas directas y, al menos, 20 fueron vinculadas.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación elabora un registro de datos estadísticos de las causas judiciales en las que se investigan muertes violentas de mujeres cis, mujeres trans y travestis por razones de género, desde el año 2015. Para impulsar esta tarea la OM contó con la colaboración de todas las jurisdicciones del país, quienes desde entonces aportan la información relativa a las causas, las víctimas y los sujetos activos, información que sirve como base para la elaboración de políticas públicas.
Con respecto a los hechos, el 81% de los femicidios directos fueron en un contexto de violencia doméstica. Mientras que el 75% de las víctimas directas de femicidio fue asesinada en viviendas: 39% en la que compartía con el sujeto activo, 25% en su propia vivienda, ocho por ciento en la vivienda del sujeto activo y tres por ciento en otras viviendas. Además, en el 31% de los casos totales, se usó un arma blanca para cometer el femicidio, en el 25% armas de fuego y en el 24% fuerza física. En algunos casos, se empleó más de un medio.
La mayor cantidad de femicidios fueron durante los fines de semana extendidos (de viernes a la noche a lunes a la madrugada). A su vez la edad de la mayor cantidad de víctimas directas de femicidios estuvo entre la franja de los 25 y los 44 años, con un total de 116 casos. Mientras que entre los 18 y los 24 años se registraron 36 víctimas, y de más de 60 años, 32. La edad promedio de las víctimas directas de femicidio fue de 37 años.
En este sentido al menos 22 se encontraban desaparecidas o extraviadas antes de confirmarse el femicidio, 12 eran migrantes internacionales, siete estaban en situación de prostitución, seis estaban embarazadas, cinco estaban en situación de calle y Cuatro de las víctimas eran personas con discapacidad. En el 88% de los casos, la víctima conocía al sujeto activo, y en el 39% convivía con él y en el 62% de los casos eran pareja o expareja. Cabe destacar que el total de las víctimas, tenían a su cargo 182 niñas, niños y adolescentes.
De acuerdo con los datos relevados, el promedio de edad de los victimarios activos de femicidio directo fue de 40,4 años. Al menos 25 pertenecían a alguna fuerza de seguridad, y 19 de ellos estaban en actividad al momento del hecho. Además, al menos el 20% tenía algún tipo de consumo problemático de sustancias, ya sea de manera habitual o al momento del hecho. Se destaca el alcohol entre las sustancias consumidas, pero también la cocaína y la marihuana y 11 sujetos activos tenían antecedentes psiquiátricos.
El 93% de los femicidas fueron identificados. A su vez de ellos al 31 de diciembre de 2021 el 66% estaba privado de la libertad con causas en trámite o condena; el 19% se había suicidado, mientras que el uno por ciento falleció por otras causas; el 7% restante permanecía sin identificar a la fecha de corte; el 4% se encontraba en libertad; el 3% estaba en otras situaciones o no se contaba con datos al respecto.